Maserati Levante, el renacimiento de una marca legendaria

Maserati lanza al mercado un nuevo Levante, un modelo que se integra en el segmento todocamino 'premium' que incorpora una sofisticada suspensión neumática de altura regulable y potentes motores desde un turbodiésel de 275 caballos hasta el gasolina más potente, fabricado por Ferrari, con 430 caballos. Dos acabados nuevos, el GranLusso más lujoso y el GranSport con un enfoque más deportivo y un precio de partida de 85.000 euros.

La marca italiana se ha posicionado en los últimos años con una amplia gama de modelos que cubre el 100% del segmento de los vehículos 'premium'. Sin duda el momento clave en esta evolución ha sido el lanzamiento del Levante, el todocamino de lujo caracterizado por ese toque deportivo que impone la marca italiana a todos sus modelos.

La llegada del todocamino al mercado de los coches de lujo ha supuesto una completa revolución. En estos momentos, el 57% de las ventas de vehículos 'premium' corresponden a modelos todocamino, eso sí, con un enfoque más o menos campero. Pero sobre todo, son vehículos más altos, más amplios y de mejor acceso a su interior. Y por ello también mucho más versátiles, pero que proporcionan el mismo dinamismo que una gran berlina.

Y de ahí el éxito de Maserati, que ha pasado de vender menos de 7.000 vehículos en todo el mundo en el año 2010 a rozar las 60.000 unidades en el año 2017 según las previsiones de la marca italiana. Y la previsión es seguir creciendo en los próximos años.

La evolución en el mercado español ha sido aún mejor. En el año 2010 se matricularon en España 36 Maserati, siendo el más vendido el Quattroporte, con 15 unidades. En 2013 fueron 29 unidades y eso pese a que ya habían comenzado las primeras entregas del Ghibli, un modelo muy importante para la nueva Maserati, del que se matricularon ese año 11 unidades. La previsión para este año es que en España se matriculen 485 unidades de la marca Maserati, de las que un 66% serán Levante y un 22% del Ghibli. Para ello, también su estructura comercial ha cambiado mucho en estos años. Si en 2013 había solo cuatro concesionarios en España que cubrían toda la península ibérica, en estos momentos son 17 los concesionarios operativos de la marca.

Esta evolución ha sido posible gracias a numerosos cambios industriales. Si la producción de Maserati se centraba originalmente en Módena, en estos momentos hay tres fábricas diferentes que producen los nuevos modelos. Los Gran Turismo y Gran Cabrio se fabrican en Módena, pero los Ghibli y Quattroporte se hacen en Grugliasco y el Levante se produce en la planta de Mirafiori. Y en cuanto a motores, una parte se hace en la localidad de Ferrara y los gasolina los construye Ferrari en Maranello.

Dos años después del lanzamiento del Levante, la marca italiana introduce una primera renovación del modelo, con cambios pequeños pero muy interesantes, aunque sin duda el tema clave es la modificación de la estructura de su gama. La nueva estrategia, inaugurada por el Quattroporte en 2017 y continuada con el Ghibli, llega al Levante e introduce dos nuevos acabados, los GranLusso y GranSport disponibles con las diferentes motorizaciones.

El Levante, como el resto de modelos que llevan el sello de Maserati, representan lujo, confort y un gran estatus, pero siempre con ese toque característico de deportividad de todos los modelos de la marca de Módena. Pues bien, desde ahora se ofrecen estas dos gamas en las que se apuesta más por una de estas características o por la otra. Los que busquen un coche muy elegante y lujoso, pero sin renunciar a la deportividad, tienen el GranLusso. Y para los que quieren un carácter aún más deportivo, sin renunciar al lujo, confort y la buena calidad de terminación, la línea GranSport.

Otro de los cambios importantes es la llegada de una nueva dirección eléctrica, que ofrece más suavidad cuando se utiliza en ciudad o en una conducción más suave, pero que al mismo tiempo mejora la ya de por sí buena precisión de guiado cuando circulamos deprisa con el coche. También sirve para mejorar las sensaciones del conductor al filtrar mejor las irregularidades de la carretera.

También son importantes las mejoras introducidas en los sistemas de ayuda a la conducción. Ahora dispone de un control de crucero adaptativo más preciso, un sistema de mantenimiento de carril y de asistente de ángulo muerto que evita que cambiemos de carril cuando hay un coche circulando por esa zona. El lector de señales de tráfico también está disponible para el nuevo modelo.

Para realizar la primera toma de contacto con este modelo tuvimos la oportunidad de hacer un recorrido entre Madrid y Ciudad Real, para poder comprobar su magnífico comportamiento en carreteras de todo tipo. Es un vehículo que, con el motor gasolina con el que hicimos la prueba, ofrece el comportamiento de una gran berlina, es amplio y muy confortable, pero también muy deportivo. El conductor siempre tiene la sensación de tener bajo el pedal del acelerador una gran reserva de potencia. Y todo con la máxima seguridad y un control total de la situación.

Es por ello un buen coche para viajar, pero que ofrece, al llegar al final de la carretera, unas posibilidades muy buenas de uso fuera del asfalto. No es fácil que una persona que se gasta 85.000 euros en un todocamino de lujo quiera hacer mucho campo con su vehículo. Pero lo más destacable es que si realmente quiere hacerlo, las opciones son muy buenas.

Sin duda la clave para este comportamiento más campero tan sorprendente en un vehículo como este es la suspensión neumática de altura regulable. Este Levante ofrece nada menos que seis posiciones de altura diferentes, desde la más baja de aparcamiento para poder entrar cómodamente al vehículo. Luego tenemos dos modos para conducir rápido en carretera, los Aero1 y Aero 2 y el modo normal. Y por encima encontramos el modo off-road y aún más arriba el off-road2, especialmente pensado para poder superar un obstáculo muy complicado a velocidad muy lenta. En total, nada menos que 8,5 cm de diferencia entre la altura más baja de aparcamiento y la del modo Off-road 2.

Esto unido a un sistema de tracción 4x4 con reparto de par gestionado electrónicamente hace que este modelo pueda, si realmente su usuario quiere hacer todoterreno, superar zonas muy complicadas. En nuestra prueba sobre unos caminos bastante complicados, con mucha piedra suelta y con fuertes desniveles, el Levante se comportó casi como un buen todoterreno, aunque lógicamente sin marchas reductoras.

El sistema de suspensión activa también permite contar con diferentes modos de conducción en los que junto al funcionamiento de la suspensión también se ajusta el cambio o la dirección. Estos modos son cuatro que se seleccionan desde un pulsador junto a la palanca de cambios. Estos son Normal, Off-road, Sport y un modo de invierno.

En su aspecto mecánico, el nuevo Levante se ofrece con tres motorizaciones diferentes. El punto de partida, y también el más demandado, es el turbodiésel con un motor V6 de 275 caballos que destaca por su elevado par motor, su buena elasticidad y su consumo más ajustado, con un valor medio de 7,2 litros. Y en gasolina, el mismo motor V6 Turbo de 2,9 litros con dos cifras de potencia, 350 o 430 caballos. En este último caso los consumos homologados respectivos son de 10,7 o 10,9 litros.

Estos son los precios de la gama del nuevo Levante, ya disponible en el mercado español:

• Maserati Levante V6 275 CV, 85.050 euros
• Maserati Levante V6 350 CV, 97.400 euros
• Maserati Levante V6 430 CV, 108.900 euros
• Maserati Levante GrandSport V6 275 CV, 96.150 euros
• Maserati Levante GrandSport V6 350 CV, 107.700 euros
• Maserati Levante GrandSport V6 430 CV, 119.200 euros
• Maserati Levante GrandLussoV6 275 CV, 96.150 euros
• Maserati Levante GrandLusso V6 350 CV, 107.700 euros
• Maserati Levante GrandLusso V6 430 CV, 119.200 euros