Tomar el aire a 228km/h, el último capricho caro de BMW

BMW destaca por ofrecer en sus gamas vehículos muy funcionales, modelos como el Serie 3 o el Serie 1, con motores eficientes pero en los que sin duda la clave es la deportividad. Pero también ofrece otros modelos que son un auténtico capricho para poder disfrutar no solo de la conducción más deportiva, sino también de un agradable paseo.

En este segundo caso es donde se posiciona este BMW 420d Cabrio que hemos probado. Y no es que no se pueda usar a diario como vehículo para ir al trabajo o para hacer gestiones, es que su característica fundamental de ser un descapotable de cuatro plazas lo convierte en una muy buena opción como un coche de capricho.

Es un capricho caro, porque su precio de lista es de 53.100 euros. Pero es un precio en línea con sus rivales de origen alemán, las variantes descapotables de Audi o de Mercedes. Este modelo que hemos probado incorpora el motor diésel menos potente de la gama, de 190 caballos, pero con el cambio automático de ocho marchas. El resultado es bastante satisfactorio, porque el motor es muy potente, nada menos que 190 caballos con los que este modelo alcanza los 228 km/h de velocidad punta, mientras que su aceleración de cero a 100 km/h la completa en ocho segundos.

Permite una conducción deportiva, como todos los modelos de la marca bávara, y además su caja de cambios automática de ocho marchas ofrece un funcionamiento muy agradable, cómodo cuando usamos el modo automático, que es lo más racional, pero también más deportivo cuando gracias a las levas activamos el modo 'seudomanual' con unos cambios bastante ágiles.

Su interior acoge perfectamente a cuatro personas, que viajan muy cómodamente, ya que las dos plazas traseras son amplias, tanto en anchura como en espacio para las piernas. Además, es un vehículo muy bien terminado, que puede ser aún más llamativo si elegimos una tapicería como la de nuestra unidad de pruebas, con los asientos en color blanco y en contraste con el negro del salpicadero. Eso sí, cuando llevamos el techo abierto, rodar por carretera por encima de 100 km/h hace que los ocupantes de las plazas traseras viajen más incómodos.

El BMW Serie 4 Cabrio cuenta con un sistema de techo rígido retráctil, que hace que, pese a ser un capricho, en realidad sea un vehículo que se puede utilizar a diario, ya que combina lo mejor de dos mundos. Y es que este es un modelo de tipo cupé para el uso en los días malos o cuando hace mucho frío por su techo metálico. Sin embargo, para cuando el buen tiempo aparece, tendremos un coche para disfrutar de la naturaleza y para sacar un mejor rendimiento a nuestros desplazamientos.

Tiene todos los elementos clave de los modelos de BMW, como el selector de modos de conducción, que permite elegir entre un modo más confortable o los más deportivos, más en línea con el cliente habitual de los modelos de la marca. En cualquier caso, con este modelo encontramos un vehículo con unas suspensiones bastante rígidas, que proporcionan un comportamiento muy deportivo. Destaca la gran precisión de la dirección mediante un volante bastante grueso y con un tacto muy agradable. Es un modelo de propulsión trasera, lo que lo hace aún más divertido de conducir.

El Serie 4 ofrece una amplia gama de opciones que comienzan en esta versión diésel de 190 caballos o en el 320i de acceso en gasolina de 184 caballos. Pero su gama de motores llega hasta los 326 caballos, y eso sin contar el M4, un verdadero devorador de kilómetros, un vehículo muy radical con la máxima deportividad.

Ficha técnica

• Motor: cuatro cilindros en línea
• Potencia máxima: 190 CV a 4.000 rpm
• Par máximo: 400 Nm desde 1.750 rpm
• Cilindrada: 1.995 cc
• Combustible: gasóleo
• Velocidad máxima: 228 km/h
• Aceleración de cero a 100 km/h, 8,0 segundos
• Tracción: trasera
• Consumos homologados (urbano/ extraurbano/ mixto): 5,2/ 3,9/ 4,4 litros
• Dimensiones (longitud/anchura/altura), 4,63 x 1,82 x 1,39
• Capacidad maletero: 370 litros
• Peso en vacío: 1.770 kg
• Precio: 53.150 euros