BMW 225 XE, un buen cóctel de compacto híbrido enchufable y tracción 4x4

BMW es una marca muy innovadora que siempre ha basado su estrategia en la deportividad y el placer de conducir. Pero con este modelo que hemos probado esta semana, se ha superado en muchos campos, porque este es un coche muy innovador para la marca alemana.

Lo es porque el Active Tourer ya es un modelo diferente para BMW: es su primer monovolumen y también por primera vez es un vehículo de tracción delantera. Con ello, ha logrado hacer un modelo de dimensiones bastante compactas en el exterior, pero muy amplio y con gran sensación de habitabilidad por dentro. A este concepto de vehículo le añade ahora la última moda dentro de la marca alemana, el sistema de hibridación eléctrica. Así consigue que sea un coche moderno y con un gran futuro en unas ciudades cada vez más contaminadas y con más limitaciones al tráfico rodado.

Este modelo tiene una autonomía en el modo solo eléctrico de hasta 41 kilómetros, según los valores de homologación, aunque en realidad no es fácil hacer más de 30 km reales en esta utilización cero emisiones si se conduce con suavidad. Lo mejor es que cuando se acabe la batería no nos quedaremos tirados y siempre estará el motor de gasolina para seguir circulando.

Es decir, que el 225 XE permite tener un coche para el uso diario en ciudad en modo eléctrico si no hacemos demasiados kilómetros y utilizar ese mismo coche para hacer viajes o desplazamientos más largos los fines de semana. Pero hay que tener en cuenta que tiene un depósito de gasolina bastante pequeño, de solo 36 litros, lo que limita un poco su autonomía en el modo no eléctrico.

Tiene otra virtud añadida, y es que es un vehículo de tracción 4x4, lo que facilita también su uso en condiciones de baja adherencia, por ejemplo ir a esquiar o hacer alguna excursión por zonas de mucho frío en las que puede haber nieve. Eso sí, no es un modelo de tipo todocamino sino que su enfoque es el de un familiar. Su tracción total se debe a que los dos motores funcionan por separado. El de gasolina mueve las ruedas delanteras, y es un propulsor de tres cilindros con 136 caballos. Por su parte, las ruedas traseras se mueven por el motor eléctrico de 88 caballos. Y con ello, este modelo puede ser tracción delantera, o trasera, o a las cuatro ruedas según el momento y las necesidades.

Es un coche muy agradable de conducir, porque cuando se hace un uso tranquilo en ciudad es muy silencioso, pero cuando se busca un poco más de prestaciones, entonces aparece la deportividad propia del resto de modelos de la gama BMW. El tiempo de recarga es bastante corto, de algo más de tres horas en un enchufe doméstico, que se reducen hasta menos de dos horas en uno de alta intensidad.

El BMW 225 XE está cargado de virtudes y es un modelo que permite dar un paso adelante hacia la movilidad del futuro, pero su punto negativo es el precio. Está claro que la tecnología innovadora y el equipamiento muy completo hay que pagarlos, pero la ausencia de un plan Movea de ayuda a la compra de vehículos de energías alternativas hace que este coche esté muy cerca de los 40.000 euros.

Ficha técnica

Conjunto motriz: 224 CV y 385 Nm.

Motor de gasolina: tres cilindros en línea.

Potencia máxima: 136 CV.

Par máximo: 220 Nm.

Cilindrada: 1.500 cc.

Combustible: gasolina.

Motor eléctrico: 88 CV de potencia y 165 Nm de par.

Velocidad máxima: 202 km/h.

Aceleración de 0 a 100 km/h, 6,7 segundos.

Tracción: delantera, trasera o 4x4.

Consumo homologado en ciclo mixto: 2,0 litros.

Dimensiones (longitud/anchura/altura), 4,34 x 1,80 x 1,55.

Capacidad maletero: 400 litros.

Peso en vacío: 1.730 kg.