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Mazda 3 1.5D, un compacto de 3,8 litros de consumo homologado
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Mazda 3 1.5D, un compacto de 3,8 litros de consumo homologado

El nuevo propulsor destaca por su buena elasticidad y por un nivel de ruido y vibraciones especialmente bajo. Mazda sigue empleando motores de más cilindrada, pero también más eficientes

Mazda amplía la gama de su modelo compacto, el Mazda 3, con una nueva variante de gasóleo de acceso que ofrece una potencia de 105 caballos y un consumo homologado de 3,8 litros. Un coche a la venta desde 22.525 euros de precio oficial que con los descuentos puede llegar hasta los 19.075 euros.

La marca japonesa siempre innova en sus modelos, y lo hace de una manera diferente al resto. Si otros fabricantes hacen motores de gasolina más pequeños con turbo, Mazda sigue empleando motores de más cilindrada, pero también más eficientes. Ahora lanza un motor de gasóleo de cilindrada más pequeña, de solo 1,5 litros, pero también con una tecnología innovadora en muchos aspectos.

Este propulsor destaca por tener la menor relación de compresión del mercado en mecánicas de gasóleo, de solo 14,8 a 1. Esto, unido a la puesta en marcha de un nuevo sistema de reducción de vibraciones en cada cilindro, hace que el motor resulte muy silencioso y también agradable de conducir. El otro aspecto innovador del nuevo motor de Mazda es que emplea un turbocompresor muy pequeño, lo que hace que sus inercias sean casi inexistentes y por ello que su funcionamiento sea más suave y progresivo que en otros propulsores diesel equivalentes.

También incorpora más innovaciones técnicas, como el empleo de un intercooler para refrigerar los gases de escape que está refrigerado por agua. Y todo ello con el objetivo de conseguir un motor fácil de conducir, cómodo y con un consumo ajustado. Y en ese sentido la prueba es su consumo homologado de solo 3,8 litros. Además, Mazda es una de las marcas que tiene una diferencia más pequeña entre los valores homologados y los reales en conducción en tráfico normal.

Hemos podido hacer una primera toma de contacto con el nuevo modelo en las proximidades de Barcelona, y el resultado es realmente bueno. El coche se conduce con una gran suavidad y lo más destacable es que es un motor que parece casi eléctrico. La razón fundamental es que sube de vueltas de manera muy uniforme y a lo largo de un amplio espectro, pero también el hecho de que es un motor con un funcionamiento muy silencioso.

Tiene una gran elasticidad. El motor muestra ya bastante empuje desde poco más arriba de las 1.000 revoluciones, funcionando con toda su fuerza desde las 1.500 y hasta casi las 3.000 revoluciones. Pero lo más llamativo es que pese a ser un propulsor de gasóleo, en realidad en la parte más alta del cuentavueltas se comporta como uno de gasolina. Y es que sube por encima de esas 3.000 vueltas con bastante alegría y pudiendo llegar hasta casi las 5.000. Y eso es algo que solo los motores de gasolina pueden ofrecer.

La verdad es que Mazda siempre está innovando, haciendo las cosas de manera distinta a los demás fabricantes, y aunque en este caso parecía difícil poder lograrlo, nuevamente lo ha conseguido con este motor diesel pequeño, que funciona por su parte baja como un buen motor de gasóleo, con un consumo de carburante muy ajustado, pero que en la parte alta funciona casi como uno de gasolina.

Este nuevo motor se ofrece en ambas variantes de carrocería, la del modelo compacto de cinco puertas y también en la versión SportSedán, con una carrocería de una berlina con su tercer volumen separado. La diferencia entre ambas versiones de carrocería supone un sobrecoste de 500 euros para la versión larga.

En cuanto a su equipamiento, también es bastante completo. En esta versión 1.5D se ofrecen dos terminaciones diferentes, la Style de acceso y por encima la Luxury. Además, la marca ofrece diferentes packs de acabado, con una buena relación calidad/precio que permite completar el equipamiento a medida de las necesidades de cada uno.

El Mazda3 cuenta con una carrocería ligera, que parte de los 1.185 kg, pero al mismo tiempo es uno de los modelos más grandes del segmento compacto, con sus 4,46 metros o 4,58 en el caso del SportSedán. Esto le permite ofrecer un habitáculo bastante amplio y un maletero de 364 litros en el caso del modelo compacto, mientras que en el SportSedán alcanza los 419 litros.

Cuenta con un cuadro de instrumentos diferente al del resto de modelos compactos, con un gran reloj central y con dos indicadores a ambos lados del mismo, que se ve completado con una pantalla táctil de 7 pulgadas y con el sistema head up display. Con la llegada de este nuevo motor, el Mazda3 incorpora nuevos detalles de equipamiento, como son la radio digital DAB, la cámara trasera y la regulación en altura en el asiento del pasajero.

Un aspecto destacado del Mazda 3 es el sistema de seguridad que incorpora. Bajo el nombre de i-Activsense, es un equipamiento basado en sensores de radar y concebido para ayudar al conductor. Cuenta con elementos como el aviso de obstrucción delantera (FOW), el sistema de asistencia a la frenada en ciudad (SCBS), el sistema de alerta de cambio involuntario de carril (LDWS) y el control de crucero adaptativo (MRCC).

Mazda amplía la gama de su modelo compacto, el Mazda 3, con una nueva variante de gasóleo de acceso que ofrece una potencia de 105 caballos y un consumo homologado de 3,8 litros. Un coche a la venta desde 22.525 euros de precio oficial que con los descuentos puede llegar hasta los 19.075 euros.

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