Sandero, el mejor coche barato

España vive tiempos de crisis en muchos sentidos, pero sobre todo en el económico. Y por ello, este nuevo Dacia Sandero es una muy buena alternativa para muchos clientes que buscan un coche que les asegure movilidad pero por un precio ajustado. Es una muy buena alternativa a un coche usado, y es muy razonable por prestaciones, por equipamiento y por acabado. Sobre todo si hablamos de esta versión con motor diesel de 90 caballos y bajo consumo.

Dacia está arrasando en estos tiempos complicados de la economía y sus ventas, en lo que va de año, han subido en España un 40%, lo que ha situado a la marca como una más importantes dentro de las de tamaño medio. Hasta el 30 de junio se han vendido casi 12.000 unidades en España, una cifra realmente importante.

Las claves de la marca Dacia para conseguir este innegable éxito comercial está claro: hacer coches buenos, robustos, poco sofisticados pero capaces de transportar de manera cómoda y segura a personas. Y todo ello por un precio muy ajustado.

Antes de decidir el coche que queremos comprar, por supuesto que hay que pensar un poco lo que necesitamos. Las versiones de acceso son muy baratas, pero las básicas ni siquiera pueden equipar aire acondicionado, algo que en España yo creo que es un poco exagerado. Aunque, por supuesto, depende de lo que queramos gastar en el coche.

Lo realmente importante es que la versión más cara de la gama Dacia Sandero, con el motor 1.5 dCi de 90 caballos que equipan los últimos modelos de Renault, con el equipamiento más completo disponible no supera la barrera de los 13.000 euros. Y a cambio tendremos un buen coche, robusto, muy fiable, y con una mecánica que le convierte en un buen coche para hacer muchos kilómetros, con un consumo homologado en el ciclo combinado de 3,8 litros.

¿Se puede pedir más? Pues yo creo que no. Y de hecho el mercado está demostrando que coches como el Dacia Sandero es lo que necesita nuestra maltrecha economía. Y es que el que puede, tiene a su alcance coches más completos, mejor equipados, más vistosos, pero de verdad que este es un coche muy razonable para aquellas personas que necesitan asegurarse la movilidad por un precio muy ajustado.

Pero ojo, si tenemos unas ciertas posibilidades con el presupuesto lo mejor es optar por el de 90 caballos. Si no tenemos que hacer muchos kilómetros puede servirnos el de gasolina, aunque es un poco soso en su funcionamiento, poco elástico y para un uso excesivamente tranquilo. Pero si además queremos rodar mucho con el coche, entonces el dCi de 90 caballos es la opción ideal.

Les tengo que decir que la prueba del Sandero que he podido hacer corresponde a la versión más completa de la gama, el 1.5 dCi de 90 caballos con el acabado Laureate y que además tenía como opcionales aire acondicionado, elevalunas eléctricos traseros y el sistema de navegación como detalles de equipamiento añadido.

Pero es que todos esos añadidos, que en otros vehículos sería muy caros, en este caso son muy razonables. Por ejemplo, 425 euros del aire acondicionado, el sistema de navegación con la cartografía de toda Europa son otros 350 euros y los elevalunas eléctricos traseros 100 euros. Si añadimos las llantas de aleación de 15 pulgadas, 330 euros, y la rueda de repuesto otros 100 euros tenemos un Sandero con equipamiento muy completo por un precio de las opciones de 1.300 euros. El coche con todo esto cuesta entonces 12.700 euros.

Pese a este precio ajustado, el coche tiene de todo lo necesario y está muy bien construido. La calidad percibida es muy buena, sobre todo en cuanto a los ajustes de las distintas piezas en el conjunto. Y los materiales son robustos y suficientemente buenos. Lo que no hay son excesos como los que se han hecho en muchos coches modernos, que no sirven para nada más que para aumentar el peso y, sobre todo, el precio de los coches.

Es un vehículo de cinco plazas, bastante generosas, aunque por precio sería más comparable con los urbanos de 4 plazas. Es un coche muy amplio, con buen espacio para las piernas en las plazas traseras y una cota de altura también buena. También destaca por su buen acceso al interior, como consecuencia de unas puertas bastante grandes.

En el lado negativo encontramos unos asientos con un tapizado poco agraciado y que resultan demasiado blandos, además de no sujetar demasiado el cuerpo de sus ocupantes, en el caso de las plazas delanteras, en las zonas con muchas curvas.

La posición al volante es razonablemente buena, proporciona buena visibilidad tanto hacia delante como hacia atrás. Y el volante se puede ajustar en altura pero no en profundidad, lo que le deja un poco limitado en este sentido. Y en cuanto a la instrumentación, es sencilla, con pocos datos, pero muy buena, fácilmente visible.

Nuestra unidad de pruebas contaba con el sistema de navegación, una opción que incluyendo la cartografía de toda Europa cuesta 330 euros. Pero si solo queremos la de España y Portugal solo nos costará 230 euros. Está en una buena posición y es suficientemente buena para encontrar el destino que queramos sin problemas. Y por ese precio creo que de verdad merece la pena.

Una vez puesto en marcha, el coche evoluciona con mucha soltura. Tiene un motor realmente brillante si analizamos lo que cuesta realmente el vehículo. Un motor muy elástico, que sube de vueltas con contundencia desde poco más de 1.400 revoluciones y que será nuestro gran aliado para hacer, incluso grandes viajes, con consumos muy bajos.

El manejo del cambio es también bastante bueno. Aunque los movimientos de la palanca de cambios son un poco largos, en realidad se trata de un cambio bastante preciso, con el que es difícil equivocar un cambio. Además, tampoco es un coche en el que su conductor, normalmente, puede buscar situaciones apuradas para cambiar al límite. No es el coche para esta utilización.

Y en cuanto a estabilidad, salvo que queramos rodar muy deprisa, con excesos en zonas muy viradas, jamás tendremos problemas con este coche, porque es muy noble y porque los balanceos de la carrocería son bastante razonables para el tipo de coche que es en el que se busca un compromiso entre estabilidad y confort.

El precio del Sandero es muy bueno, como hemos visto desde el principio, pero es que su consumo es casi mejor. El valor homologado en el ciclo combinado es de 3,8 litros y lo más importante es que si vamos haciendo una conducción un poco tranquila, con marchas largas pero sin excesos, siempre estaremos por debajo de los 5 litros cada 100 kilómetros. Una cifra realmente destacable.

Sinceramente creo que es una de las mejores alternativas del mercado actual, siempre que lo que busquemos sea asegurarnos la movilidad por el precio más barato posible. Con este Sandero tendremos, por algo más de 11.400 euros en función de las opciones que le pongamos, un interesante vehículo de cinco plazas, robusto y fiable, con unos consumos muy ajustados y un nivel de seguridad suficiente, porque por supuesto incluye el ESP de serie.

Y tiene detalles que sorprenden, como son los amortiguadores del capó motor. Cuando todavía hay muchos coches en los que hay que levantar el capó motor y poner la barra de seguridad, en este Sandero es como en los coches buenos, con un amortiguador que levanta el capó para facilitar las operaciones en el interior.       

Además, para los que buscan además un cierto toque campero y algunas posibilidades fuera del asfalto, está la versión Sandero Stepway. Por un precio de solo mil euros más, es decir 12.400 euros, tendremos una variante con protecciones laterales en material plástico, con el frontal y la parte trasera más protegidas y con una mayor altura libre al suelo que nos permitirá algún exceso en pistas, aunque con cuidado porque la tracción sigue siendo a las ruedas delanteras.

Sinceramente, si tiene un presupuesto muy ajustado y necesita moverse mucho con el coche, antes que pensar en la alternativa de un vehículo de segunda mano barato y con muchos kilómetros, yo siempre elegiría la de este Dacia Sandero, que además tiene 3 años de garantía o 100.000 kilómetros y un consumo homologado de 3,8 litros. Pero cuidado con las versiones de acceso, porque el motor de 75 caballos, sobre todo el de gasolina, es demasiado justo.