Es noticia
El dólar y los bonos han lanzado un aviso a Trump... Y hay motivos para preocuparse
  1. Mercados
  2. The Wall Street Journal

El dólar y los bonos han lanzado un aviso a Trump... Y hay motivos para preocuparse

En medio de las turbulencias causadas por la guerra comercial, Estados Unidos comienza a perder su imagen de refugio seguro para los inversores globales

Foto: Firma: Reuters/Dado Ruvic.
Firma: Reuters/Dado Ruvic.
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

La reciente caída de la bolsa estadounidense, impulsada por el endurecimiento de la guerra comercial promovida por Donald Trump, ya había encendido las alarmas. Pero lo que realmente ha preocupado a los mercados es la combinación de una caída del dólar y un aumento en los rendimientos de los bonos del Tesoro. Un mensaje que, quizá, motivó a Trump a suspender temporalmente algunos de sus aranceles esta semana.

Tradicionalmente, cuando reina el miedo en los mercados, los inversores buscan seguridad en el dólar y en los bonos del Tesoro. Sin embargo, esta vez la reacción ha sido muy distinta. A pesar de los crecientes temores de recesión, no se ha producido el esperado “vuelo hacia la calidad”. Las razones son múltiples, desde preocupaciones sobre la inflación hasta una cuestión mucho más profunda: la pérdida de confianza en Estados Unidos como ancla de estabilidad.

Durante años, EEUU ha sido un destino privilegiado para los capitales globales gracias a su crecimiento sólido, liderazgo tecnológico y abundante energía barata. Pero ese atractivo se ha visto ensombrecido por un país más impredecible, más aislado y más hostil bajo la administración Trump. La consecuencia: para muchos, ya no es tan seguro invertir en Estados Unidos.

Desde que Trump comenzó a imponer aranceles a socios clave como Canadá, México y China, el índice S&P 500 ha perdido cerca del 19%. A esto se suma una caída del 4,5% en el índice del dólar y un aumento inesperado en los rendimientos de los bonos desde principios de abril. En circunstancias similares en el pasado, el dólar solía fortalecerse y los bonos se volvían más atractivos, pero esta vez ha ocurrido lo contrario.

Foto: Donald Trump firma la orden de los nuevos aranceles. (Getty/Andrew Harnik)

La inflación es parte del rompecabezas. Los aranceles podrían frenar el crecimiento, lo que normalmente llevaría a la Reserva Federal a reducir las tasas de interés. Pero también elevan los precios, lo que complica ese posible recorte. Aun así, los mercados ya están descontando que la Fed tendrá que bajar las tasas este año. Por eso, la subida de los rendimientos no puede explicarse solo por las decisiones de política monetaria.

Algunos apuntan a factores técnicos, como la liquidación forzada de bonos por parte de fondos de cobertura. Pero lo más probable es que estemos ante un cambio más estructural: los inversores están replanteándose el rol de EEUU en la economía global. Históricamente, el dólar ha sido la moneda de reserva por excelencia. Los países lo usan para proteger sus monedas, comerciar, pagar deudas y hacer frente a crisis. Pero esa posición privilegiada ahora se ve amenazada.

Steve Miran, presidente del Consejo de Asesores Económicos de Trump, sugirió recientemente que otros países deberían asumir más responsabilidades por los beneficios que reciben del sistema global basado en el dólar, incluso pagando aranceles como "contribución" al sistema. Aunque luego aclaró que no hay planes concretos para aplicar esta idea, el solo hecho de plantearla genera inquietud en los mercados.

La desconfianza va en aumento. Jason Thomas, jefe de investigación del Grupo Carlyle, destaca que el oro ha superado significativamente a los bonos protegidos contra la inflación desde 2022, lo que indica que los inversores lo prefieren como refugio seguro ante la incertidumbre. Además, tras las sanciones impuestas a Rusia en 2022, muchos bancos centrales están reconsiderando su dependencia del dólar, por temor a posibles represalias similares.

La pérdida de atractivo del dólar tiene consecuencias

Esta pérdida de atractivo del dólar tiene consecuencias. Una menor demanda de activos estadounidenses encarece el financiamiento del elevado déficit fiscal del país, que ronda los 2 billones de dólares anuales. Si los inversores extranjeros dejan de comprar bonos del Tesoro o simplemente no renuevan los que ya tienen, los rendimientos podrían dispararse, poniendo aún más presión sobre la economía.

De hecho, algunos temen que China, en respuesta a los aranceles de Trump, podría vender parte de sus bonos del Tesoro. Aunque no hay evidencia de que lo haya hecho, el riesgo está presente. Una guerra comercial podría escalar fácilmente a una guerra financiera.

El caso del Reino Unido en 2022 sirve de advertencia. La entonces primera ministra Liz Truss propuso una fuerte rebaja fiscal, lo que provocó una crisis en los mercados de bonos británicos y terminó costándole el cargo. Durante mucho tiempo se pensó que EEUU, gracias al estatus de reserva del dólar, era inmune a algo así. Pero los eventos recientes sugieren que Trump no debería confiarse demasiado.

La reciente caída de la bolsa estadounidense, impulsada por el endurecimiento de la guerra comercial promovida por Donald Trump, ya había encendido las alarmas. Pero lo que realmente ha preocupado a los mercados es la combinación de una caída del dólar y un aumento en los rendimientos de los bonos del Tesoro. Un mensaje que, quizá, motivó a Trump a suspender temporalmente algunos de sus aranceles esta semana.

Dólar Bonos del Tesoro Donald Trump
El redactor recomienda