Las nuevas generaciones se abonan al riesgo en sus inversiones: podrían acabar lamentándolo
Los más jóvenes tienen mayor acceso a productos y estrategias arriesgados, y hay una explosión de fuentes de información y redes sociales que pueden fomentar comportamientos de riesgo
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F3e9%2F780%2F492%2F3e9780492731600597e76630e0fcec3c.jpg)
Gracias a los smartphones, las cuentas de corretaje de uso sencillo y las operaciones sin comisiones, todo el mundo puede comprar instrumentos financieros con un simple gesto. Como resultado de esto mismo, los estadounidenses están empezando a invertir a edades mucho más tempranas que las generaciones anteriores.
Para la generación Z, que se refiere a los nacidos entre 1997 y 2012, la edad media de su primera inversión es a los 19 años, según una encuesta realizada por Charles Schwab en 2024. Para los milenials (1981-1996), es a los 25 años, y para la generación X (1965-1980) y los baby boomers (1946-1964), se sitúa a los 32 y 35 años, respectivamente.
La asequibilidad es una razón importante por la que la gente empieza a edades más tempranas, afirma Rob Williams, director gerente de planificación financiera y gestión de patrimonios de Charles Schwab. "No se trata solo de un acceso más fácil", señala. "Los costes han evolucionado para que esté al alcance de cualquiera, sea cual sea su nivel de riqueza". Sin duda, empezar con ventaja en el camino de la inversión es algo positivo. Como se suele decir, el tiempo dentro del mercado es más importante que la anticipación al mercado.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F87c%2F5fd%2F1da%2F87c5fd1da6e105b535875b885938904c.jpg)
No obstante, los inversores más jóvenes también tienen hoy mayor acceso a productos y estrategias de inversión arriesgados, y hay una explosión de nuevas fuentes de información y redes sociales que pueden fomentar comportamientos de riesgo. Esto quedó patente hace cuatro años, cuando millones de inversores primerizos, muchos de ellos de la nueva generación, se lanzaron a los mercados y se sumaron a un frenesí de memes bursátiles.
"El mundo de la inversión y el mundo en general han cambiado radicalmente desde que los boomers eran jóvenes adultos", afirma Gary Mottola, director de investigación de la Finra Investor Education Foundation. "Por ejemplo, los boomers, cuando eran jóvenes, no tenían la opción de invertir en cripto. Y entonces no era tan fácil abrir cuentas, operar era más costoso, las acciones fraccionarias no estaban disponibles y a menudo necesitabas miles de dólares para empezar a invertir, por lo que había menos inversores jóvenes". Un subgrupo de estadounidenses más jóvenes —sobre todo hombres e inversores que se estrenaron durante la pandemia— se han inclinado por inversiones más arriesgadas que las que suelen hacer otros estadounidenses de su edad o mayores.
La opción opciones
Tomemos como ejemplo los contratos de opciones, que dan al inversor la oportunidad de comprar o vender un valor en una fecha determinada. Los contratos de opciones pueden utilizarse para generar ingresos, cubrir riesgos o especular. Los volúmenes de negociación de opciones se han disparado desde la pandemia, cuando los inversores más jóvenes se aficionaron a ellas. Una encuesta realizada en 2021 por la Finra Investor Education Foundation reveló que el 36% de los encuestados de entre 18 y 34 años habían negociado con opciones. Esta cifra contrasta con el 21% de los encuestados de 35 a 54 años y solo el 8% de los encuestados de 55 años o más. Por muy populares que sean, los contratos de opciones son instrumentos financieros complejos, por lo que los inversores principiantes deberían andarse con cuidado. Consideremos la naturaleza temporal de una opción de compra, que permite al titular comprar una acción a un precio determinado (el precio de ejercicio) antes de que venza el contrato. Si la acción no alcanza su precio de ejercicio antes de la fecha de vencimiento, el contrato expira sin valor y el titular pierde la prima que pagó por el contrato.
En los años transcurridos desde la encuesta de la Finra, inversores de todas las edades pueden haber empezado a experimentar con opciones de vencimiento cero, también conocidas como 0DTE, cuya popularidad se ha disparado. Estas opciones vencen al final del día y permiten a los inversores apostar por los movimientos intradía del mercado de los principales índices y fondos cotizados relacionados. Un inversor puede obtener una ganancia rápida o perder rápidamente toda una posición. Los 0DTE han pasado del 5% del volumen diario de opciones del S&P 500 en 2016 a cerca de la mitad de todo el volumen el año pasado, según Cboe Global Markets.
En los márgenes
La encuesta de la Fundación Finra también reveló que tanto los inversores más jóvenes como los más noveles tenían más probabilidades de haber realizado compras con margen. Invertir con margen —es decir, pedir dinero prestado a un agente de bolsa para operar— puede aumentar tanto los beneficios como las pérdidas, y en general se considera arriesgado. La posibilidad de comprar acciones con margen existe desde antes del crack de 1929, pero está ganando popularidad entre los inversores de nueva generación.
En 2021, algo menos de una cuarta parte, el 23%, de los inversores de entre 18 y 34 años afirmaron haber realizado compras con margen, frente al 12% de los encuestados de entre 34 y 54 años y el 3% de los encuestados de 55 años o más. El 19% de los encuestados con menos de dos años de experiencia inversora afirmaron haber realizado compras utilizando este método. En comparación, el 17% de los encuestados con entre 2 y 10 años de experiencia inversora habían realizado compras con margen. Apenas el 6% de los encuestados con una década o más de experiencia en inversiones dijeron lo mismo. El uso general de márgenes por parte de los inversores tiende a subir y bajar con los rendimientos del mercado. Los datos de Finra muestran que los saldos deudores en cuentas de margen se dispararon durante la pandemia, para desplomarse en 2022. Los saldos deudores aumentaron bruscamente después de las elecciones presidenciales estadounidenses del año pasado, alcanzando alrededor de 900.000 millones de dólares, su nivel más alto desde diciembre de 2021, cuando alcanzaron los 910.000 millones de dólares.
"Criptobros"
La demografía de los inversores en criptodivisas también se inclina hacia los jóvenes y los hombres. Según una encuesta de Pew Research basada en datos de febrero de 2024, los hombres menores de 50 años tienen más probabilidades de haber utilizado criptodivisas que los hombres de más edad y las mujeres de todas las edades. La brecha de género es notable incluso entre los inversores jóvenes. Según Pew, el 42% de los hombres de entre 18 y 29 años han invertido, comerciado o utilizado criptodivisas, frente al 17% de las mujeres de la misma franja de edad. Curiosamente, solo el 17% de todos los adultos estadounidenses afirman haber invertido, comerciado o utilizado una criptomoneda, según la encuesta de 2024. Eso no ha cambiado estadísticamente desde 2021, según Pew.
Desde la encuesta de 2024, es posible que la proporción de estadounidenses que se adentran en las criptomonedas haya aumentado debido a la proliferación de fondos cotizados en bolsa de criptomonedas al contado. Estos ETF han facilitado la inversión en cripto para los estadounidenses porque los fondos al contado normalmente mantienen los criptoactivos, eliminando la necesidad de que los inversores tengan una cartera digital segura para almacenarlos. Gestores de activos como BlackRock han atraído flujos importantes para los ETF de criptomonedas, y los precios del bitcoin y otras monedas digitales se han disparado en el último año. Las criptomonedas pronto podrían recibir otro empujón. El presidente Donald Trump ha indicado que su administración flexibilizará las regulaciones sobre las cripto, lo que podría dar lugar a que los bancos y las empresas de corretaje ofrezcan acceso directo a las criptoinversiones y a que los gestores de activos lancen más fondos.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F207%2F502%2F687%2F207502687a1129b4356f2d10d72514f1.jpg)
Que las criptoinversiones sean arriesgadas puede depender de la perspectiva de cada uno, y de la proporción de su cartera que se asigne a activos digitales. Sin duda, muchos asesores financieros seguirán sin acercarse a ellos, y algunos inversores no soportan la extrema volatilidad de precios que han experimentado bitcoin y otras criptodivisas. Sin embargo, una asignación del 1% de la cartera, como han sugerido Ric Edelman, exasesor financiero reconvertido en defensor de las criptomonedas, y otros, no es probable que haga quebrar a la banca si las criptomonedas caen en picado. Aaron Marks, socio fundador y director de estrategia de Amplius Wealth Advisors, asegura que su empresa no utiliza criptomonedas en sus carteras recomendadas, pero algunos clientes han expresado su deseo de asignar sumas a activos digitales por su cuenta. "Si quieres intentarlo, está bien, pero mantente dentro de tus posibilidades", aconseja.
Algunos jóvenes inversores están adoptando un enfoque más comedido. Ivan Jackson, de 26 años, no considera que sus tenencias de criptomonedas formen parte de su cartera a largo plazo, compuesta mayoritariamente por fondos indexados de bajo coste como el Vanguard S&P 500 ETF. Se trata más bien de un pasatiempo. Su mayor participación —unos 34.000 dólares en Dogecoin— comenzó como una especie de broma cuando estaba en la universidad hace unos cuatro años. "Cada vez que Elon Musk tuiteaba sobre ella, se disparaba", dice. "Era ridículo. Estaba a 0,008 centavos de dólar cuando hice mi primera compra por 80 dólares".
Que las criptoinversiones sean arriesgadas puede depender de la perspectiva de cada uno, y de la proporción de su cartera en a activos digitales
Jackson comenta que sus amigos adoptan una actitud similar, evitando correr riesgos innecesarios con sus ahorros para la jubilación y utilizando otros fondos para invertir en cosas como bitcoin, que pueden tener más volatilidad pero un potencial de rentabilidad superior. Refiriéndose a sus ahorros para la jubilación, explica: "No es dinero para la universidad. Es dinero real".
Shannon Saccocia, directora de inversiones de NB Private Wealth, una división de Neuberger Berman, opina que los inversores más jóvenes están dispuestos a utilizar una especie de enfoque gradual hacia la riqueza, utilizando estrategias prudentes para objetivos a largo plazo como la jubilación e inversiones potencialmente más volátiles para objetivos ambiciosos. "En general, sus carteras están equilibradas", afirma. "Están equilibrando parte de esa exposición especulativa con un margen de seguridad". Sin embargo, este enfoque puede no funcionar para los inversores de más edad, que tienen diferentes perspectivas temporales y potencialmente menos tolerancia a la volatilidad dentro de sus carteras, dice Saccocia. "Si tienes cierta curiosidad intelectual, ¿por qué no aprender un poco sobre el tema y hablar con tus hijos y nietos sobre en qué invierten y por qué?".
El enfoque "Juan Palomo"
Una diferencia generacional importante entre los inversores es el uso de las redes sociales, como Reddit y TikTok, para obtener ideas de inversión. Según la encuesta a inversores 2024 de Schwab, el 39% de la generación Z y el 36% de los milenials encuestados afirman que las redes sociales facilitan la gestión del dinero. Esto contrasta con el 20% de la generación X y el 7% de los baby boomers. La calidad de la información y el asesoramiento en las redes sociales varía mucho, al igual que el carácter de las comunidades. El ambiente del subreddit wallstreetbets, con 21 millones de miembros (autodefinido "como si 4chan hubiera encontrado un terminal de Bloomberg"), es notablemente diferente al del subreddit Personal Finance, con otros 21 millones de miembros.
Sin embargo, esto no quiere decir que los jóvenes inversores dependan únicamente de las redes sociales. Muchos recurren a familiares en busca de consejo y buscan fuentes de información autorizadas. "Creo que el sector tiene la falsa narrativa de que o acudes a 'finfluencers' o a un experto, pero la realidad es que probablemente recurras a ambos", afirma Joseph Coughlin, director del AgeLab del Instituto Tecnológico de Massachusetts. Lo que esto significa para los asesores es que los clientes jóvenes pueden estar o bien informados o confundidos respecto a temas financieros; no deben asumir una falta de sofisticación.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Faee%2Fb9a%2F516%2Faeeb9a516d401443cbf9af1365d19695.jpg)
Sin duda, no todos los inversores de la generación Z y los milenials están dispuestos a jugársela con inversiones arriesgadas. La mayoría no participa en tales actividades. Los datos sugieren que las mujeres y los milenials de más edad están más centrados en la adquisición de viviendas y la creación de un patrimonio familiar. Algunos estudios indican que muchos estadounidenses de la generación Z y milenials tienen aversión al riesgo debido a las dificultades económicas y de otra índole que han padecido, desde la crisis financiera hasta la pandemia del COVID-19. Lo cierto es que participan en planes de jubilación a un ritmo similar al de los estadounidenses más veteranos. Además, muchos dan prioridad a estrategias de inversión a largo plazo y de bajo coste.
¿Ir por libre?
El sector de los servicios financieros se enfrenta a una gran incertidumbre: ¿querrán los inversores de la próxima generación trabajar con un asesor financiero? La generación Z y los milenials son conscientes de los costes y tienen una mentalidad más independiente y, evidentemente, están dispuestos a hacerlo ellos mismos, pero también lo está un número cada vez mayor de estadounidenses. Poco menos de una cuarta parte de todos los activos fueron autogestionados en junio de 2024, frente al 15% en 2019, según un estudio exhaustivo de junio de 2024 de Broadridge Financial. La participación de los activos de los inversores autónomos aumentó en todos los grupos generacionales, excepto en la generación silenciosa, aquellos nacidos entre 1928 y 1945.
Además, no solo los inversores de rentas medias recurren a las plataformas de inversión autogestionada. Según el estudio de Broadridge, los particulares con grandes patrimonios se encuentran entre los segmentos de clientes que más recurren a la autogestión. Sin embargo, eso no significa que estén despidiendo a sus asesores financieros para optar por esta modalidad. Cada vez son más los inversores que recurren tanto a un asesor como a una cuenta autogestionada, afirma Andrew Guillette, vicepresidente de perspectivas globales de Broadridge. "Hemos encuestado a varios inversores preguntándoles por qué utilizan ambos métodos. La primera razón es porque les gusta, y la segunda es porque quieren diversificar", afirma Guillette.
Cada vez son más los inversores que recurren tanto a un asesor como a una cuenta autogestionada
Por lo tanto, es probable que a medida que los inversores más jóvenes se hagan mayores y acumulen activos, busquen ayuda profesional para sus finanzas, pero sigan manteniendo una cuenta autogestionada. Queda por ver si los inversores de la próxima generación mantendrán otros hábitos de inversión que puedan haber adquirido antes y durante la pandemia.
*Contenido con licencia de Barron’s. Traducido por Federico Caraballo
Gracias a los smartphones, las cuentas de corretaje de uso sencillo y las operaciones sin comisiones, todo el mundo puede comprar instrumentos financieros con un simple gesto. Como resultado de esto mismo, los estadounidenses están empezando a invertir a edades mucho más tempranas que las generaciones anteriores.