Los empleados están ganando la batalla: la vuelta a la oficina se ha estancado

Cuando a principios de año las tasas medias de ocupación de oficinas en la ciudad superaron el 50% por primera vez durante la pandemia, muchos propietarios vieron este hito como una señal de que los empleados por fin retomarían sus antiguos hábitos de trabajo.

Esos índices de uso de oficinas apenas han variado desde entonces, ya que la mayoría de las empresas han optado por una estrategia de trabajo híbrido que muestra pocos signos de desvanecerse.

Según Scoop Technologies, una empresa de software que ha desarrollado un índice para el seguimiento de las estrategias en el lugar de trabajo de cerca de 4.500 empresas, alrededor del 58% de las empresas permiten a sus empleados trabajar desde casa varios días a la semana.

El número de empresas que obligan a sus empleados a estar en la oficina a tiempo completo ha descendido hasta el 42%, frente al 49% de hace tres meses, según Scoop. Los empleados de las empresas con estrategias híbridas trabajan una media de 2,5 días a la semana en la oficina.

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Robert Sadow, director ejecutivo y cofundador de Scoop, afirma que, mientras el desempleo siga siendo bajo, los trabajadores tendrán la posibilidad de afianzar estas políticas.

"Los empleados están dejando claro que se van a resistir firmemente a la obligación de estar en la oficina cinco días a la semana", interpreta Sadow. "La mayoría de las empresas en el mercado laboral actual se han mostrado reacias a presionarles más".

La frustración es cada vez mayor en las ciudades que adolecen de las caídas de los precios inmobiliarios, que dan pie a una menor recaudación del impuesto sobre bienes inmuebles y ejercen presión sobre bares, restaurantes y otras pequeñas empresas que dependen de los trabajadores que acuden a la oficina cinco días a la semana. En Nueva York, cada empleado que trabaja en casa en lugar de ir a la oficina cuesta unos 4.600 dólares anuales en ventas a las empresas de la ciudad, según WFH Research, un grupo de reflexión que hace un seguimiento de los acuerdos sobre el lugar de trabajo.

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Algunos ayuntamientos están experimentando con nuevas políticas para atraer de nuevo a los trabajadores. El alcalde de Nueva York, Eric Adams, anunció la semana pasada incentivos fiscales para que los propietarios de edificios de oficinas modernicen los construidos antes del año 2000, con la esperanza de que un lugar de trabajo más moderno aumente la ocupación. "Cada oficina vacía significa menos fondos para todo, desde escuelas a viviendas asequibles", declaró Adams.

Dado que los empleados sólo pasan en la oficina la mitad de la semana laboral de cinco días, no es de extrañar que los índices de ocupación de oficinas se hayan estancado en torno a la mitad de los niveles prepandémicos. La tasa media de uso de la oficina, que superó el 50% de los niveles prepandémicos a finales de enero, se ha mantenido en torno a esa cifra desde entonces, según Kastle Systems. Kastle realiza un seguimiento de la vuelta a la oficina en 10 de los principales mercados de EEUU mediante el control de las credenciales laborales de seguridad.

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Otras empresas que utilizan métodos diferentes para hacer un seguimiento del uso de la oficina muestran una tasa de retorno ligeramente superior, pero también constatan que la asistencia se ha estabilizado. Según Placer.ai, que rastrea datos de teléfonos móviles, las visitas a oficinas en 11 ciudades a finales de abril eran poco más del 60% de lo que eran en 2019 sin apenas cambios desde principios de febrero. "Este patrón que se mantiene parece indicar una recuperación estancada", concluyó Placer.ai en un informe de abril.

En Texas, las ciudades siguen teniendo la tasa de regreso a la oficina más alta, en parte porque muchas empresas del estado se encuentran entre las que requieren que los trabajadores acudan a la oficina cinco días a la semana. En la primera semana de mayo, las tasas de retorno de Austin y Houston superaron el 60%, según Kastle.

La mayoría de los empleados del bufete de abogados McCulloch & Miller, con sede en Houston, llevan yendo a la oficina cinco días a la semana desde finales de 2020, según cuenta el socio gerente David Miller. Aun así, añadió, el bufete es más flexible que antes de la pandemia en cuanto a permitir que los trabajadores lleguen tarde, salgan temprano o trabajen desde casa si es necesario.

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"No creo que vuelva a ser como antes", opina Miller. Las empresas tecnológicas siguen siendo las más flexibles a la hora de permitir a los empleados trabajar desde casa, lo que se traduce en bajas tasas de regreso a la oficina en ciudades como San Francisco, Seattle y San José (California). Salesforce inauguró esta primavera su nueva torre en Chicago, pero la noticia se vio acallada por los planes de la empresa de poner a disposición hasta 125.000 pies cuadrados de espacio subarrendado en el edificio de 58 plantas.

Los propietarios de oficinas se han visto alentados este año por los indicios de que el sector tecnológico por fin está llamando a algunos de sus trabajadores para que vuelvan a las oficinas. Por ejemplo, Salesforce, aunque ha estado poniendo espacio en el mercado de subarrendamiento, puso en marcha a principios de año un plan para que los trabajadores volvieran a las oficinas hasta cuatro días a la semana.

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Meta Platforms ha seguido permitiendo a sus empleados trabajar desde casa todo lo que han querido. Pero el propietario de Facebook avisó a sus directivos esta primavera que dejarán de contratar temporalmente a trabajadores totalmente a distancia, lo que muchos interpretaron como un indicio de que pronto podrían requerir que algunos trabajadores volvieran a la oficina.

Sin embargo, las empresas de servicios financieros están adoptando cada vez más políticas de trabajo híbrido tras liderar la tendencia a pedir a los empleados que vuelvan a tiempo completo. En la actualidad, el 20% de las empresas de servicios financieros exige a sus trabajadores que estén en la oficina cinco días a la semana, frente al 22% de hace tres meses, según Scoop.

JPMorgan Chase anunció en abril que los directores ejecutivos tendrían que trabajar en la oficina cinco días a la semana. Pero gran parte del resto de la empresa sigue con un plan de trabajo híbrido. "El sistema híbrido se está convirtiendo en una tregua", opinó Sadow. "Seguirá siendo la norma".

*Contenido con licencia de The Wall Street Journal