Moderna, AstraZeneca... EEUU financia ya las pruebas para la vacuna del coronavirus

El Gobierno de Estados Unidos ya ha puesto en marcha su plan para pilotar los tres proyectos con más posibilidades de conseguir una vacuna contra el coronavirus, según explican fuentes de la propia Administración Trump.

Estas tres investigaciones están perfilando ya las pruebas con decenas de miles de candidatos en una docena de lugares de EEUU, tal y como ha explicado John Mascola, director de investigación de vacunas del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciones, en una entrevista. Esas pruebas tienen como objetivo determinar la seguridad y efectividad de la vacuna y marcarán la fase final del proceso.

Moderna será la primera, este mismo julio, seguida por la 'joint venture' de AstraZeneca y la Universidad de Oxford en agosto y por Johnson & Johnson en septiembre, explicaba Mascola.

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Los tiempos sugieren que los investigadores están avanzando rápidamente en las primeras fases del proceso —que tratan de inducir la respuesta del sistema inmune— o que al menos lo tienen todo preparado.

"Queremos usar los recursos públicos lo mejor que podamos para conseguir respuestas lo más rápido posible", ha afirmado Larry Corey, especialista en vacunas y enfermedades infecciosas del Fred Hutchinson Cancer Center de Seattle, y miembro del comité asesor del Instituto Nacional de la Salud (NIH por sus siglas en inglés).

Un portavoz de Moderna confirmaba los planes del NIH para financiar las pruebas de la vacuna. AstraZeneca, por su parte, no ha confirmado las fechas de inicio, pero sí la existencia de un contrato con el Gobierno para llevar a cabo un gran estudio. Johnson & Johnson ha declinado hacer comentarios.

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Por otro lado, Pfizer, en su alianza con BioNTech, tiene otro de los candidatos más prometedores de vacuna y podría arrancar la fase 3 de las pruebas en julio, según una persona conocedora de la situación pero que no participa en el proyecto.

Evidentemente, muchas vacunas fracasan en la fase de pruebas.

"Hay mucho optimismo en la comunidad científica de que una vacuna será viable, pero estamos muy concentrados en las pruebas clínicas", decía Mascola en una charla 'online' del Fred Hutchinson Cancer Center de este viernes.

No hay ninguna vacuna ahora mismo que sea efectiva contra este coronavirus. Las autoridades sanitarias ya han dicho que hará falta una, o quizá varias, para poder volver a la vida normal, porque al contrario que los tratamientos, las vacunas pueden prevenir infecciones o limitar su severidad.

Un grupo de investigadores que habitualmente trabaja en una vacuna contra el VIH, dirigido por el doctor Corey, ayudará en el proceso de la vacuna del coronavirus.

Estos estudios están diseñados, según explica Corey, para definir si una vacuna puede prevenir el covid. Los investigadores comenzarán a avanzar según tengan pruebas suficientes de los test que van a llevar a cabo las tres empresas antes mencionadas, siempre que puedan demostrar que las vacunas son seguras y que consiguen cierta respuesta inmunológica en los candidatos.

Cada estudio estará formado por 30.000 personas, de las que algunas recibirán la vacuna experimental y otras un placebo, si bien el número de participantes podría variar, según el doctor Mascola. Se realizarán en 50 localizaciones diferentes, y no se descarta llevar a cabo pruebas fuera de Estados Unidos donde el virus todavía esté en expansión.

El Gobierno de EEUU tampoco ha descartado otros proyectos de vacuna, como los que están desarrollando Sanofi o Merck & Co.

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El mes pasado, Moderna afirmó que su vacuna, diseñada en colaboración con expertos del NIH, era mayoritariamente segura y que tenía una pequeña respuesta inmunológica en la primera fase. Comenzaron la segunda fase inmediatamente después. Las pruebas en humanos de AstraZeneca y el Instituto Jenner de Oxford han empezado, pero no se han publicado resultados.

Los investigadores esperan que las pruebas puedan ofrecer ciertas conclusiones en unos seis u ocho meses desde el comienzo, según el doctor Corey. Algunos desarrolladores han dicho que podrían tener cierto número de viales de emergencia antes de ese tiempo, quizás este mismo otoño.

Pese a que cada vacuna será probada en proyectos diferentes, las empresas están coordinando ciertos aspectos, como el uso del mismo comité independiente para monitorizar la seguridad. Eso permitirá a los científicos comparar cada vacuna y cómo se comporta cada una en los diferentes tipos de población.