Cinco retos económicos y uno político en el mercado de M&A en España
Tras un año récord, en 2022 continuará el apetito inversor en nuestro país, que se situará en niveles parecidos al ejercicio anterior, según PwC
“El apetito inversor no va a cesar en 2022 en España, teniendo en cuenta la enorme liquidez de los fondos y las valoraciones atractivas de las compañías. Estamos en un momento de mercado vendedor. Trabajamos en un número de operaciones mayor al que teníamos en 2021 y prevemos que, como mínimo, estará en los niveles del ejercicio anterior al covid”, afirma Jaime Bergaz, socio responsable de Corporate Finance de PwC en España y EMEA, en una entrevista con El Confidencial.
El pasado año, el mercado de las fusiones y adquisiciones fue récord en nuestro país tras el parón provocado por la pandemia en 2020, el entorno de bajos tipos de interés, las perspectivas de recuperación y la liquidez de los fondos de inversión. Según la consultora Refinitiv, el volumen de negocio del asesoramiento financiero de operaciones de M&A creció en 2021 un 40% en número de operaciones, hasta las 1.506, superando los niveles precovid y alcanzando un volumen de 87.000 millones de euros.
Si bien Bergaz es muy optimista para el futuro de la actividad de M&A, también es consciente de que el mercado no está exento de retos. En concreto, destaca cuatro relacionados con la coyuntura económica: la elevada inflación, los problemas en la cadena de suministro, la potencial subida de tipos de interés y el coste de la energía, y uno relativo al precio de las operaciones. “Se han visto valoraciones muy altas”, resalta, haciendo una reflexión sobre el beneficio operativo de las compañías. A su juicio, “es difícil determinar cuál es el nivel sostenible de ebitda. El de 2020 estuvo claramente afectado por el covid, pero no es fácil determinar si el de 2021 es ya sostenible o es fruto de un destaponamiento de ventas”.
Los inversores temen la incertidumbre política
No obstante, reconoce que los desafíos macroeconómicos se pueden incorporar en la valoración del activo, pero lo que no se puede “factorizar” es “el miedo a la incertidumbre en políticas económicas y fiscales”, que es lo que “más puede dañar” al mercado de M&A.
El socio de PwC afirma que a ojos de los inversores internacionales “hay cierta incertidumbre” a nivel jurídico, ya que “no están viendo en España una toma de decisiones políticas consistente, sobre todo en el terreno legal y fiscal”.
Al mismo tiempo, explica que la “solidez y consistencia de un entorno jurídico es fundamental para disminuir la incertidumbre y que propicie mayor apetito”. Esto implica “mayor riesgo” y, en consecuencia, una exigencia de “mayor tasa de retorno” y, por tanto, “menor valoración”.
Más ‘spin offs’ y rotación de carteras
Resalta también la constante aparición de nuevos actores de ‘private equity’, nacionales e internacionales, buscando oportunidades en España, un país atractivo para estas figuras por el tamaño medio del tejido empresarial español y por su perfil de empresa familiar, “que es el hábitat natural” de la mayoría de estas entidades.
El año pasado fue el segundo mayor registro de la serie histórica por volumen de operaciones protagonizadas por el capital privado, con cerca de 7.500 millones de euros en 841 transacciones, principalmente en el segmento de ‘middle market’, según la patronal del sector, Ascri, 1.000 millones por debajo del máximo registrado en 2019.
“Vemos todo tipo de operaciones corporativas. Desde salidas a bolsa, compras para expandir internacionalmente empresas o fusiones hasta venta de activos”. En su opinión, se van a producir ‘spin offs’ y ‘carve outs’ (diferentes modalidades de escisión de un activo) de negocio no esencial de grandes compañías y va a continuar la rotación de activos entre entidades de capital privado. “Al calor de las altas valoraciones”, apunta, “muchos inversores están rotando sus carteras antes de que venza el tiempo de tenencia natural de las compañías, que suelen ser cinco años, y no necesariamente están vendiendo el 100% de su participación, sino que dan entrada a otro socio para juntos impulsar el crecimiento de una empresa”.
Los mercados más atractivos seguirán siendo el tecnológico, sanitario y renovables, pero se prevén movimientos en el de telecomunicaciones
A nivel sectorial, los mercados más atractivos seguirán siendo el tecnológico, sanitario y energías renovables, pero desde la firma prevén movimientos de envergadura en el mercado de las telecomunicaciones.
Respecto a la financiación de las operaciones, señala que todavía queda “mucha pólvora seca”, pero si suben los tipos se encarecerán las operaciones, y que “a pesar de la liquidez de los bancos, va a multiplicarse la financiación a través de fondos de deuda, es decir, deuda alternativa más allá de la bancaria, teniendo en cuenta, además, que no estamos en los niveles ni de otros países europeos ni de EEUU”. En comparación con la financiación bancaria, la realizada a través de los fondos de 'direct lending' es más flexible y rápida, tiene plazos de amortización más flexibles, pero también tiene su contrapartida: es más cara. En España, desde 2012 se han registrado 156 transacciones bajo este modelo, según informes, una cifra baja, en comparación con otros países europeos (1.111 en Reino Unido, 727 en Francia y 376 en Alemania).
Mayor apertura entre las empresas familiares
Bergaz observa que hay más apertura corporativa entre las empresas familiares, tradicionalmente conservadoras y recelosas de la entrada en el capital de un socio financiero por temor a la pérdida de control. “Las compañías ven creación de valor en la entrada de un ‘private equity’, ya que acelera el plan de transformación y de crecimiento, y son conscientes de que sin un fondo de esta tipología no podrían llevarlo a cabo”. En su opinión, se van a ver cada vez más operaciones protagonizadas por estas figuras en las que el socio fundador se mantiene dentro del accionariado para “disfrutar de ese viaje de crecimiento al que le va a llevar el ‘private equity”.
Asimismo, se van a producir “operaciones de secundario”, en que una entidad de capital privado vende a otra de tamaño superior para llevar la participada a una escala superior.
Las ‘soft skills’ de un ‘dealer’
Por décimo año consecutivo, en 2021 la división española de Asesoramiento en Transacciones de PwC lideró el 'ranking' de asesoramiento de operaciones corporativas en nuestro país, según las cuatro principales firmas que realizan estudios entre transacciones, Refinitiv, Mergermarket, Bloomberg y Dealogic.
Además de asesoramiento en fusiones y adquisiciones, el departamento también ofrece otros servicios para ‘deals’, ‘due diligences’, reestructuraciones, prevención de fraude o valoraciones. Al respecto, Jaime Bergaz reconoce que son profesionales “formados al máximo nivel” no solo técnico, sino también de especialización “muy potente”. Banca, energía, sanidad, industria y consumo son los segmentos donde la firma es referencia en asesoramiento, precisamente por ese grado de conocimiento sectorial. “Desde hace 10 años comenzamos la especialización sectorial. Somos pioneros dentro de la firma a nivel mundial en esa sectorización, y eso hace que el nivel de asesoría que prestamos haga que hablemos el mismo idioma de las empresas”.
El valor medio de las operaciones que asesora la firma se mueve en una horquilla de entre 100 y 400 millones de euros de valor empresa, “aunque hemos llegado a hacer operaciones de 5.000 millones”, dice.
Además de los obvios conocimientos técnicos y la mencionada especialización, se requieren ‘soft skills’ para llevar a buen puerto las negociaciones en las transacciones de fusiones y adquisiciones, como lo son la persistencia, la empatía y la cercanía.
“El apetito inversor no va a cesar en 2022 en España, teniendo en cuenta la enorme liquidez de los fondos y las valoraciones atractivas de las compañías. Estamos en un momento de mercado vendedor. Trabajamos en un número de operaciones mayor al que teníamos en 2021 y prevemos que, como mínimo, estará en los niveles del ejercicio anterior al covid”, afirma Jaime Bergaz, socio responsable de Corporate Finance de PwC en España y EMEA, en una entrevista con El Confidencial.