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De los Mozos-Indra: todo lo que la verdad esconde
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De los Mozos-Indra: todo lo que la verdad esconde

El mundo del dinero encierra claves de poder y de intereses que explican el sentido de muchas operaciones y movimientos. Ibex Insider ofrece pistas para entender a sus protagonistas

Foto: José Vicente de los Mozos. (EC Diseño)
José Vicente de los Mozos. (EC Diseño)
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José Vicente de los Mozos (São Paulo, 1962) se paseó por las instalaciones corporativas de Indra el pasado viernes para estrenar su condición de consejero delegado in pectore. También lo hizo en redes sociales, donde agradeció la confianza depositada en él para esta responsabilidad, con mención especial al presidente Marc Murtra, a quien se vincula para hacer “una empresa española multinacional de tecnología de referencia”. Montar esta dupla ejecutiva tras el precipitado reemplazo de Fernando Abril-Martorell ha costado dos años y bastantes reveses reputacionales.

El runrún del nombramiento de De los Mozos se convirtió en el protagonista inesperado de la jornada inaugural de la Feria Internacional de Defensa y Seguridad de España (Feindef), celebrada el pasado miércoles en Ifema, el recinto ferial de la Comunidad de Madrid, del que es también presidente. Ese miércoles, 24 horas antes de que la comisión de nombramientos y retribuciones diera su nombre al órgano de gobierno como favorito (pese a la coartada de una terna de candidatos), cualquier actor del sector había escuchado lo que se estaba cocinando.

La puesta en escena fue casi perfecta. Primero, a comienzos de semana, trascendió la entrada del grupo español Escribano, especializado en defensa, seguridad y aerospace, como nuevo accionista de Indra con un 3% del capital, aunque con aspiraciones para llegar a más, siguiendo los mismos pasos que el fabricante vasco SAPA, proveedor de referencia del Ejército, propietario ya del 8%. Luego, en el estreno de la feria militar, Murtra protagonizó la ponencia inaugural, con un discurso en torno al “periodo constituyente” al que se enfrenta la industria europea de defensa.

Foto: EC Diseño.

El borrón, sin embargo, llegó con la dimisión del consejero independiente Axel Arendt (ex-Airbus, ex-Rolls-Royce) tras solo siete meses en el cargo. El vocal alemán, integrante de la comisión de nombramientos y retribuciones, no tragaba con la elección de De los Mozos, candidato defendido por Jokin Aperribay (SAPA) por sugerencia de Murtra, a quien reprochaba no contar con experiencia previa en el sector ni como primer ejecutivo de una cotizada. Los argumentos de su dimisión quedarán recogidos en una carta que mandará al consejo en los próximos días.

Tampoco otros independientes comulgan con la elección. Ni la ex-Telefónica Belén Amatriain (afín a Luis Abril hijo, actual director general y consejero ejecutivo de Indra, que aspiraba a ocupar el cargo), ni la ex-Uría Coloma Armero (su familiar Mario Armero fue laminado en Anfac —patronal del automóvil— por De los Mozos como presidente) tenían al nuevo consejero delegado entre sus preferencias, pero apoyaron el nombramiento y no llevaron sus filias tan lejos como Arendt, también mal visto en su momento por su condición de guiri en una empresa país.

Falta saber si la carta prometida del alemán llegará a la CNMV, tal como han hecho los tres consejeros independientes de NH Hoteles hace unos días para justificar su dimisión, o quedará solo en manos de la secretaria del consejo, Ana María Sala, que recaló en el board de Indra hace seis meses, después de que el despacho Cortés Abogados, del que es socia desde 2014, asesorara a Murtra ante las actuaciones abiertas por el supervisor bursátil tras la revocación de cuatro consejeros independientes, investigación que concluyó a finales de diciembre sin sanciones.

Foto: Marc Murtra. (EFE/Raquel Manzanares)

Este portazo no supone un disgusto para el núcleo duro (SEPI, Amber Capital, SAPA y Escribano), ya que su nombramiento fue considerado una concesión a Ignacio Mataix (entonces todavía consejero delegado de Indra, y en la pelea por continuar, con quien el alemán había compartido consejo en ITP Aero, filial de Rolls-Royce donde el ejecutivo español fue director general durante años) para consensuar un consejo de administración pacífico tras la limpia de independientes ejecutada por Joseph Oughourlian (Amber Capital) en la junta general de 2022.

En aquellos momentos, el inversor francés, presidente y máximo accionista de Prisa (El País y Cadena SER) apareció como la solución institucional menos mala para entrar en el capital de Indra, garantizar una mayoría de cambio y participar en una operación país (construir un campeón nacional de defensa), una vez que ningún gran inversor español sondeado había aceptado la propuesta (la familia March salió del accionariado meses antes), como por ejemplo el holding industrial Criteria, controlado por la Fundación la Caixa, donde Murtra es a su vez patrono.

La batería de cambios en Indra tenía que concluir con un nuevo CEO. Ya en septiembre, De los Mozos estuvo en el torno de la cotizada, pues formó parte del grupo de candidatos para sustituir a los independientes cesados. Su perfil, más allá de su trayectoria profesional, se vincula a posiciones del PP por su rol como presidente de Ifema, tutelado por la Comunidad de Madrid (Díaz Ayuso), y por su peso en la industria del automóvil (Anfac - Renault España), un sector muy crítico con la reelección (por blando) de Antonio Garamendi al frente de CEOE.

Foto: Fernando Abril-Martorell. (EC)

Sin embargo, lo que la verdad esconde son varias palancas de De los Mozos desconocidas. Por el flanco socialista, aparece Raúl Blanco, ex secretario general de Industria y actual presidente de Renfe desde hace unos meses. Este cargo del PSC ha sido durante años el interlocutor entre el sector del automóvil y la Moncloa, el facilitador para que Pedro Sánchez visitara las instalaciones del fabricante francés en Valladolid en dos ocasiones durante su mandato y uno de los responsables en la ejecución del plan para convertir Indra en un campeón nacional en la industria de defensa.

El destino quiso que el italiano Luca de Meo, presidente mundial de Renault y ex consejero delegado de la española SEAT, prescindiera del emblema español de la marca el pasado mes de noviembre. Esta prejubilación, como le ocurrió a Blanco semanas después para salir de Industria un año antes de acabar la legislatura, puso en suerte el movimiento, que ha necesitado de la necesaria cocina interna y externa para prosperar, ante la idoneidad de otros nombres barajados en este tiempo, como por ejemplo Miguel Ángel Panduro (Hispasat) o Tobías Martínez (Cellnex).

La conexión de De los Mozos con el flanco popular lleva hasta la exministra Fátima Báñez, peso pesado de CEOE, ministrable de Feijóo y conectada con el automóvil por su amiga María Helena Antolín (Antolín), también directiva de Garamendi y con un colaborador cedido como independiente de Indra. Estos puntos han permitido al nuevo consejero delegado emerger sin vetos, permitiendo a Murtra presentar al mercado una dupla complementaria y, a la vez, convenciendo a la bancada de Génova de que será su hombre en caso de victoria del PP en las elecciones generales.

José Vicente de los Mozos (São Paulo, 1962) se paseó por las instalaciones corporativas de Indra el pasado viernes para estrenar su condición de consejero delegado in pectore. También lo hizo en redes sociales, donde agradeció la confianza depositada en él para esta responsabilidad, con mención especial al presidente Marc Murtra, a quien se vincula para hacer “una empresa española multinacional de tecnología de referencia”. Montar esta dupla ejecutiva tras el precipitado reemplazo de Fernando Abril-Martorell ha costado dos años y bastantes reveses reputacionales.

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