El Santander vende la Ciudad Financiera a Propinvest por 1.900 millones de euros

Seis meses. Ése es el tiempo que ha tardado Emilio Botín en cerrar la venta de su Ciudad Financiera, su sede en Boadilla del Monte, en Madrid. El precio final de la operación asciende a 1.900 millones de euros, por debajo de algunas estimaciones que hablaban de 2.000 millones de euros, y dentro de la orquilla entre 1500 y 1800 millones, que establecían algunos expertos. La operación reportará unas plusvalías a la entidad española de 605 millones de euros.

El comprador es un consorcio liderado por el inversor inmobiliario británico Propinvest. La operación, que se prevé ejecutar no más tarde del 31 de marzo, se enmarca dentro del concurso restringido y privado organizado por el banco para la venta y posterior arrendamiento de una cartera de inmuebles de su propiedad en España del que constituye la última parte.

Como ya informó El Confidencial en octubre del año pasado, el presidente de la entidad quería que la rentabilidad del adquirente quedase por debajo del 5%, es decir, prácticamente por debajo del coste de cualquier préstamo con que dicho adjudicatario se pudiera financiar. Esto supondría valorar la Ciudad Financiera en alrededor de 1.800 millones de euros. Finalmente, el precio final ha sido ligeramente superior.

En junio de 2006, la noticia saltaba al mercado. El Santander se iba a desprender de todos los inmuebles que posee en España -excepto la histórica sede del Paseo de Pereda, en Santander-, con el objetivo de hacer frente al enorme desembolso que acarrearía la compra de ABN Amro.

Cerca de 2.300 millones de euros de plusvalías

Así la entidad financiera ya cerró en noviembre la venta de su red de oficinas en España y de diez inmuebles emblemáticos. En conjunto, el Santander ha vendido inmuebles por un precio total de 4.398 millones de euros, con lo que ha generado plusvalías por un importe aproximado de 1.681 millones de euros. Cifra a la que hay que sumar los 600 millones por la venta de la Ciudad Financiera.

En concreto, la entidad que preside Emilio Botín vendió a Pontegadea, sociedad del empresario Amancio Ortega, diez inmuebles por un importe de 458 millones de euros, operación por la que el banco obtuvo unas plusvalías de 216 millones de euros.

Estos inmuebles, ubicados en sitios céntricos y representativos, se encuentran en las ciudades de Madrid (el edificio del Paseo de la Castellana, 24), Barcelona (Paseo de Gracia, 5), Valencia, Valladolid, Bilbao, Málaga, Oviedo, Palma de Mallorca y dos en Sevilla.

La entidad seguirá siendo inquilina de estos inmuebles, de acuerdo con un contrato de arrendamiento por 40 años. Además, Santander tendrá un derecho de compra una vez que finalice este este plazo.

El banco llevará a cabo un procedimiento similar con sus sucursales, ya que continuará como inquilino en dichas oficinas al menos durante quince años, tras venderlas al grupo británico Pearl por 2.040 millones de euros, con 860 millones de euros en plusvalías.