Los empresarios españoles, los más pesimistas del mundo

El optimismo de los empresarios españoles sobre las perspectivas económicas de nuestro país ha caído drásticamente respecto a 2007. Tan sólo un 33% de los empresarios y directivos españoles considera que la economía ofrece buenas perspectivas –frente a un 53% en el año 2007-. Otro 32% es pesimista, y el tercio restante permanece dubitativo. Estos datos son los menos favorables desde 2003 y significan un alejamiento de las percepción media en Europa, donde un 53% del colectivo empresarial se muestran optimista para el nuevo año, según los datos de la encuesta que Grant Thornton realiza a 7.800 empresas privadas de los 34 países que representan el 83% del PIB mundial.

El clima económico general es la principal causa mencionada por los empresarios y directivos españoles como motivo de su pesimismo, seguida a gran distancia por los tipos de interés y la presión inflacionista. Sin embargo, el clima económico y las turbulencias financieras no parecen haber afectado tan intensamente a las percepciones de los empresarios de otras regiones y países del mundo.

La principal conclusión del informe es que España está muy por debajo de Europa en optimismo y del mundo. El descenso del optimismo en España es el tercero más pronunciado del ranking mundial, sólo superado por Irlanda y Tailandia.

“Los resultados del estudio en la mayoría de lo países –afirma José María Fernández Ulloa, socio director general de Audihispana Grant Thornton– son más positivos de lo que cabía esperar y reflejan confianza en la economía global pese a que hayamos entrado en un periodo de mayor incertidumbre, una vez que el fuerte ritmo de crecimiento de los últimos cinco años ha terminado.

"A pesar de que la crisis de las hipotecas subprime no afecta directamente a la economía española, gracias a que poseemos uno de los sistemas financieros más solventes del mundo, la percepción notablemente menos optimista de los empresarios españoles podría ser una consecuencia de la crisis que actualmente estamos viviendo en el sector inmobiliario español, que no podemos olvidar ha sido uno de los motores del crecimiento del país en los últimos años. Esto, unido a la moderación del consumo y al endurecimiento del crédito, puede hacer pensar a los empresarios que sus beneficios llegarían incluso a caer este ejercicio”, añade-

Polonia, Holanda y Alemania, los más optimistas de Europa

Los países más optimistas dentro de la Unión Europea son Polonia, Holanda y Alemania, país este último que tras diez años de ajustes ha recuperado su productividad gracias a unas cuentas públicas equilibradas, un balance comercial positivo y unas buenas expectativas de crecimiento. Por el contrario, entre los países menos optimistas de la Unión Europea, junto con España, se encuentra Italia, donde la crisis financiera internacional parece estar actuando como acelerador del proceso de ajuste de la economía.

Los países más optimistas del mundo son Filipinas, India y Vietnam, naciones que sin duda se han visto favorecidas por un fuerte crecimiento económico durante los últimos años. En el otro extremo despunta Japón, cuyo ya tradicional pesimismo se ha agudizado alarmantemente pasando de un balance -5 en 2007 a -44 para 2008. La fortaleza del Yen está mermando sus exportaciones, lo que unido a la baja demanda de consumo interno, la desaceleración de la economía estadounidense y la reducción en la construcción de viviendas, ha desembocado en un intenso clima de pesimismo entre los empresarios japoneses. Estados Unidos, a pesar de ser el lugar de origen de la crisis del sector hipotecario, se muestra más optimista que España y que el Reino Unido.