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Nadie se atreve con el Santander: no habrá más demandas en España por el caso Madoff
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EL 93% DE LOS CLIENTES Y DEL PATRIMONIO ACEPTA LA OFERTA DE LAS PREFERENTES

Nadie se atreve con el Santander: no habrá más demandas en España por el caso Madoff

Emilio Botín es mucho Emilio Botín. A pesar de la polémica suscitada, nadie va a interponer una demanda contra el Banco Santander en España por las

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Nadie se atreve con el Santander: no habrá más demandas en España por el caso Madoff

Emilio Botín es mucho Emilio Botín. A pesar de la polémica suscitada, nadie va a interponer una demanda contra el Banco Santander en España por las pérdidas sufridas en los fondos gestionados por Bernard Madoff, según fuentes jurídicas solventes. De hecho, el 93% de los clientes y del patrimonio ha aceptado la oferta de compensación mediante las conocidas preferentes del banco, pese a las condiciones que impone a los clientes y pese a las importantes comisiones cobradas por algunos bufetes de abogados. La única demanda de afectados es la class action presentada en EEUU a la que pueden sumarse todos aquellos que no han aceptado el canje si finalmente resulta vencedora en los tribunales.

Es cierto que se han presentado dos demandas en nuestro país contra el Santander, una en León y otra en Madrid. Pero no se refieren a las pérdidas sufridas en el fondo Optimal Strategic US Equities, sino que se trata de inversores que dieron orden de reembolso antes de que estallase el escándalo y no fue ejecutada por el banco. Esta circunstancia, sobre la que ya existe doctrina en Luxemburgo (donde UBS ha sido condenado a resarcir a Oddo por no haber ejecutado una orden similar), hace que sea muy probable que el banco cántabro sea condenado, según las fuentes consultadas. Otra cosa es que luego el Santander pueda demandar a su vez al depositario, HSBC.

En todo caso, no habrá demandas en nuestro país de los clientes que no dieron orden de venta y han perdido su dinero en este producto. Todo el mundo sabe que es muy difícil que le vayan a condenar al Santander por esto, y como había una compensación, la gente prefiere aceptarla aunque no sea muy buena, opina una de las fuentes consultadas. Otra añade que el Santander ha sido muy inteligente con su oferta, porque ha desactivado las demandas con un coste muy reducido para el banco (500 millones de euros). Si no hubiera dado nada, le habrían llovido los juicios y habría perdido muchos clientes.

El Confidencial ya adelantó que la mayoría de los clientes iba a aceptar la oferta de las preferentes, y que sólo los patrimonios más altos iban a rechazarla. En efecto, fuentes del mercado confirman que el 93% de los afectados y del patrimonio al que se dirigía este canje (1.380 millones de euros) lo han aceptado. El plazo para aceptar la oferta finalizaba el 13 de marzo y el canje se ha hizo efectivo el día 18, según estas fuentes. Eso, a pesar de que las condiciones de la oferta han sido objeto de dos advertencias por parte de la CNMV y de duras críticas por parte de medios tan prestigiosos como Barron's, que las consideró un insulto a los afectados.

Los abogados, los grandes ganadores

Muchos de los que van a pasar por el aro han buscado consejo en distintos despachos de abogados que han intentado aglutinar colectivos de afectados, como Jausas & Zunzunegui y, sobre todo, Cremades & Calvo Sotelo. Si han caído en las manos de este último, no sólo tendrán que aceptar el 2% de interés que pagan las preferentes, su iliquidez o el compromiso sine die de mantener su dinero en el Santander; además, tendrán que entregar al abogado un 10% de la cantidad recibida en preferentes como compensación por la pérdida sufrida, en pago por algo que podría haber hecho el cliente solito: aceptar la oferta del banco. Dado que Cremades anunció que sus clientes sumaban unas pérdidas de 120 millones de euros y que el 90% han aceptado la oferta del Santander, se ha llevado al menos 10,8 millones sin pisar un juzgado.

Estos despachos sostienen que, de no haber sido por su intervención, Botín no habría ofrecido una compensación. No obstante, esto es muy dudoso porque la decisión del Santander se debe a algo mucho más importante que a la presión de un bufete: el riesgo de fuga masiva de clientes y el tremendo daño que estaba sufriendo su reputación. Además, ni Cremades ni el banco han confirmado ninguna reunión sobre este asunto.

Por otro lado, Cremades ha incurrido en flagrantes contradicciones, como aconsejar a sus clientes en España aceptar la oferta del banco y asociarse al mismo tiempo con el despacho norteamericano Labaton Sucharow para la class action de Miami en nombre de inversores latinoamericanos, que llegó a solicitar que se prohibiera al Santander hacer llegar la oferta a los clientes por ser coercitiva. Eso sí, nadie le puede negar una labor de relaciones públicas encomiable al presidente dela firma, Javier Cremades, a base de ruedas de prensa multitudinarias en las que consiguió convocar a corresponsales de importantes medios internacionales. Este bufete no respondió ayer a las llamadas de este diario.

Los que no han aceptado pueden conseguir mejores condiciones

¿Y qué pasa con ese 7% de afectados que no ha aceptado la oferta de Santander? Pues sólo les queda confiar en que la demanda colectiva de EEUU -con sus ramificaciones en Miami y Nueva York- triunfe. O, más probablemente, que alcance un acuerdo con Santander más satisfactorio que el de las preferentes. Lo bueno que tiene el sistema judicial norteamericano es que no hace falta haberse sumado a la demanda: una vez que hay un fallo o un acuerdo favorable, sólo hay que apuntarse a la compensación, siempre que pueda acreditar que es un afectado por el fondo de Optimal. Y no haber firmado el acuerdo de compensación con el Santander que impide cualquier reclamación legal, claro.

La gran duda en este caso es si una decisión de un juez norteamericano es de obligado cumplimiento en España; es decir, el problema de la jurisdicción. La demanda sostiene que sí porque la operativa de Madoff, la supuesta due diligence de Optimal que incumplió su deber de descubrir que Madoff era un fraude y hasta la famosa reunión de Rodrigo Echenique con Madoff -que el propio Botín ha reconocido públicamente- tuvieron lugar en suelo estadounidense. Obviamente, los abogados del banco tratarán de convencer al juez de lo contrario.

Emilio Botín es mucho Emilio Botín. A pesar de la polémica suscitada, nadie va a interponer una demanda contra el Banco Santander en España por las pérdidas sufridas en los fondos gestionados por Bernard Madoff, según fuentes jurídicas solventes. De hecho, el 93% de los clientes y del patrimonio ha aceptado la oferta de compensación mediante las conocidas preferentes del banco, pese a las condiciones que impone a los clientes y pese a las importantes comisiones cobradas por algunos bufetes de abogados. La única demanda de afectados es la class action presentada en EEUU a la que pueden sumarse todos aquellos que no han aceptado el canje si finalmente resulta vencedora en los tribunales.

Emilio Botín Bernard Madoff