Hasta 25.000 comercios echarán el cierre este año

¿Qué tipo de tiendas se verán más afectadas? Las vinculadas a la debacle de la construcción, por ejemplo mobiliario o decoración. ¿Las que menos? Los comercios dedicados a la alimentación. “Cuando una familia tiene un presupuesto estipulado para la alimentación, evita en los posible acudir a una gran superficie, ya que seguramente gastará más de lo presupuestado debido a la enorme oferta de productos y a las campañas de marketing. En este caso, la tienda de cercanía ofrece lo que uno busca sin más distracciones. Por eso las ventas en las grandes superficies descienden en casi un 6% interanual”, explica César García, director del departamento de Política Sectorial de la Unión de Trabajadores Autónomos.

Un diagnóstico que refuerza el que recientemente aportaba el Registro de Economistas Forenses, que en su aproximación a los procedimientos concursales admitidos a trámite en el tercer trimestre del año, aseguraba que la antigua suspensión de pagos estaba afectando mayoritariamente a empresas del sector inmobiliario pero también contagiando a otros sectores vinculados. De hecho, las ventas en equipamiento del hogar habrían caído un 11,4% de media en lo que va del año, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) a mes de octubre, mientras que las ventas en los comercios dedicados a productos no alimenticios estarían registrando descensos del 6,8% y los alimenticios sólo del 1,9% en media anual.

Aunque desde el año 1991 no se había registrado ningún ejercicio en el que hubiera disminuido la cifra neta de autónomos inscritos en la Seguridad Social, las cosas en 2008 pintan mal. Según datos del Ministerio de Trabajo, si en enero la cifra de autónomos alcanzaba los 3.390.000, en octubre apenas se situaba en 3.346.400, un total de 43.600 menos, a falta todavía de dos meses para el cierre del ejercicio. 60 días que no se prevén especialmente buenos si tenemos en cuenta que sólo entre septiembre y octubre la destrucción neta fue de 27.300 afiliados autónomos. El último dato del índice del comercio al por menor, correspondiente a septiembre, registró un descenso del 7,2%, prueba última del deterioro del consumo.