Bank of America y Barclays dicen adiós al rescate de Lehman Brothers
Las reuniones se han desgranado este fin de semana a ritmo frenético con el fin encontrar la mejor fórmula para el posible rescate de Lehman Brothers. Autoridades económicas y dirigentes de los principales bancos de
Las reuniones se han desgranado este fin de semana a ritmo frenético con el fin encontrar la mejor fórmula para el posible rescate de Lehman Brothers. Autoridades económicas y dirigentes de los principales bancos de EEUU, reunidos en la Reserva Federal de Nueva York, buscaban soluciones para el cuarto banco de inversión en EEUU que, abrumado por sus pérdidas en el sector inmobiliario, podría contagiar a todo el sistema financiero. Pero las cosas no marcharon. Barclays, que se perfilaba como el comprador más probable, abandonó la negociación a media tarde, tras no llegar a un acuerdo para el acometer rescate con el apoyo de otras entidades o la financiación del Gobierno estadounidense, según un portavoz del banco.
El segundo pretendiente, Bank of America, dio la sorpresa a última hora de ayer, no tanto por retirarse de las conversaciones por Lehman después de que el Gobierno no aportara garantías financieras, sino por conocerse que ha iniciado conversaciones de fusión con Merrill Lynch, según informó The Wall Street Journal en su edición online.
La ruptura de las negociaciones aumenta la perspectiva de que Lehman Brothers se declare en quiebra. El Gobierno de EEUU, con Paulson al frente, exige que la solución no implique la intervención financiera del Estado, que ya la semana pasada tuvo que acudir al rescate de las entidades hipotecarias semipúblicas Fannie Mae y Freddie Mac y en marzo asistió a Bear Stearns tras el colapso de esta entidad. Los bancos privados, por su parte, se muestran reacios a cualquier iniciativa sin contar con algún tipo de respaldo económico del Gobierno.
Una de las posibilidades que se estudian es una iniciativa en la cual las entidades bancarias proveerían financiación para que Lehman se deshiciera de sus activos inmobiliarios problemáticos. Otra alternativa es que la entidad de inversión, que esta semana ha perdido más del 74% de su valor en Bolsa, se declarara en quiebra. Dado que Lehman Brothers, una institución que cuenta con 158 años de antigüedad, mantiene negocios con varios de las principales entidades financieras en Wall Street, su derrumbe podría tener efectos en todo el sistema bancario.
Silencio helador
Las reuniones se han desgranado este fin de semana a ritmo frenético con el fin encontrar la mejor fórmula para el posible rescate de Lehman Brothers. Autoridades económicas y dirigentes de los principales bancos de EEUU, reunidos en la Reserva Federal de Nueva York, buscaban soluciones para el cuarto banco de inversión en EEUU que, abrumado por sus pérdidas en el sector inmobiliario, podría contagiar a todo el sistema financiero. Pero las cosas no marcharon. Barclays, que se perfilaba como el comprador más probable, abandonó la negociación a media tarde, tras no llegar a un acuerdo para el acometer rescate con el apoyo de otras entidades o la financiación del Gobierno estadounidense, según un portavoz del banco.