Caja Madrid se 'carga' a los principales responsables de su red aprovechando la compra de Miami

Al mismo tiempo que anunciaba su primera gran compra en el exterior -el City National Bancshares de Florida, por 927 millones de dólares- y planteaba la creación de un holding de participaciones a imagen y semejanza de Criteria Caixacorp llamado Cibeles, Caja Madrid acometía un movimiento mucho más discreto pero no por ello menos importante: un cambio total de los responsables de su red, compuesta por cerca de 2.000 oficinas.

El movimiento consiste, por un lado, en el nombramiento del hasta ahora director general de banca comercial, Ramón Ferraz, como director general de expansión internacional de Cibeles. Su sustituto será Fernando Sobrini, hasta ahora responsable de la zona sur de la Comunidad de Madrid, que tendrá el cargo de director de banca de particulares con categoría de subdirector general (es decir, baja el rango del responsable de la red). Por otro lado, el segundo de a bordo de Ferraz, José María Eusebio (que era subdirector general), ha pasado a sustituir a Sobrini al frente de la zona sur de Madrid.

Estos cambios completan la salida, hace casi un año, del director de marketing de particulares de Caja Madrid, Antonio Román, que pasó a ser responsable de la unidad de control.

¿A qué obedecen estos cambios? Según algunas fuentes de la entidad que preside Miguel Blesa, la creación de Cibeles exige la incorporación de profesionales de primera fila de la casa, lo que hace correr el escalafón. Pero otras fuentes son más críticas e inscriben los cambios en el giro radical del negocio en el mercado español a raíz de la crisis financiera internacional y el estallido de la burbuja tecnológica: el fin de la "edad de oro" que el sector anunció de forma unánime en el reciente Encuentro organizado por Deloitte y que ya ha empezado a evidenciarse con los resultados trimestrales de Bankinter.

En busca de nuevas vías de crecimiento

"La red de Caja Madrid llevaba años viviendo exclusivamente de las hipotecas; pero ahora que no se hace ni una hipoteca, hace falta buscar alternativas, que es lo que persigue este cambio de responsables", aseguran estas fuentes.

Otras interpretaciones dentro de la caja van incluso más allá y sostienen que "Blesa ha seguido una estrategia muy inteligente: hace tiempo que tenían decididos estos cambios, y han esperado a tener una noticia importante como la compra de Miami para hacerlos efectivos y que pasen desapercibidos en medio del ruido mediático provocado por la adquisición".

Esta última fuente argumenta que el cambio de destino de Ferraz significa, en la práctica, pasar de dirigir una red de 2.000 oficinas a otra de 19 (que son las que tiene el City National). Ahora bien, las atribuciones de este directivo no se quedarán ahí, sino que será responsable de todas las compras que acometa en el futuro el holding de participaciones de la caja.

Matías Amat, el gran ganador

En el nuevo organigrama de Caja Madrid, el recién nombrado responsable de la red, Sobrini, quedará a la misma altura que otros dos ejecutivos con rango de subdirector general que ya ejercían sus funciones con anterioridad: Gonzalo Alcubilla, director de banca de empresas, y Carlos Stilianopoulos, director de tesorería y mercado de capitales.

Los tres dependerán del gran ganador de la reestructuración, Matías Amat, que hasta ahora ocupaba un difuso cargo de coordinador de las direcciones generales y que ha sido nombrado director general de negocio. Amat también ha asumido recientemente la presidencia de Inversis Banco.