Crédit Agricole pedirá entrar en el Consejo de Bankinter en cuanto llegue al 29,9%

Los tiempos están cambiando. Y los días en que se podía manejar un banco controlando un porcentaje mínimo de su capital, también. La decisión del Banco de España de autorizar a Jaime Botín a llegar únicamente hasta el 24,99% de Bankinter, en lugar del 29,99% que había solicitado, es interpretada por el mercado como un aviso en toda regla al tradicional accionista de referencia del banco. Crédit Agricole pedirá entrada en el Consejo de Administración una vez alcance el 29,99% para el que recibió permiso el jueves 21 de febrero: “Primero comprar, después reclamar”.

La entidad financiera gala incrementará la presión sobre el tradicional banco de la familia Botín una vez investido por la autoridad monetaria del caché de primer accionista. Los gestores de la entidad se refugian en un informe encargado ad hoc a un conocido bufete de abogados madrileño para cerrar a cal y canto la entrada de los galos en el Consejo. Fuentes cercanas al antiguo banco emisor señalan que la decisión en torno al menor de los Botín se basó en la negativa de éste a garantizar que llevaría a cabo la operación en un plazo determinado, garantía que, por el contrario, si presentó el grupo francés.

Cuando alguien pide autorización para elevar su presencia en una entidad de crédito, el Banco de España reclama al peticionario el compromiso específico de que perfeccionará la operación en un plazo determinado, para evitar que, en caso contrario, la petición encierre el simple propósito de calentar el valor. Se trata, por tanto, no solo de que el solicitante disponga de los recursos suficientes para financiar esa compra, sino de que esté realmente dispuesto a gastarse el dinero en ella en un plazo determinado.

El feo del Banco de España a Botín

Las fuentes señalan que la decisión del antiguo banco central encierra un cierto mensaje para Jaime Botín: a Cibeles no le gusta la situación de un banco donde manda por control remoto un señor que no desempeña ninguna función ejecutiva ni figura en el organigrama, pero sin cuya aquiescencia no se mueve un papel en la casa, y cuyo protagonismo viene reforzado por el apoyo de una serie de accionistas menores: “El Banco de España le está diciendo que no quiere una reedición del espectáculo habido con Ram Bhavnani, y que si quiere realmente mandar en Bankinter tendrá que hacer una OPA en toda regla y abandonar este tipo de espectáculos”, sostienen las fuentes.

Como se señalaba en este mismo diario el pasado lunes (ver noticia), el feo del Banco de España hacia Botín podría tener escasas consecuencias desde el punto de vista de la pelea que por el control de Bankinter mantiene con Crédit Agricole, a menos que los galos se decidieran a cortar por lo sano con una OPA. Fuentes del mercado creen que Jaime Botín controlaría con cierta comodidad cerca del 40% del capital del banco, sumando a su hipotético 24,99% -cuando lo compre o, como sospechan algunos, lo aflore- el 5,25% de la familia Masaveu, el 4,69% que está en manos de directivos y trabajadores, y a quienes los gestores han pedido la sindicación, y otros menores.