Yoigo mira a Suecia para confirmar su continuidad en el mercado español

No ha nevado, pero la bola de nieve ha adquirido un tamaño considerable, casi tan grande como para borrar a Yoigo del mapa de operadores de telefonía móvil en España. Mañana, su principal accionista, la sueca Telia Sonera, presenta resultados en Estocolmo. Será entonces cuando se despejen todas las incógnitas que han gravitado en torno al futuro de su filial española, sobre todo a raíz de que esta semana el diario sueco Dagens Industri informara sobre sus inminentes planes de retirada del mercado.

Tan pronto como la noticia tuvo eco en España, Telia Sonera se apresuró a desmentir que fuera a cerrar Yoigo, donde posee un 76% y comparte accionariado con Abengoa, ACS y FCC. El argumento esgrimido por el rotativo sueco, que hacía referencia a fuentes internas de la compañía, era la dificultad del operador para ampliar la escasa cuota de mercado (menos del 1%) y su rentabilidad, a pesar de su agresiva política de bajo costo para competir con Telefónica, Vodafone y Orange.

Para despejar dudas, la próxima semana Yoigo presentará los resultados correspondientes al ejercicio de 2007. Su consejero delegado para España, Johan Ansjo, estará acompañado para la ocasión por el presidente de Telia Sonera, según fuentes de la propia operadora, lo que debería despejar cualquier tipo de duda acerca de la continuidad de la compañía en el mercado español. “Este es un proyecto a largo plazo y por lo tanto no tendría sentido abandonar después de poco más de un año”.

Malestar de los clientes

Como las malas noticias nunca vienen solas, Yoigo ha tenido que salir al paso de las reacciones provocadas en los consumidores ante el cambio de tarifas en una de sus ofertas. Dentro de su política de comercialización, la operadora había ofrecido llamadas gratis entre sí para todos sus clientes. Sin embargo, el flujo de minutos consumidos superó todas sus previsiones, hasta el punto de obligar a la low cost a modificar su oferta, para agravio de sus clientes más fieles.

Por si fuera poco, también puede jugar en contra de los intereses de Yoigo la aparición en el mercado español de Simyo, la nueva marca de telefonía móvil para España de la holandesa KPN, que tiene previsto ofrecer tarifas hasta un 25% más baratas (9 céntimos el minuto) que las ofertadas por la filial de la operadora sueca, que hasta el momento detentaba los precios más competitivos. De esta manera, y a falta de nuevas sorpresas, los números del ejercicio 2007 hablarán por sí solos la próxima semana.