¿Es posible una opa sobre Telefónica como la de KKR a Telecom Italia?
La operadora española celebra en bolsa un movimiento que redescubre el valor oculto en el sector que los inversores parecen estar pasando por alto
Telefónica inicia la semana con fuerzas renovadas. La operadora española registra en la media sesión de este lunes avances que han alcanzado el 6,4%, animada por la opa que el fondo KKR ha lanzado este fin de semana por la italiana Telecom Italia. Los casi 11.000 millones de euros (y más 22.500 millones de deuda) que está dispuesto a pagar el gigante del capital riesgo por el negocio del grupo trasalpino representan una prima del 44% sobre el precio de sus acciones, una sobrevaloración que no solo provoca el lógico impulso de la cotización de Telecom Italia, sino que desencadena una ola de optimismo con repercusiones sobre los grandes grupos del sector en Europa.
Las vías de este contagio parecen obvias. Al fin y al cabo, la de KKR representa la enésima muestra de interés de los fondos de capital privado en el sector de telecomunicaciones europeo, desde hace años desdeñado por los inversores en bolsa. "Los fondos de 'private equity' no son precisamente sospechosos de sobrepagar por las compañías que compran, más bien al contrario. Y lo que están diciendo con este interés es que hay un valor en el sector por encima de lo que está considerando el mercado", apunta Juan Peña, analista de GVC Gaesco.
Telecom Italia es señalada frecuentemente como paradigma del ocaso de las grandes operadoras de telecomunicaciones europeas. Desde su momento más boyante, a inicios del siglo, el grupo trasalpino se ha visto forzado a un intenso repliegue de sus actividades, hasta convertirse prácticamente en un grupo doméstico, en un proceso en el que ha destruido más del 80% de su valor en bolsa. Estos números eclipsan incluso las pérdidas que acumula Telefónica en este periodo, aunque el derrotero seguido por las acciones de la compañía que dirige José María Álvarez-Pallete en los últimos años tiene muchas similitudes con el del grupo italiano.
Alantra cree que una opa sobre Telefónica enfrentaría obstáculos muy importantes
Es por eso que en el mercado se ha llegado a plantear de manera episódica la posibilidad de que Telefónica fuera también objeto de una opa como la lanzada ahora sobre Telecom Italia. El grupo español cotiza actualmente a valoraciones inferiores a las que el fondo de capital riesgo está dispuesto a pagar por la operadora italiana. Y en ambos casos, KKR mantiene ya previamente una relación con las operadoras, a través de sendas participaciones en sus negocios de redes (en el caso de Telefónica, controla un 40% de Telxius).
Sin embargo, "aunque existen similitudes entre ambos casos (las acciones tienen un rendimiento muy bajo, los mercados nacionales están bajo presión, activos de fibra valiosos), no creemos que Telefónica sea un candidato a la adquisición", observan los analistas de Alantra Equities en un informe publicado este lunes. Entre las razones que consideran que dificultarían una operación similar aducen la probable oposición del Gobierno español (tampoco puede descartarse que el Gobierno italiano entorpezca los planes de KKR); el mayor tamaño de Telefónica (su capitalización triplica la que registraba el grupo italiano al cierre del pasado viernes), y la complejidad, dada la presencia de Telefónica en más de 10 países, con un papel dominante en muchos de ellos, lo que daría lugar a un proceso de aprobación regulatoria muy largo.
Sin embargo, y sin que pueda descartarse por completo esta vía, el movimiento sí encierra una clave mucho más relevante para Telefónica, como es el apetito que generan en el mercado los activos de infraestructura de telecomunicaciones, clave de las valoraciones ofrecidas por KKR, en un momento en el que Telefónica valora la venta de parte de su red de fibra en España, que el mercado estima que podría alcanzar valoraciones cercanas a los 20.000 millones (frente a los poco más de 23.000 millones en los que se valora hoy el conjunto del negocio). Es indiscutible que cualquier movimiento que pueda engordar estas valoraciones sería positivo para los planes de la operadora española.
Sin embargo, entre los expertos persiste la sensación de que las buenas nuevas que trae consigo la opa sobre Telecom Italia difícilmente supondrán un remedio persistente para las tribulaciones actuales de Telefónica.
El grupo español ha ejecutado en los últimos tiempos una serie de movimientos de transformación cuyos resultados han dejado ya buenas sensaciones en sus resultados en mercados clave como Reino Unido, Alemania, Brasil y hasta la siempre discutida división de Hispanoamérica. No obstante, las dificultades que atraviesa el negocio en España, penalizado por la intensa competencia, se mantiene como un lastre que impide al grupo recobrar el favor de los inversores (pese a sus ganancias cercanas al 30% en 2021 aún sigue más de un 25% por debajo de sus niveles precovid).
El movimiento podría ayudar a inflar las valoraciones de su red de fibra en España
Es ahí donde el mercado espera soluciones que difícilmente vendrán desde Italia. Aunque la oferta de KKR sirviera para inflar el precio ante una hipotética venta parcial de la red de fibra en España, en el mercado existen ciertas dudas sobre el empleo de los fondos que obtendría Telefónica. “El grupo puede ingresar hasta 9.000 millones y los inversores están pidiendo visibilidad sobre qué se va a hacer con ese dinero. Puedes reducir deuda, pero esto ya no es tan urgente. Si estás renunciando a activos estables, tiene que ser para obtener crecimiento”, apunta Peña, quien considera que tal vez podrían llevarse a cabo movimientos corporativos en la división de Telefónica Tech.
A falta de nuevas vías de crecimiento del negocio, la solución a los problemas del sector en España solo parece posible a través de nuevos movimientos de consolidación, que aliviaran la intensa presión competitiva. Así lo han puesto de relieve en las últimas semanas los dirigentes de los principales operadores en el mercado nacional. Sin embargo, tras la reciente fusión de MásMóvil y Euskaltel, nadie parece en disposición de impulsar nuevamente este proceso que, de hecho, en no pocas ocasiones se ve obstaculizado por las propias operadoras que se sienten perdedoras ante la integración de dos rivales.
Se trata, qué duda cabe, de un proceso muy complejo y que debe salvar importantes resistencias. Probablemente, también por parte de las autoridades reguladoras. Pero parece también la única vía de ofrecer un remedio estructural a los problemas del sector. Y ese es un terreno en el que la opa sobre Telecom Italia poco tiene que aportar.
Telefónica inicia la semana con fuerzas renovadas. La operadora española registra en la media sesión de este lunes avances que han alcanzado el 6,4%, animada por la opa que el fondo KKR ha lanzado este fin de semana por la italiana Telecom Italia. Los casi 11.000 millones de euros (y más 22.500 millones de deuda) que está dispuesto a pagar el gigante del capital riesgo por el negocio del grupo trasalpino representan una prima del 44% sobre el precio de sus acciones, una sobrevaloración que no solo provoca el lógico impulso de la cotización de Telecom Italia, sino que desencadena una ola de optimismo con repercusiones sobre los grandes grupos del sector en Europa.