Guindos: el mercado ve “incertidumbre regulatoria” por los impuestos a la banca
El vicepresidente del BCE se muestra optimista con la inflación en un foro organizado por El Confidencial y Mapfre y espera una recuperación del consumo el año que viene
Luis de Guindos, vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), ha alertado este viernes de que la “incertidumbre regulatoria” que percibe el mercado sobre los bancos, ante la imposición de impuestos específicos como el aprobado este jueves en el Congreso en España, explica el diferencial de valoraciones entre la banca en Europa y en Estados Unidos.
El vicepresidente del BCE y ex ministro español ha participado en el I Foro del Observatorio Económico de Mapfre Economics y El Confidencial, en el que ha avisado de que los gravámenes que se están imponiendo en algunos países a los bancos eleva la rentabilidad exigida por los inversores (coste del capital) por la incertidumbre regulatoria.
“Hay que analizar la situación de la banca en Europa, con buen nivel de capital y liquidez suficiente. Ha habido un incremento notable de la rentabilidad por el aumento de los tipos de interés. Antes del covid estaba en el 4%, y ahora está en una media del 10%. Simultáneamente, aunque ha habido una mejora de la valoración en el mercado, no ha sido tan intensa como la mejora de la rentabilidad, porque ha aumentado el coste del capital, algo que no ha ocurrido en Estados Unidos. Esto tiene que ver porque el potencial de crecimiento de Europa es inferior a Estados Unidos y porque no tenemos una Unión Bancaria, y por la incertidumbre regulatoria en torno a los impuestos como el impuesto a la banca en España y que se han producido también en otros países”, ha señalado De Guindos en el foro organizado por El Confidencial y Mapfre.
Sobre el diseño del impuesto, no ha querido entrar en el proceso de negociaciones y votaciones de esta semana, y ha recordado que lo conveniente es que este tipo de impuestos no modifique las decisiones comerciales de los bancos. Es decir, que sean neutrales. Y ha recordado el ejemplo de Italia, donde se modificó para ello el tributo: “Nosotros creemos que no debe afectar a la transmisión de la política monetaria, que no afecte al crédito. No conozco el detalle del impuesto español, cuando lo tengamos haremos pública nuestra opinión”, ha resaltado.
El vicepresidente del BCE ha rechazado opinar sobre si hay margen para más fusiones entre grandes bancos en España, después de una profunda reestructuración en los últimos 15 años. Parte de ella, de hecho, se produjo con Luis de Guindos como vicepresidente. Sobre la posibilidad de que no haya competencia y que, por ello, los bancos no protagonizaran una guerra por el pasivo en 2022 y 2023, con las subidas de tipos, ha recordado: “Los bancos han tenido mucha liquidez y por eso no necesitaban competir para captar depósitos, pero esto está cambiando porque estamos retirando mucha liquidez. El año que viene dejaremos de reinvertir los vencimientos de nuestra cartera de deuda”.
Perspectivas de crecimiento
De Guindos ha indicado que las proyecciones que hará públicas el BCE en diciembre estarán en línea con las publicadas por la Comisión Europea, que apuntan a un crecimiento por debajo del 1% en 2024 y levemente por encima del 1% el año que viene.
La clave, sostiene el vicepresidente del banco central, es que “la inversión está muy parada, casi plana, y el consumo no está despegando, lo que es una contradicción, porque hay un aumento de la tasa de ahorro de las familias, y con el incremento de la renta disponible por el aumento de los salarios y la reducción de la inflación, debería haber un aumento del consumo”.
En este punto es importante “el concepto de renta permanente, si está funcionando. Las familias tienen dudas sobre el futuro, por confianza o por riesgos geopolíticos. Pero tras varios trimestres de recuperación de la renta disponible, esperamos ver una recuperación del consumo”, ha apostillado.
Para las perspectivas de inflación hay más optimismo. “El año que viene veremos una desaceleración de la inflación salarial y un aumento moderado de la productividad, que permitirá una mejora de los costes laborales unitarios que afectarán a la inflación de salarios”, ha recordado De Guindos.
El vicepresidente de la autoridad monetaria ha restado importancia a si en diciembre habrá un recorte de 25 puntos básicos o de 50 puntos básicos, ante los cambios que ha habido en el escenario económico desde la última reunión con la victoria de Trump en Estados Unidos o la escalada en la guerra de Ucrania. “Ya hemos reducido tres veces los tipos de interés. El ajuste final de la política monetaria es muy complejo. Cuando el BCE cambia los tipos, esperas que se traslade a los mercados de capitales y de financiación y afecte a la inflación. Lo que diría es que si se cumplen las proyecciones de la inflación para 2025, la dirección de la política monetaria es clara”.
Precisamente, tras la victoria de Trump, De Guindos ha advertido del riesgo de una guerra comercial, que sería muy perjudicial para el crecimiento mundial, como se vio en los años 30. “Está muy analizado”, ha incidido: “Se puede generar un círculo vicioso de aranceles, porque cuando impones aranceles es de esperar que el que los recibe también los imponga. Y si impones un arancel del 60% a China, como se ha hablado, puede buscar comercio por otro lado”.
También ha puesto el acento en la política fiscal de Estados Unidos y su potencial impacto en la inflación y en los mercados financieros: “Estados Unidos ya tiene un déficit del 6,5% y una ratio de deuda cercana al 100% del PIB. Los mercados han empezado a descontar una política fiscal expansiva y han empezado a subir los tipos de interés de los bonos de corto plazo”.
Luis de Guindos, vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), ha alertado este viernes de que la “incertidumbre regulatoria” que percibe el mercado sobre los bancos, ante la imposición de impuestos específicos como el aprobado este jueves en el Congreso en España, explica el diferencial de valoraciones entre la banca en Europa y en Estados Unidos.