Los bancos se desploman con la victoria de Trump y BBVA (-6,6%) lidera las caídas

Los bancos lideran las caídas del Ibex 35 tras la victoria de Donald Trump y su regreso a la Casa Blanca. El mercado ha asumido que el nuevo periodo de Trump al frente del Gobierno de Estados Unidos reducirá crecimiento en Europa y será negativo para México, y está castigando especialmente a BBVA, por su exposición a México.

Los inversores están moviendo sus carteras para prepararse para un mandato que se espera inflacionista por las medidas arancelarias, y que obligaría a la Reserva Federal (Fed) a subir tipos. De hecho, el dólar se está fortaleciendo frente al euro. También han puesto en cuarentena a los sectores más cíclicos por la posibilidad de que la economía europea sufra ante un deterioro del comercio global, y las nuevas curvas de tipos apuntan a que podría haber más recortes de lo previsto en Europa.

Pero la primera interpretación del mercado, más allá de que la Fed exporte inflación, es que el Banco Central Europeo (BCE) podría modificar su hoja de ruta y suavizar más su política, perjudicando a los bancos, ante un debilitamiento de la economía europea. Los inversores apuestan por un deterioro de la globalización, menos comercio y perjuicio para las economías más interconectadas con Estados Unidos.

"La curva americana reacciona con subidas de tipos porque se espera que la política fiscal de Trump, que va a extender las bajadas de impuestos, eleven el déficit. Sin embargo, en Europa los tipos bajan porque el mercado descuenta que el BCE tendrá que bajar los tipos más de lo inicialmente previsto para apoyar a la economía, que se verá afectada de manera negativa por el endurecimiento de los aranceles americanos. Los bancos domésticos son muy sensibles a los tipos de interés, y esa bajada de las expectativas de tipos en Europa explica las caídas de hoy", resume Emilio Ortiz, director de inversiones de Mutuactivos. "Es previsible que el BCE responda a los aranceles de Trump con una política más dovish (laxa)", añade Guillermo Santos, socio de iCapital.

Por ello, hay una ola de ventas en sectores cíclicos como el bancario, que es uno de los primeros en sufrir en cuanto hay una desaceleración de la economía. Todos los bancos españoles cotizan en rojo. BBVA es el que más ha caído, un 6,6%, porque suma a lo anterior su elevada exposición a México. Sabadell se deja también un 6,5%. Los números rojos también se ceban con el resto de bancos cotizados: Santander cede un 4,8%, CaixaBank, un 3,7%, Unicaja, un 4,4%, y Bankinter, un 3,8%. Santander sufre por su exposición a México, aunque también es el que tiene más presencia en Estados Unidos con su negocio de banca de inversión, Consumer USA y el lanzamiento reciente de Openbank.

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Los bancos sufren por un motivo externo, como es la victoria de Donald Trump, explica Víctor Alvargonzález, CEO de Nextep, ante el impacto negativo en las economías latinoamericanas y en Europa de la política arancelaria que ha prometido para llegar a la Casa Blanca, pero también está el impuesto a la banca: "Estamos en plena negociación de si van a pagar o no el impuesto de la banca y tiene pinta de que puede ser permanente o, por lo menos, durar mucho tiempo".

En el caso de BBVA, la entidad que más cae, tiene en México a su principal mercado, donde genera entre el 50% y el 60%. En los últimos años, ha estado más cerca del 60%, aunque en 2024 está ganando peso España, con lo que la contribución del antiguo Bancomer está cayendo hacia la mitad, pero sigue siendo decisiva.

De hecho, BBVA ya ha sufrido en bolsa en los últimos meses con su exposición a México, ante la caída del peso mexicano frente al euro, que era del 15% en el acumulado anual hasta este miércoles. Con la victoria de Donald Trump cae otro 2%.

El mercado ha interpretado como una noticia negativa para la economía mexicana la victoria de Trump. A esto se suma la incertidumbre que hay tras la llegada a la presidencia de México de Claudia Sheinbaum. De hecho, varios analistas han alertado de la desaceleración de la economía mexicana y la caída del peso como una amenaza para las cuentas del banco.

Precisamente, BBVA ha lanzado una opa hostil sobre el Sabadell para aumentar su presencia en España y reducir la dependencia de economías emergentes, más rentables pero también más volátiles, como México o Turquía. En México hay un proceso de bancarización que permite a los bancos generar ingresos solo por estar allí, sin necesidad de competir por ganar cuota de mercado. Pero también eleva el coste del riesgo, que es la rentabilidad que exigen los inversores.

La caída en bolsa de BBVA ya es del 15% desde el 29 de abril. El banco está intentando convencer al mercado y a las instituciones de que la operación es positiva para los accionistas de las dos entidades y para la economía, aunque el CEO del Sabadell, César González-Bueno, indicó el jueves que la fusión supondría la destrucción de 4.000 empleos a tenor del ahorro previsto de 300 millones en personal, tal y como publicó este medio en agosto.