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El auge de la gestión pasiva: ya mueve 16 veces el PIB de la economía española

Por EC Brands

En 1975, con intención o sin ella, John Bogle provocó una revolución en la industria financiera de todo el mundo. Lo hizo merced a la creación de un fondo de inversión cuyo funcionamiento era totalmente distinto al de sus predecesores.

Y es que hasta entonces las inversiones por parte de los fondos se producían de manera activa, es decir, la decisión sobre dónde meter el dinero dependía exclusivamente de la voluntad de su responsable. Frente a ello, Bogle fundó el Vanguard Group, una corporación que supuso el primer fondo de gestión pasiva de la historia.

Dos modelos, dos tipos de rentabilidades

A diferencia de la gestión activa, la gestión pasiva se limita a seguir unas reglas predeterminadas, como por ejemplo replicar un determinado índice (el S&P 500 o el Ibex 35, entre otros). Por ello, como decimos, no existe un gestor con libertad de acción que seleccione las empresas que considere más atractivas como sí ocurre con la gestión activa.

Informes y gráficos

Desde entonces, esta metodología de inversión no ha parado de crecer y a nivel global ya gestiona más de 20.000 millones de dólares, el equivalente a 16 veces el PIB de la economía española. De hecho, hoy gigantes especializados en productos de inversión pasiva como BlackRock o el propio Vanguard Group se han situado entre los grandes reyes de la industria financiera.

La gestión pasiva no ha parado de crecer y ya gestiona más de 20.000 millones de dólares, el equivalente a 16 veces el PIB de la economía española

Pero, ¿por qué un fondo iba a preferir invertir sin reglas que con ellas? Lo cierto es que en la gestión activa los inversores buscan maximizar sus beneficios, y eso solo se consigue intentando batir las previsiones de los índices.

Por otro lado, la gestión pasiva es eminentemente más barata, ya que, al someterse al propio ritmo del mercado no hay grandes equipos de gestores ni analistas, aunque eso también influye en la escasa flexibilidad de este tipo de inversiones. Eso sí, cabe destacar el significativo aumento de la gestión pasiva: en Estados Unidos, por ejemplo, mientras en 1995 apenas representaban el 5% de los fondos, a día de hoy ya son superiores a los de la gestión activa.

En cualquier caso, ningún tipo de gestión es necesariamente mejor que otra, ya que son muchos más los factores que entran en juego. Si quieres conocer más detalles, no te pierdas el último vídeo de ‘Si lo Hubiera Sabido’, el canal de actualidad financiera de Mutuactivos.