El BCE prevé que la fase de inflación alta dure "más de lo previsto"

"Las presiones inflacionarias deberían disminuir en 2022, aunque la fase actual de inflación durará más de lo previsto originalmente". Así de rotunda se ha mostrado la presidenta del BCE, Christine Lagarde, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, a la vez que destacaba que los precios crecerán aún más en el corto plazo para caer en el largo plazo. En referencia al repunte de los precios, ha destacado que la subida de la inflación se debe a la demanda poscovid y a la subida en el precio de la energía, "que puede reducir el poder adquisitivo en los próximos meses". No obstante, "seguimos viendo que se mueve por debajo del objetivo de medio plazo del 2%".

En referencia a la marcha de la economía, la presidenta del BCE ha destacado que el impulso económico se ha ralentizado, aunque la economía retornará a los niveles prepandemia "antes de fin de año", por lo que este retorno a su plena capacidad "apoyará el crecimiento de los salarios". No obstante, la economía se enfrenta a ciertos retos como "la falta de materiales y mano de obra, que frena la producción en algunos sectores" aunque, a juicio de Lagarde, "los cortes en el suministro y los cuellos de botella se reducirán y convergerá la oferta con la demanda, aunque tardará un poco más de lo previsto".

Todo ello, tras cumplir el Banco Central Europeo con el guion previsto. El organismo anunció su decisión sobre los tipos de interés y, como se esperaba, no han sufrido cambios ya que ha mantenido en el mismo nivel los tipos de interés (0%), el tipo de facilidad de depósito (-0,5%) y el tipo de facilidad marginal de crédito (0,25%). Además, el ritmo de compras de deuda continuará como hasta ahora, a un ritmo mensual de 20.000 millones de euros.

TE PUEDE INTERESAR

Faltan grifos, ventanas, sanitarios... Los retrasos llegan al sector de la construcción

E. Sanz

El BCE ha subrayado, igual que en reuniones anteriores, que mantendrá los tipos en su actual nivel, o más bajo, hasta que la inflación llegue al 2% "mucho antes" del final del horizonte de proyecciones y de forma "duradera" para el resto de la ventana temporal. Recientemente, el Banco de Canadá sorprendió al anunciar el fin de su programa de compras y adelantó al primer semestre de 2022 la subida de sus tipos, que están en el 0,25%.

Christine Lagarde ha seguido con su 'hoja de ruta' ya que anunció que sería en la reunión de diciembre cuando daría a conocer su nueva estrategia en política monetaria, en relación con el posible fin del programa de compra de activos vinculado con la pandemia (PEPP) y que estaba previsto inicialmente para marzo de 2022, como así ha confirmado de nuevo en la rueda de prensa de hoy. Aun así, ha destacado que "en los próximos meses decidiremos si utilizaremos toda la potencia de compras del programa".

TE PUEDE INTERESAR

El BCE mejora la previsión de crecimiento en 2021 y reduce el ritmo de compras de activos

Ó. Giménez C. Raffin

Las miradas estarán puestas, sobre todo, en la rueda de prensa posterior al Consejo y en las cuestiones relacionadas con la inflación y si creen que el repunte de los precios es algo transitorio o, por el contrario, tendrá continuidad.

Otros focos serán "la crisis energética que afronta la región del euro, la posible ralentización de la recuperación económica y de hasta qué punto está el BCE capacitado para afrontar un escenario de alta inflación y bajo crecimiento, escenario que parece el más probable en el corto plazo, aunque no sea seguro que vaya a ser así", según señalan desde Link Securities.

El mercado estará pendiente si el BCE mantiene su discurso poco ortodoxo, pese a las presiones del mercado, "que ya adelanta la expectativa de la primera subida del tipo de depósito a finales de 2022, en un contexto de dudas respecto a cómo de coyuntural es el actual aumento de la inflación", según destacan los analistas de Renta 4.