Los mercados se tiñen de rojo tras las explosiones en Kabul (y a la espera de Powell)

Las acciones estadounidenses caen este jueves. Pese al 'rally' bursátil en el que se veían inmersos el S&P 500 y el Nasdaq 100, este jueves ambos mercados se teñían de rojo tras las dos explosiones producidas en Kabul, cerca del aeropuerto y del hotel Barron, en pleno proceso de una evacuación prevista para el 31 de agosto. A esto hay que añadir que los accionistas esperan ansiosos que el presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos desencripte las declaraciones de junio en las que afirmaba que estaban “pensando” en empezar a reducir estímulos. Un anuncio previsto durante la conferencia de Jackson Hole que comienza este mismo jueves.

En este contexto, el mercado ha dado con un traspié. Concretamente, el índice de referencia de las tecnológicas cae más de un 0,6%, con casi toda la tabla en ‘rojo’, a las cinco de la tarde, y el S&P 500, un 0,55% lastrado por Dollar Tree, Autodesk o la textil GAP.

Desde el mínimo de agosto de 2020, el Nasdaq ha ganado más de un 38% y el S&P 500 le sigue muy de cerca, con un incremento superior al 34%.

Las bolsas europeas tampoco han escapado de este torrente. El Ibex, que el miércoles casi rozaba los 9.000, cerraba la sesión de este jueves cayendo casi un 1%. También las bolsas de Londres (-0,33%), París (-0,14%), Fráncfort (-0,36%) y Milán (-0,58%) registraban caídas esta jornada.

El petróleo WTI cae por debajo de los 68 dólares el barril, reduciendo el repunte de esta semana, y el Brent también baja un 1% hasta los 70,56 dólares. Por otra parte, tanto el oro, como los rendimientos del Tesoro y el dólar, suben.

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El debate sobre si el discurso del presidente de la Fed del viernes proporcionará una guía más clara acerca de los planes de retirada de los estímulos está dividido. Por una parte, por la progresiva recuperación económica del país y la alta inflación y, por la otra, por la amenaza que podría suponer la propagación de la variante delta para este repunte de la actividad.

Según apunta Franck Dixmier, director de Inversiones Global de Renta Fija de Allianz, el anuncio del tapering solo puede ser “condicional” y, además, la situación actual difiere mucho de la del comienzo del verano. “El resurgimiento de la pandemia en Estados Unidos ha vuelto a poner en primer plano la crisis sanitaria y las incertidumbres en torno al coronavirus también pesan sobre la economía”, subraya. Dixmier apunta a los cierres portuarios en China, al incremento del coste del transporte mundial de mercancías, o a la caída de confianza de los hogares estadounidenses.

En el caso de que Powell no insinúe cuándo se producirá esa retirada en su discurso, “todas las miradas estarán puestas en el informe de empleo de agosto”, comentaba Chris Zaccarelli, director de inversiones de Independent Advisor Alliance, a Bloomberg.

"El informe de empleo es extremadamente importante porque la Fed ya ha reconocido que las condiciones para el tapering ya se han cumplido", añadía.