BBVA acompaña el ERE con un recorte de 628 agentes financieros

BBVA ha puesto el foco en trabajar con una menor plantilla gracias a la digitalización. La entidad acordó la semana pasada con los sindicatos su primer expediente de regulación de empleo (ERE), con la salida de 2.935 personas, lo que lleva el número de trabajadores hasta mínimos. Paralelamente, también está recortando su base de agentes financieros.

En 2018, último año de presidencia de Francisco González, era el banco con más agentes financieros. Se trata de trabajadores autónomos que firman un contrato mercantil con una entidad y trabajan de forma exclusiva con esta. En el caso de BBVA, era una vía para tener presencia en localidades o barrios donde no tenía oficina y competir así por defender o elevar su cuota de mercado.

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El banco provee su plataforma y ayuda al agente a desarrollar su actividad, como un modelo de franquicias. También lo tiene Santander para zonas rurales y está incrementándolo Unicaja tras absorber hace tres años Caja España Duero, con importante presencia en Castilla y León. Asimismo, entidades como Bankinter o Andbank usan esta figura para su banca privada, mientras que el banco que tiene más agentes es Mediolanum, con 1.408, basando en ellos su modelo de negocio en España.

Mediolanum superó ya el año pasado a BBVA. El banco modificó su estrategia coincidiendo con el relevo en la presidencia. Con la llegada de Carlos Torres, y con Guadalupe Hernández como responsable de la red de agentes, se redujo el tamaño de la red desde 2.830 a 1.579 en 2019, según los registros del Banco de España. El año pasado, otro directivo del banco, Quim Soler, asumió el mando, pero la tendencia fue la misma, y el número se redujo hasta los 1.227.

Desde ese momento, el banco ha seguido reduciendo la red y, actualmente, cuenta con 599 agentes financieros. La red externa ya es inferior a la de Mediolanum o Banco Santander, con 1.068. El recorte de BBVA en dos años y medio alcanza ya el 79% de la red que tenía en 2018. Un tijeretazo que coincide con la premisa de Torres de reducir la infraestructura del banco para rebajar la ratio de eficiencia (costes sobre ingresos, cuanto más baja mejor).

Plantilla a mínimos

La eficiencia del banco en España se situó en el 45% en marzo, según el último informe trimestral. En ese momento, contaba con una plantilla de 28.777 empleados, que reducirá ahora en un 10,2% con la salida de 2.935 personas. El banco acordó con los sindicatos este ajuste, que supondrá un coste de 960 millones, según ha estimado, divididos en 720 millones por el despido colectivo y 240 millones por el cierre de 480 oficinas de las 2.366 que tenía al terminar el primer trimestre.

La cifra es por primera vez más baja que en 2011, antes de absorber Unnim y Caixa Catalunya tras la crisis del euro y la reestructuración financiera. En aquel año, BBVA tenía una plantilla de 27.274 trabajadores y recursos de clientes de 179.121 millones, entre depósitos y productos de inversión como fondos o planes de pensiones.

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Estos números arrojaban una ratio de 6,33 millones, que se incrementó desde los 5,1 millones de 2008, en el año en que empezó la Gran Crisis Financiera, con 29.070 trabajadores y 147.713 millones. Después de 13 años del 'shock' financiero, con la incorporación de otras entidades como Caixa Catalunya o Unnim, BBVA gestionará 261.042 millones con 25.842 trabajadores, cruzando los datos de la presentación financiera del primer trimestre y el ERE recién aprobado.

De esta forma, BBVA ha elevado sus recursos de clientes en España en un 76% desde la crisis, pero el número de trabajadores desciende en 3.228 o un 11%. La ratio de recursos de clientes se ha duplicado desde los 5,1 millones hasta los 10,1 millones, pasando entre medias por los 6,3 millones de 2011 o los 9,1 millones de marzo de este año. Así, con el ERE, aumenta el volumen de activos que corresponden a cada trabajador en un 11%.