EBN busca levantar 100M en un fondo alternativo para invertir en Silicon Valley

EBN Banco vuelve a lanzarse a la captación de grandes patrimonios para un fondo alternativo con el que amplía su oferta. La entidad, que ha tenido un acuerdo para la colocación con AyG para las dos versiones previas, ha puesto en el mercado el fondo EBN Pre-IPO US III FCR, que es la tercera versión del vehículo con formato de capital riesgo.

La gestora de EBN, EBN Capital, ahonda así en su oferta alternativa. La firma comandada por Ricardo Paz, expresidente y consejero delegado de Bank of America Merrill Lynch para España y Portugal, y que ahora es socio y responsable de la gestión de EBN Capital, ha iniciado la comercialización de la nueva versión del vehículo orientado a comprar participaciones de empresas tecnológicas estadounidenses en Silicon Valley antes de que salgan a bolsa.

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Ó. G.

La entidad tiene el objetivo de levantar 100 millones de euros para este fondo, que tiene formato de capital riesgo por contar con mayor eficiencia fiscal para estas inversiones, y está asesorada por Ignacio Vilela. También cuenta con un acuerdo de distribución con AyG para que los banqueros de la firma de banca privada lo ofrezcan a sus clientes.

Desde EBN, explican que la entidad ha tenido demanda en sacar al mercado una nueva edición de este fondo tras los resultados obtenidos. La primera versión tuvo una tasa interna de retorno (TIR) del 21,3% anual. La segunda versión aún no se ha liquidado, y cuenta con 40 millones de euros en compromisos de inversión con el objetivo de invertir entre 20 y 25 empresas, entre las que ha habido nombres propios como Coinbase, Stripe, Airbnb o Zscaler. Es decir, empresas de crecimiento, con grandes flujos de caja, y especialistas en tecnologías como medios de pago o ciberseguridad.

La gestora de EBN ha apostado con Ricardo Paz por tener una oferta reducida de fondos alternativos, como en el sector inmobiliario de Nueva York o, en este caso, en participaciones de empresas tecnológicas. La idea es dar acceso a estas empresas antes de que salgan a bolsa, momento en el que es difícil su acceso para el público general.

La inversión mínima es de 150.000 euros, y está disponible para inversores institucionales o profesionales. El sistema de comisiones es del 2,5% para inversiones de hasta tres millones y del 2% cuando la inversión supera este nivel, a lo que se suma un 20% de éxito a partir del 8% de rentabilidad anual acumulada al final de la vida del fondo.

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Desde la gestora, recuerdan que el periodo medio para salir a bolsa ha subido en las dos últimas décadas hasta alcanzar los 10 años, lo que supone más oportunidades para el capital riesgo y que para el público general se tarde más en tener la posibilidad de invertir a través de acciones cotizadas.

De hecho, según datos que maneja EBN Capital, en 2020 hubo 31 ampliaciones de capital privadas que superaron cada una de ellas los 500 millones. Esta cifra muestra el apetito de la inversión alternativa por las tecnológicas, principalmente, y también que hay oportunidades para invertir antes de la salida a bolsa. Para desinvertir, los gestores de EBN lo hacen en mercado secundario privado, cuando hay oferta pública de adquisición (opa) o con la propia salida a bolsa.