¿Perfil conservador? Estos son los bancos que (todavía) dan más por el ahorro en depósitos

El ahorro para los perfiles más conservadores sigue estando fuertemente penalizado. Si hace años depositar el dinero en la cuenta corriente o en un depósito permitía obtener una rentabilidad que incluso competía con otros productos de inversión, la realidad ahora es muy distinta.

El escenario de bajos tipos de interés que mantiene el Banco Central Europeo (BCE) para estimular las economías está teniendo un impacto negativo en el bolsillo de los ahorradores más conservadores. Primero, porque las rentabilidades de estos productos de ahorro se sitúan en cero o cada vez más cerca y, segundo, porque los bancos tratan de compensar este contexto con subida de comisiones y aumento de requisitos sobre sus clientes, lo que los deja con muy pocas opciones para rentabilizar su ahorro o, al menos, capear la futura inflación.

Las penalizaciones por mantener el ahorro en el banco

Encontrar en un contexto como el actual alternativas para no pagar por el ahorro no es tarea fácil. De hecho, en los últimos meses varias entidades han anunciado su intención de cobrar a sus clientes por el ahorro depositado en sus cuentas bancarias. En concreto, desde este mes de febrero BBVA es el primer banco en cobrar una comisión a sus clientes del 0,025% mensual o del 0,3% anual. En este caso, la comisión se aplicará solo a aquellos clientes con unos ahorros superiores a los 100.000 euros en la cuenta que no tengan ningún tipo de vinculación con la entidad.

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Del mismo modo, el próximo 1 de abril, ING también cobrará a sus clientes una comisión de 10 euros mensuales, es decir, 120 euros al año, para aquellos clientes con saldos superiores a los 30.000 euros que no hayan domiciliado una nómina en el banco.

No obstante, en el extremo opuesto, siguen existiendo pequeñas entidades, algo menos conocidas, que buscan darse a conocer y competir con los grandes jugadores del sector ofreciendo pequeñas rentabilidades a sus clientes por depositar su ahorro en ellas. Y, aunque el interés de estos productos no es elevado, en muchos casos puede ser útil para aquellos ahorradores que tratan de no perder poder adquisitivo en el futuro.

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La oferta en Europa

Si bien es cierto que en la actualidad los ahorradores conservadores todavía pueden encontrar algún producto interesante para su bolsillo, la realidad es que estos no están en España. Para ello, los ahorradores han de salir al mercado europeo, en el que se ofrecen rentabilidades por encima del 1%.

Ese es el caso de la checa J&T Banka, que ofrece un depósito a tres años con un interés del 1,28% y con una inversión mínima de 10.000 euros. También al mismo plazo existen otras alternativas como la de la italiana Banca Progetto, que abona un interés del 1,2% a los clientes que depositen en la entidad un mínimo también de 10.000 euros.

Si lo que se busca es depositar una cantidad menor, otras entidades como la eslovaca Privatbanka ofrecen un interés del 1,14% a tres años, con un mínimo de inversión de 5.000 euros.

¿Y si lo que se quiere es ampliar el plazo del ahorro? En este caso, entidades como la italiana Banca Sistema ofrecen rentabilidades del 1,12% para un depósito a cinco años o del 1,32% a diez años, con una inversión mínima de 5.000 euros.

¿Quedan alternativas dentro de España?

Aunque en España todavía queda alguna opción, lo cierto es que las rentabilidades, en la mayoría de casos, apenas llegan al 1%. Una de las alternativas es la de Renault Bank, que aterrizó recientemente en España, y que ofrece un depósito a dos años con una remuneración del 1% y con un mínimo de inversión de 500 euros.

Además de esta, otra de las ofertas es la que ofrece Wizink, que abona un 0,8% TAE para su depósito a tres años, al igual que Banco Pichincha, que también ofrece un 0,8% TAE para su depósito, en este caso, a un año y sin importe mínimo de inversión. No obstante, si se pretende invertir un volumen de dinero mayor, el depósito de Banco Finantia Spain ofrece a cinco años una TAE del 0,9%, aunque el mínimo para este producto se fija en los 50.000 euros.