Trump resucita a Kodak: sube un 1.500% en solo cuatro días y ya vale 1.600 millones

Donald Trump ha resucitado a Kodak. Lo cierto es que no cabe decirlo de otra manera. La compañía, que llevaba años penando, ha vuelto a la vida gracias al préstamo de 765 millones que le ha concedido el Gobierno para que se ponga a fabricar medicamentos.

Kodak tendrá que pivotar su actividad desde el mundo de la fotografía hasta el farmacológico, pero no va a ser una transición desde cero. La firma con sede en Rochester, a unos kilómetros de las Cataratas del Niágara, ya hacía procesos químicos propios de su sector, por lo que tiene algo de experiencia.

En cualquier caso, nada que justifique los fuertes avances que ha vivido el valor en bolsa en apenas 72 horas. Los títulos de Kodak empezaban la semana instalados en los 2,62 dólares y para cuando comenzó la sesión de este jueves ya se cambiaban por algo más de 42 dólares. En total, un 1.500% de avance con el mercado totalmente loco que ha llevado a que la cotización se suspendiera en varias ocasiones debido a la tremenda volatilidad.

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El apetito del mercado empezó horas antes de que Trump anunciara la concesión del préstamo. Ya el lunes el volumen de negociación alcanzo los 1,6 millones de títulos. El viernes, solo una jornada bursátil antes, se negociaron apenas 74.890 acciones. Desde ese momento, claro, la situación se ha descontrolado. El martes cambiaron de manos 285 millones de acciones de la compañía, mientras que el miércoles el volumen se fue hasta los 276 millones. Es una cantidad ingente teniendo en cuenta que Kodak tiene emitidas apenas 44 millones de acciones.

Esa voracidad de los inversores ha empujado el valor de la compañía. El martes el repunte fue del 204%, mientras que 24 horas después había que sumarle otro repunte del 318%. En el periodo 'premarket' de este jueves los títulos avanzaban más de un 26% y rebasaban la barrera de los 42 dólares. Con estas ganancias ya capitaliza 1.650 millones de dólares, tras arrancar la semana con un valor de apenas 115 millones.

Esas grandes subidas le van a regalar una buena alegría a altos directivos de la compañía. El presidente ejecutivo, James Continenza, compró 47.000 acciones en junio, mientras que Philippe Katz, que tiene un asiento en la junta, se hizo con 10.000 títulos en dos operaciones distintas en ese mismo mes.

A cierre del pasado mes esas 47.000 participaciones en el capital le costaron a Continenza casi 105.000 dólares, a razón de 2,23 dólares la unidad. Hoy las podría vender por 1,88 millones de dólares, solo un mes después de la adquisición. Según ha explicado en una entrevista en CNBC, el directivo encuadra estas compras dentro de "las inversiones regulares que están de acuerdo con nuestras líneas de inversión".

Kodak va a aprovechar la Ley de Producción de Defensa para hacer este cambio en su actividad. Esa normativa, que se remonta a la Guerra Fría y que se activó de nuevo en marzo por culpa de la pandemia, confiere al Gobierno poderes similares a los que tendría en una situación bélica en cuanto a la producción de suministros.

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Trump, en su declaración, aseguraba que el acuerdo con Kodak es "uno de los más importantes en la historia de la industria farmacéutica de Estados Unidos". Del mismo modo, la compañía ha explicado que usará "técnicas de manufactura avanzadas" y que hará "los materiales de partida clave, que son los componentes básicos de muchos medicamentos, de una manera que sea a la vez competitiva en cuanto a costes e inocua para el medio ambiente".

La decisión ha despertado críticas.Los analistas de SVB Leerink, un banco de inversión especializado en el sector de la salud y que tiene su sede en Boston, están "confundidos por la decisión del Gobierno. En particular nos descoloca que empresas del sector farmacéutico, que tienen los recursos y la experiencia, no hayan recibido un acuerdo así".

Continenza explicaba que "una de nuestras grandes habilidades ha sido siempre la química. Sabíamos que podíamos hacer más y ahora el Gobierno también se ha dado cuenta de que así es".