Goldman suma posiciones en ACS en pleno intento de reflote bursátil de Florentino

Goldman Sachs vuelve a la carga. Tras superar el 3% de inversión en ACS a finales del mes pasado, la gestora estadounidense había reducido su posición a principios de julio hasta un 2,77%. Una posición que ahora ha casi multiplicado por tres al incrementarla hasta un 6,77% el 3 de julio, según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) publicados este miércoles.

Los movimientos se dan en un momento en el que la acción de ACS tiene varios frentes abiertos entre el apoyo de la empresa y el ataque bajista. Por un lado, se encuentra sumida en un plan de recompra de acciones que la empresa presidida por Florentino Pérez amplió a finales de mayo hasta alcanzar un objetivo del 6,9% del capital. Actualmente, la autocartera de la empresa está en máximos históricos en un 8,46%, según los registros de la CNMV a cierre de este miércoles.

La empresa cae un 29% en el año, golpeada por el confinamiento mundial producido por la pandemia del coronavirus y la consiguiente crisis económica. Es la segunda empresa tras MásMóvil que más sube tras los mínimos del Ibex 35 el 16 de marzo (un 70%) pero eso tras ser de las que más cayó con el desplome que duró entre el 24 de febrero al 16 de marzo (un 51%, solo por detrás de las turísticas Meliá e IAG).

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Agencias

En su última emisión de deuda a principios de junio, ACS especificó que gozaba de una posición de liquidez de 12.000 millones de euros. La empresa es una de las pocas que ha mantenido el dividendo, destinando un importe total de 630 millones de euros a la retribución al accionista. También es una de las compañías del Ibex 35 con más recomendaciones de compra por parte del consenso de analistas.

No obstante, tiene una deuda que aumentó en un 164% hasta superar los 2.370 millones en el primer trimestre, en 0,79 veces su resultado bruto de explotación (Ebitda). Como ya publicó El Confidencial, el endeudamiento, así como la quema de la caja, preocupa a Pérez hasta el punto de sopesar acometer desinversiones. En este contexto, y en un entorno de mercado que continúa siendo incierto, los bajistas afilan cuchillos. Las posiciones cortas se han estado disparando en las últimas semanas hasta suponer un 1,74% solo entre los ‘hedge’ AKO y Marshall Wace (la CNMV solo publica las posiciones cortas individuales relevantes). A modo de comparación, cuando empezó la desescalada a los cortos en mayo, el dato de los bajistas individuales en ACS era del 0,54% del capital.

De hecho, Goldman Sachs, así como otras grandes firmas como BlackRock o Norges Bank, son viejas conocidas de valores atrapados en un mercado bajista – como ya se vio en el caso de DIA en su descalabro de 2018 o en el de la banca durante esta misma crisis. Los bajistas toman prestadas acciones de inversores posicionados en largo para así venderlas y luego comprarlas para devolverlas, ganando dinero si la acción cae (con una comisión para el prestamista). En momentos de volatilidad y apetito bajista, estos grandes nombres mueven de forma errática sus posiciones en largo, apuntando a su rol como proveedores de munición a los cortos. El regulador financiero solo revela las posiciones en largo y corto de cada uno, sin especificar vínculos entre los partícipes.

BlackRock y Société Générale (intermediario por otro lado de la última ampliación del programa de recompra de acciones, después que la primera tanda la proporcionase el bróker de confianza de Florentino, GPM) cuentan con un 4,95% y 5,33% en ACS, respectivamente. La posición de Goldman Sachs está dividida entre un 5% en derechos de voto y un 1,7% en instrumentos financieros. Los registros de inversión de la CNMV no son automáticos, por lo que Goldman podría haber efectuado más movimientos en los últimos días que la CNMV podría publicar en las próximas sesiones.