DIA baila la Yenka en bolsa entre especulaciones sobre un caballero blanco

DIA lleva subida en una montaña rusa desde que el pasado 5 de febrero el fondo controlado por el magnate ruso Mikhail Fridman lanzó una opa por el 71% que no controla. Ese día las acciones de la compañía se dispararon un 63% pero superaron de largo el precio de 0,67 euros puesto sobre la mesa por LetterOne. Un rally que continuó al día siguiente manteniéndose cómodamente por encima de los 0,70 euros.

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Y es que el mercado está especulando con la posibilidad de que LetterOne tenga que subir el precio si quiere conseguir que al menos un 70% del capital que no controla, la mayoría en manos de minoritarios -salvo el 5,9% que tiene Goldman Sachs- acuda a la opa, o que aparezca un caballero blanco que vendría de la mano del Consejo de Administración que está dispuesto a plantar batalla al fondo con sede en Luxemburgo.

Así, el valor baila al ritmo de la lluvia de noticias que van apareciendo entorno a lo que se está convirtiendo en el culebrón empresarial del trimestre... incluso de la recta final de 2018. Tras tres días de fuertes correcciones, que han devuelto el precio de las acciones a los niveles en los que se encontraban antes de la declaración de intenciones de LetterOne -0.63 euros- este jueves han retomado las subidas.

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Sin embargo, pese a dispararse un 4% a primeras horas de la mañana, al final DIA ha cerrado con un aumento del 1,6%, por debajo del precio de opa en los 65 céntimos. El nuevo capítulo en el serial de la cadena de supermercados pasa por unas informaciones publicadas por Expansión que pone nombre a los posibles candidatos a lanzar una contraoferta. Se trata de Carrefour, Lidl y Sonae, que analizan la posibilidad entrar en la puja por todo o parte del negocio de la compañía.

Lo cierto es que detrás de Carrefour se encuentra precisamente Gregoire Bontoux Halley que ha aflorado un 3,24% en DIA tras sindicarse con otros dos pequeños inversores. Precisamente, somo esa sindicatura, fuentes cercanas aseguraron a Cotizalia que no tenían intención de acudir a una opa a esos precios y que estaban estudiando la posibilidad de encontrar un comprador o hacer una oferta, al mismo tiempo que insistían en que Fridman es inversor mayoritario y lo seguiría siendo con el 29% si se quedaran ellos la compañía, por lo que no quieren un enfrentamiento directo con él.

En este sentido, Ana Gómez, analista de Renta 4, defiende que la puja de competidores puede tener sentido estratégico, en tanto que les puede permitir ganar cuota de mercado y reducir la brecha con el supermercado líder que es Mercadona. Sin embargo, "comprar una participación de DIA puede ser más complicado porque eso significaría tener al mayor accionista, LetterOne, de socio", añade la experta.