Los bajistas esperan más caídas del Ibex en 2019 tras elevar su ataque un 10% en el año

El ejercicio bursátil, a falta de media sesión, está siendo muy positivo para la comunidad bajista. La mayoría de activos está en negativo, y la bolsa española no es una excepción. El índice general retrocede un 16% en 2018, pero lejos de recoger beneficios, los ‘hedge funds’ afilan sus cuchillos a la espera de más caídas.

Las posiciones cortas superiores al 0,2%, que son las que en Europa se comunican a los supervisores, alcanzan en la bolsa española 4.672 millones de euros, una cifra inferior a los 5.060 millones de principios de año. No obstante, si se ajusta por la evolución bursátil, la presión bajista ha aumentado un 10%, ya que el ataque bajista sube del 0,586% hasta el 0,644% del total de capitalización de la bolsa española, que se sitúa en 725.000 millones -frente a los 863.000 millones de hace un año-.

Los ‘hedge funds’ están obligados en Europa a notificar a los supervisores las posiciones de más del 0,2% del capital. No obstante, solo se dan a conocer los movimientos individuales de al menos el 0,5%. Hasta ahora la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha publicado las sumas contra las empresas cada dos semanas, algo que dejará de hacer en 2019 para seguir los mismos criterios que el resto de Europa. Así, el pasado miércoles publicó por última vez los ataques bajistas contra las empresas españolas.

Estas cifras muestran que los ‘hedge funds’ esperan más caídas en el parqué para 2019, pese a que el índice general de la Bolsa de Madrid (IGBM) se deja un 16%, igual que el Ibex 35, que está por valoración más barato que nunca desde 2013. El peso de la banca en el selectivo, la incertidumbre política en varias economías europeas, el miedo a una guerra comercial o el riesgo de una recesión en Estados Unidos están detrás del castigo.

Los bajistas son inversores que apuestan por las caídas de un activo, ya sea por convicción aislada sobre los problemas de una empresa o porque son coberturas respecto a otras estrategias alcistas, lo que se conoce como ‘long-short’, estilo que originó los ‘hedge funds’ tras la Segunda Guerra Mundial.

Para ello, el método tradicional es tomar prestadas acciones y venderlas cuando las reciben, mientras que las compran a mercado cuando van a devolverlas, con lo que obtienen ganancias -reducidas por las comisiones que pagan- si por el camino han perdido valor. Fondos internacionales como Goldman Sachs, que ha venido haciéndolo en el desplome de DIA el último año, Norges o Morgan Stanley prestan parte de las acciones que tienen a cambio de comisiones, una práctica que no tienen permitida los fondos españoles. También hay derivados que permiten estas apuestas.

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En las últimas estadísticas agregadas que publica la CNMV, DIA está a la cabeza del 'ranking', como viene ocurriendo en los últimos dos años, con un 15,55% del capital en manos de los bajistas. No obstante, con el descenso de la cadena de supermercados, que cotiza con un valor de 220 millones, esta apuesta supone un ataque de 35 millones.

En segundo lugar está la constructora OHL, con un 8,82% del capital, que equivale a 18 millones. Asimismo, por encima del 7% se sitúan Neinor Homes y Cellnex, cuyos volúmenes bajistas suponen 75 millones y 380 millones respectivamente. Mientras que Técnicas Reunidas, que inició el año con un ataque bajista del 13,7%, sufre cortos que alcanzan el 6,29%, equivalente a 75 millones. El siguiente del 'ranking' es Enagás, con un 5,01%, que supone 290 millones.

Bankia es el banco más presionado, con un 4,65% de cortos y un nuevo ‘hedge fund’ en la lista, Samlyn Capital. El ataque contra la entidad parcialmente nacionalizada alcanza los 360 millones de euros, cifra similar a las presiones que sufren la ya citada Cellnex y Amadeus, aunque en este caso con un 1,41% del capital en manos de los bajistas.

Cellnex, Amadeus y Bankia son las cotizadas que soportan un mayor ataque bajista en términos absolutos tras Inditex. El gigante textil cotiza con 70.000 millones de euros de valor bursátil, y sobre el mismo hay posiciones cortas del 0,94% del capital. Por su parte, contra Enagás, Atresmedia, Red Eléctrica, Siemens Gamesa y BBVA hay inversiones bajistas de más de 200 millones, mientras que en Ferrovial, Acciona y Banco Santander sobrepasan los 100 millones, cifra que rozan los cortos en Banco Sabadell, Grifols e Iberdrola.