La prima italiana sube a 304 pb mientras su Gobierno pide una tregua a las agencias
Los inversores han activado el modo 'risk-off' permitiendo al bono a diez años escalar por encima del 3,5%, su nivel más alto desde principios de 2014
La hemorragia italiana parece estar lejos de ser controlada. Los inversores están con los nervios a flor de piel a medida que sigue el cruce de palabras, más o menos duras, entre el Gobierno antieuropeista de Giuseppe Conte y Bruselas. Este fin de semana el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, aseguraba que "está en manos de los responsables políticos italianos encontrar las normas y medidas que permitirán a Italia permanecer dentro de los objetivos presupuestarios acordados", el italiano pedía a las agencias de rating, que tienen que revisar sus calificaciones este mes, no tengan "prejuicios".
La tensión se está notando en el mercado de deuda, donde los inversores han activado el modo 'risk-off' permitiendo al bono a diez años escalar por encima del 3,5%, su nivel más alto desde principios de 2014, antes de que el Banco Central Europeo pusiera en marcha el programa de compra de deuda que ha permitido el respiro del secundario después de que Europa se situara al borde del abismo en julio de 2012.
Así, la prima de riesgo italiana se sitúa por encima de la barrera psicológica de los 300 puntos básicos, que ya tocó la semana pasada después de que el nuevo Gobierno apoyado por el partido antisistema Movimiento 5 Estrellas y el ultraderechista la Liga aprobaran una subida del déficit hasta el 2,4% del PIB, lo que se ha interpretado como una auténtica declaración de guerra a Bruselas.
Ni siquiera ha calmado el pasito atrás que dio el país transalpino diciendo que, si bien es cierto que se espera una subida del déficit al 2,4% el próximo año, también esperan que se reduzca al 2,2% en 2020 y al 2% en 2021 asegurando que pretenden "acelerar la disminución de la ratio deuda/PIB de forma consistente durante un periodo de tres años", sin dar más cifras.
Una tensión que se está trasladando, aunque de manera contenida, al resto de mercados periféricos. Así, la prima de riesgo española se sitúa en los 106 puntos básicos, con el interés del bono a diez años en el 1,6%, con lo que se produce la mayor descorrelación entre los diferenciales de los dos países desde la entrada del euro. Eso mientras que Alemania continúa beneficiándose de su condición de refugio, con la rentabilidad ofrecida por el bund en el 0,53%, tras descender otro 7% este lunes.
También la renta variable está acusando el miedo a la inestabilidad italiana. El MIB era de largo el índice que más caía en una jornada roja para las principales plazas del Viejo continente, abajo más de un 2%. Por su parte, el Ibex 35 se movía con suaves correcciones que rondan el medio punto porcentual, en la misma línea del Cac 40 parisino y el Dax de Fráncfurt,
La hemorragia italiana parece estar lejos de ser controlada. Los inversores están con los nervios a flor de piel a medida que sigue el cruce de palabras, más o menos duras, entre el Gobierno antieuropeista de Giuseppe Conte y Bruselas. Este fin de semana el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, aseguraba que "está en manos de los responsables políticos italianos encontrar las normas y medidas que permitirán a Italia permanecer dentro de los objetivos presupuestarios acordados", el italiano pedía a las agencias de rating, que tienen que revisar sus calificaciones este mes, no tengan "prejuicios".