Caixa, Bankia y BBVA pujan por ser los bancos más beneficiados del alza de tipos
La normalización del 'precio del dinero' mejorará el rendimiento de la cartera hipotecaria, pero reducirá el valor de la cartera de renta fija. El efecto neto será positivo para el sector
Los bancos centrales toman esta semana la palabra. Los cambios políticos de Italia y España, las divisas emergentes e incluso el riesgo proteccionista asociado a Donald Trump quedan en un segundo plano para el mercado. Y especialmente para la banca, que necesita una normalización de los tipos de interés para volver a ser rentable. Bankia y Liberbank son los dos bancos con mayor peso de hipotecas en su cartera de crédito, aunque también hay que contar con el efecto negativo de unos tipos subiendo en los bonos que tienen en balance, por lo que CaixaBank y BBVA también son candidatos a ser los más beneficiados de un cambio en la política monetaria.
El último informe anual del Banco de España dejó en evidencia al sector. La actividad bancaria española exhibió un ROE, medida de referencia de rentabilidad sobre el capital, del 5%. Es decir, apenas la mitad del coste del capital, que es la rentabilidad exigida por los inversores, que está por encima del 10%, según el organismo que ahora dirige Pablo Hernández de Cos. Este diferencial se traslada a la bolsa, donde la mayoría de bancos cotizan por debajo del valor en libros.
Los tipos de interés castigan a los bancos españoles, después de haber dejado atrás las dudas sobre su solvencia del peor momento de la crisis. Su principal actividad consiste en captar dinero y prestarlo, especialmente en forma de hipotecas. Cuando el ‘precio del dinero’ es bajo, se reduce este margen de intermediación, lo que lastra la cuenta de resultados de la banca.
“Nos gustan los tipos de interés bajos, pero no los negativos”, insiste una y otra vez José Sevilla, consejero delegado de Bankia. Francisco González, presidente de BBVA, fue más allá en 2015: “Los tipos negativos nos están matando”. Mientras que desde las autoridades se pide más eficiencia, como hizo Mario Draghi en su visita a Madrid el año pasado.
Toda la banca se verá beneficiada de la futura normalización de tipos (los de referencia están en el 0% y los de facilidad de depósito, en el -0,4%), que el mercado espera para la segunda mitad de 2019 en Europa, mientras que en Estados Unidos la Reserva Federal (Fed) va mucho más adelantada. No obstante, la reunión de este jueves del Banco Central Europeo (BCE) se antoja clave para estas expectativas, ya que los analistas esperan que haya más información sobre el fin de las compras de activos. “La atención se centrará en el discurso de Draghi y el posible anuncio de una retirada del programa de compra de activos a finales de ejercicio”, anticipan los analistas de Bankinter. Será el primer encuentro de Luis de Guindos como vicepresidente escoltando a Draghi.
La atención se centrará en el discurso de Draghi y el posible anuncio de una retirada del programa de compra de activos a finales de ejercicio
Liberbank y Bankia son las dos entidades en las que más pesan las hipotecas, que principalmente son a tipo variable, en la cartera crediticia, según cálculos de Société Générale. Por ello, en primera instancia, son los dos bancos en que más aumentarán los ingresos facturados de los préstamos hipotecarios, por delante de CaixaBank y del negocio español de BBVA.
Impacto en la cartera de renta fija
Las subidas de tipos que añora la banca tienen su parte negativa, que es una caída de la valoración agregada de la cartera de renta fija (ALCO, en la jerga) por la relación inversa entre precio y tipos de interés de los bonos. Precisamente, los movimientos bruscos de los bonos españoles e italianos hicieron tambalearse a la banca a finales de mayo y arrojaron una conclusión clara, de la que ya avisó Ignacio de la Torre, economista jefe de Arcano, en 2016: una subida demasiado rápida de los tipos golpearía la confianza del mercado sobre los balances de la banca.
Pero esta hipótesis no es ni mucho menos la más probable entre los esquemas de expectativas de inversores, analistas y economistas. “Que se vuelva a la hoja de ruta [de normalización de tipos] es bueno para los márgenes de los bancos y una recuperación más sostenida del euríbor para que la parte alta de la cuenta de resultados vuelva a la normalidad”, arguye Natalia Aguirre, analista de Renta 4.
Dado que las bolsas tratan de anticiparse, es de esperar un impacto en la cotización de la banca si hay un cambio en las expectativas sobre los tipos de interés, muy dependientes de la evolución de la inflación subyacente (sin energía ni alimentos no perecederos) y de lo que espere sobre ella el BCE. El efecto neto en una normalización sostenida, por lo tanto, será positivo por el incremento mayor de los ingresos por la cartera crediticia que la merma en la cartera ALCO.
Este efecto neto será mayor en CaixaBank, Bankinter y BBVA España entre 2017 y 2020, según las estimaciones de Société Générale, que anticipa que el euríbor se irá desde los niveles negativos actuales (-0,19% en mayo) hasta el 1% en 2020. Para ese momento, Société proyecta un ‘spread’ entre los tipos de la cartera crediticia y la ALCO de alrededor del 1,9% en la banca española. A la cabeza están Banco Sabadell y CaixaBank, mientras que a la cola se sitúan Bankia y Liberbank.
Otros cálculos
No obstante, la predicción de los ingresos de la cartera de renta fija es más complicada que con la de crédito, ya que además depende de las operaciones financieras que realicen los propios bancos. Bankia, por ejemplo, es señalada por los bancos de inversión como la entidad de tamaño mediano o grande más expuesta a los tipos. Desde la entidad parcialmente nacionalizada, calculan una ganancia extra de 250 millones de beneficio bruto con 50 puntos básicos más en el ‘precio del dinero’, así como un incremento del ROE de dos puntos porcentuales (8% en el último trimestre).
Liberbank y Unicaja, fuera del Ibex 35, son los dos bancos cotizados que más se beneficiarán de futuras subidas de tipos, según Goldman Sachs. El banco de inversión norteamericano tiene cálculos diferentes a los de Société Générale. En este sentido, destacan las entidades que aún no han dado el salto al parqué, como Abanca, Kutxabank e Ibercaja.
Los bancos centrales toman esta semana la palabra. Los cambios políticos de Italia y España, las divisas emergentes e incluso el riesgo proteccionista asociado a Donald Trump quedan en un segundo plano para el mercado. Y especialmente para la banca, que necesita una normalización de los tipos de interés para volver a ser rentable. Bankia y Liberbank son los dos bancos con mayor peso de hipotecas en su cartera de crédito, aunque también hay que contar con el efecto negativo de unos tipos subiendo en los bonos que tienen en balance, por lo que CaixaBank y BBVA también son candidatos a ser los más beneficiados de un cambio en la política monetaria.