La prima entre la deuda italiana y la española, en máximos desde 2012
Este lunes la prima de riesgo exigida por los inversores a los bonos transalpinos con vencimiento a diez años, en relación con sus homólogos españoles se ampliaba
La incertidumbre sobre el futuro de Italia, la tercera economía de la Unión Europea, sigue pasando factura al mercado. Así, este lunes la prima de riesgo exigida por los inversores a los bonos transalpinos con vencimiento a diez años, en relación con sus homólogos españoles se ampliaba hasta más de 85 puntos básicos. Se trata de su mayor diferencia a favor de España desde 2012.
Y es que la presión que está soportando la deuda italiana es mucha, en tanto que tras el acuerdo alcanzado para la formación de un Gobierno de coalición entre Movimiento 5 Estrellas (M5S) y Liga, crece el temor a que se instauren políticas populistas en el país que ponga incluso en peligro su permanencia en el euro. Así, todas las miradas están puestas este lunes en el nombre del primer ministro, que se podría conocer a lo largo de la jornada.
En concreto, la rentabilidad del bono italiano a diez años en los mercados secundarios alcanza el 2,4%, frente al 2,217% del pasado viernes, su mayor coste desde julio de 2017, lo que supone un encarecimiento de 40 puntos básicos en lo que va de año. En el caso de la deuda española con vencimiento a diez años, el interés se sitúa en el 1,5%, con una diferencia respecto al bono alemán equivalente de 98 puntos básicos. La primera de riesgo italiana se ha disparado, por su parte, un 15% hasta los 189,5 puntos.
Por su parte, el selectivo FtseMib de la Bolsa de Milán ha registrado un descenso del 1,52% al cierre lastrado por caídas de más del 5% en los bancos, mientras que el Ibex 35 ha cedido un 0,45%.
La incertidumbre sobre el futuro de Italia, la tercera economía de la Unión Europea, sigue pasando factura al mercado. Así, este lunes la prima de riesgo exigida por los inversores a los bonos transalpinos con vencimiento a diez años, en relación con sus homólogos españoles se ampliaba hasta más de 85 puntos básicos. Se trata de su mayor diferencia a favor de España desde 2012.