Ferrovial cae más del 3% tras anunciar un roto de 236M por contrato un fallido en UK

Golpe a la cuentas de Ferrovial. La compañía presidida por Rafael del Pino ha tenido que reconocer unas provisiones adicionales de 208 millones de libras (236 millones de euros) por las discrepancias que desde hace tres años mantiene con el Ayuntamiento de Birminghan (Reino Unido) en relación al macrocontrato de mantenimiento de carreteras adjudicado a su filial Amey en 2009, y valorado en 3.000 millones de euros.

Las acciones comenzaban con fuertes caídas la sesión de este viernes, y el valor se convertía en el farolillo rojo de la sesión al caer más de un 3% hasta los 17,38 euros.

Según comunicó la propia compañía ante la CNMV -Comisión Nacional del Mercado de Valores-, esta provisión, que se recogerá en sus cuentas correspondientes al primer trimestre de este año, responde a "la necesidad de reconocer inversiones adicionales durante la fase inicial del contrato, así como la previsión de que el Ayuntamiento de Birmingham aplicará elevadas deducciones y penalizaciones".

La noticia es un jarro de agua fría para el grupo de infraestructuras, que este viernes prevé mantener una multiconferencia para explicar al mercado el alcance y las consecuencias de esta noticia, aunque por el momento ya ha adelantado que Amey tiene previsto realizar desinversiones parciales en varios proyectos.

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El origen de esta provisión se encuentra en el fallo del Tribunal de Apelación de Reino Unido, que el pasado 22 de febrero se pronunció en favor del consistorio británico, anulando la sentencia que el High Court había dictado a favor de Amey en septiembre de 2016. Ahora, no obstante, la compañía española estudia recurrir la sentencia ante el Tribunal Supremo.

A pesar de este fallo, Ferrovial confiaba en que las negociaciones que mantenía con Birmingham permitirían que "las penalidades y deducciones extraordinariamente elevadas aplicadas en los dos primeros meses de 2018 se reducirían a un nivel más razonable en línea con años anteriores", algo que el ayuntamiento británico no está dispuesto a aceptar, obligando así a Ferrovial a realizar una provisión por la cantidad que, estima, impactará esta postura en sus cuentas.

En el ejercicio 2017, tras dos largos años de disputas y enfrentamientos judiciales, Amey presentó una provisión por valor de 74,4 millones de libras, además de que registró unas pérdidas de 10 millones de euros derivadas de este contrato.

El contrato de mantenimiento de Birmingham, que en su momento fue el mayor de este tipo firmado hasta la fecha por una ciudad del Reino Unido, abarca los trabajos de mantenimiento de 2.500 kilómetros de carreteras, 5.000 kilómetros de aceras y cerca de 850 puentes y otras estructuras.