Bonos de alto riesgo o acciones: ¿cómo es más rentable invertir en Tesla?

Tesla necesita un chispazo en su carrera hacia el éxito. El lanzamiento de su eléctrico más asequible, el Model 3, le va a suponer un esfuerzo financiero millonario para poder servir los 400.000 pedidos que ya ha recibido. Para ello, prepara una emisión de bonos por importe de 1.500 millones de dólares. Desde el punto de vista del inversor, ¿que opción es la más ventajosa para aprovechar el tirón de la firma automovilística estadounidense?

Desde GVC Gaesco Gestión, el gestor Albert Enguix apunta a la confianza que cada uno tenga en la compañía. "Si una persona valora, firmemente, que esta empresa controlará el mercado de coches eléctricos y que le reportará grandes beneficios, mi recomendación es que compre los bonos emitidos. Como según Tesla tendrán un carácter convertible, el inversor aprovechará la revalorización de los bonos y, después, la de las acciones".

En concreto, la compañía ha lanzado estos bonos basura ('high-yield) con un posible carácter convertible y con vencimiento a 2025 para asegurarse la liquidez necesaria y poder cumplir con los planes de producción de su 'low cost'. Pese a estas expectativas, la agencia de calificación Standar & Poor's le ha dado una nota de B- y ha mantenido su perspectiva negativa sobre Tesla, también B-.

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Ninguna de estas recomendaciones negativas ha frenado su cotización, que se encuentra en los 364 dólares por acción. En este sentido, los títulos de Tesla están viviendo un año de bonanza, ya que se revalorizan un 70% en lo que va de ejercicio.

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Sin embargo, el consenso del mercado está dubitativo con las expectativas sobre la compañía, que presentó unas pérdidas netas atribuidas de 564 millones en sus resultados semestrales. Solo el 32% de los analistas recomiendan "comprar", mientras que el 44% y el 24% mantienen su valoración en "mantener" y "vender", respectivamente. En este sentido, creen que el precio actual de la acción de Tesla está sobreponderado, por lo que estiman que baje hasta los 310 dólares por acción, dato que supone un potencial de caída del 15%.

Para aquellos inversores que, como Enguix, se muestran prudentes con el valor, otra forma de subirse al 'boom' del coche eléctrico sería diversificando entre fabricantes. "Mi recomendación es invertir en otras compañías, además de Tesla, como por ejemplo en ETF (fondos cotizados) del sector de la automoción", aconseja Enguix.

El ETF de Morningstar que invierte en el sector automovilístico 'First Trust NASDAQ Global Auto Index Fund' podría ser una alternativa a valorar. Este producto tiene presente en su cartera a firmas como Toyota, General Motors, Daimler o la propia Tesla. El pasado martes cotizó a 37,6 dólares por acción y cuenta con un rendimiento a 12 meses del 2,2%.