Los mercados rechazan el resultado electoral castigando con dureza al Ibex
La posibilidad de un Gobierno entre PSOE y Podemos, el más temido por los mercados, es factible con los resultados del 20-D. En todo caso, la gran incertidumbre lleva a una fuerte caída en bolsa
Los mercados estaban bastante tranquilos antes de las elecciones porque Podemos había perdido mucho fuelle. Y si recuperaba en las encuestas, era a costa del PSOE. Pero esta tranquilidad se ha terminado con los resultados electorales de anoche, que convierten en una posibilidad real el escenario más temido en bolsa: un Gobierno de coalición en el que la formación de Pablo Iglesias tenga una influencia decisiva que aborte la recuperación económica. En todo caso, la difícil gobernabilidad que se desprende de los resultados provoca una reacción muy negativa en la bolsa y en la prima de riesgo.
[Resultados por municipios y comunidades de las elecciones generales al Congreso y el Senado]
De esta manera, el diferencial entre el bono español y el alemán se disparaba más de un 13% hasta los 130 puntos básicos, aunque a medida que avanza la sesión se ha ido moderando para terminar en los 122 puntos básicos. El interés del bono español a diez años pasó del 1,7% del viernes al 1,81% nada más abrirse el mercado, lo que suponía un repunte de algo más del 6%. Pero de nuevo en este caso los nervios se han ido calmando para finalizar con una subida más moderada, de algo menos del 5%, lo que dejaba el interés del bono en el 1,79%.
No en vano, los inversores prefieren mantenerse al márgen en tanto que desde el punto de vista económico, que es lo que realmente importa al internacional, el peligro se encuentra en el frenazo de la inversión financiera directa y, con ella, la creación de empleo. De esta manera, la prima española se aleja aún más de la italiana, que aunque también se tensa por el miedo general del mercado, se encuentra en los 103 puntos básicos.
En cuanto a las principales bolsas del Viejo Continente, las ventas del Ibex 35 no han contagiado al resto de grandes plazas, que han finalizado con revalorizaciones. El selectivo español abría con caídas que superan el 2,5%, luego recuperaba posiciones y a medio día volvía a caer más de un 2% por debajo del nivel crítico de los 9.500 puntos, sus mínimos anuales, cuya pérdida abriría el abismo bajo los pies de los inversores. En el último tramo de la sesión ha intentado soportar esa barrera, pero finalmente ha sucumbido, por lo que la herida se ha desgarrado en el último momento, lo que ha dejado un retroceso del 3,62%. El Ibex ha finalizado en los 9.365 puntos.
Yendo al detalle, las mayores caídas han sido para Caixabank, que corrige más de un 7% muy afectada por la intestabilidad política que vive Cataluña. Aena se ha dejado también un 7% y Banco Popular y Merlin también han caído casi esa cantidad. Por cierto, que Banco Santander ha tenido su protagonismo después de anunciar la compra de la entidad portuguesa Banif por 150 millones de euros. Las acciones del banco han retrocedido un 4,85% en un mal día para el sector financiero.
En el mercado de divisas, en cambio, el euro se mantiene relativamente estable a pesar del peso que tiene España en la Unión Europea. Tanto es así que la moneda comunitaria se revalorizaba hasta los 1,09 billetes verdes al término de la sesión.
Peor escenario posible
El "riesgo político" en España se había disparado con el irresistible ascenso de Podemos tras las elecciones europeas, que llevó al nuevo partido a ser la primera fuerza en las encuestas. Pero desde entonces, había perdido muchísimo fuelle hasta situarse en cuarta posición en las encuestas, con lo que la percepción del riesgo se había diluido enormemente, como se había reflejado en una prima de riesgo que llegó a situarse por debajo de 100 puntos básicos y en las declaraciones de entidades tan importantes como las de la gestora del Santander. La remontada de las últimas semanas tampoco preocupaba en exceso, puesto que lo que recuperaba Podemos lo perdía el PSOE, con lo que seguía lejos una coalición de izquierdas.
[Resultados electorales por municipios y comunidades]
Pero esta tranquilidad saltó ayer por los aires con los resultados de las elecciones generales, que plantean como escenario factible un Gobierno de un pacto del PSOE y Podemos (tal vez con el apoyo de IU y, mucho menos probablemente, con el de ERC). Aunque ni mucho menos se puede dar por seguro este 'frente popular', la mera existencia de esta posibilidad pone muy nerviosos a los mercados, que, además, deben reajustar estas optimistas expectativas anteriores a la nueva realidad.
La incertidumbre que se desprende del resultado ante la difícil gobernabilidad basta como para que los inversores adopten una posición más cautelosa
Es verdad que la suma de PSOE y Podemos ha obtenido cuatro diputados menos que la de PP y Ciudadanos. Pero, dado que el partido de Albert Rivera ha insistido por activa y por pasiva en que no va a apoyar la investidura de Mariano Rajoy sino que se va a abstener (aparte de que estratégicamente no le conviene en absoluto, según los expertos), se antoja mucho más probable una alianza de los partidos de izquierda que trate de arrebatar el Gobierno al PP, para lo cual no es necesaria la mayoría absoluta. Y eso es lo que da miedo a los inversores internacionales, muchos de los cuales paralizaron sus inversiones hace algunas semanas por prudencia a la espera de los comicios.
Frenazo a las inversiones... y salida de patrimonio
De hecho, es muy probable que esta paralización de inversiones se generalice a partir de este lunes, hasta que se aclare cuál será la opción que ocupe el Ejecutivo. Y también que volvamos a ver fenómenos como la salida de patrimonios hacia Luxemburgo por temor a un peor tratamiento fiscal o incluso a un control de capitales. Estas salidas ya se dieron con el ascenso de Podemos en las encuestas pero se habían frenado desde hace meses, según varias entidades de banca privada. Ahora, con este resurgimiento es de esperar que se vuelvan a acelerar.
Y es que, aunque el mercado no asuma como demasiado probable esta alianza de izquierdas, la incertidumbre que se desprende del resultado electoral ante la difícil gobernabilidad del país -y la posibilidad de repetición de las elecciones- basta como para que los inversores adopten una posición mucho más cautelosa que la que tenían hasta ahora. Como es sabido, el dinero es miedoso y va a ser difícil que asuma riesgos antes de que se aclare el panorama político español.
Los mercados estaban bastante tranquilos antes de las elecciones porque Podemos había perdido mucho fuelle. Y si recuperaba en las encuestas, era a costa del PSOE. Pero esta tranquilidad se ha terminado con los resultados electorales de anoche, que convierten en una posibilidad real el escenario más temido en bolsa: un Gobierno de coalición en el que la formación de Pablo Iglesias tenga una influencia decisiva que aborte la recuperación económica. En todo caso, la difícil gobernabilidad que se desprende de los resultados provoca una reacción muy negativa en la bolsa y en la prima de riesgo.
- "Lo importante de las elecciones es no dar marcha atrás en el crecimiento económico" Eduardo Segovia
- En directo: las reacciones y posibles pactos tras los resultados de las elecciones generales Irene G. Peña José Manuel Rodríguez Sara de Diego
- Santander AM: "Estamos muy poco pendientes del riesgo político en España" Eduardo Segovia