España prueba el mercado y coloca sus bonos al mayor interés desde agosto

La subasta del pasado martes, en la que España colocó 4.015 millones de euros en letras a 6 y12 meses con un fuerte repunte de los intereses, tanto que le ha costado abandonar el club de los siete magníficos-esto es, los países que gracias al programa de expansión cuantitativa del BCE ha logrado financiarse a tipos negativos-, fue un aperitivo antes de la cita grande de la semana con el mercado. Y es que el papel que realmente sirve para medir la postura del de los inversores hacia un país es el que vence a medio y largo plazo.

Y en esas estáel Tesoro Público, que este juevesque ha colocado 3.465,6 millones de euros en bonos a tres años y obligaciones a cinco y diez, y se ha visto obligada a subir el interés en las tres referencias y por encima del 2,3% para la deuda a 10 años, según los datos de mercado recogidos por Efe.

De los 3.465,6 millones de euros adjudicados, 836,23 han salido a tres años con un interés marginal del 0,672%, superior al 0,508% anterior y el más elevado para este plazo desde noviembre; otros 656,40 millones han salido a cinco años con una rentabilidad del 1,306%, también por encima del 1,257% precedente de comienzos de mes y el mayor desde el pasado mes de agosto.

Los 1.972,99 millones de euros restantes se han adjudicado a diez años con un interés del 2,379%, en línea con lo que marca el mercado secundario pero, por primera vez desde agosto de 2014, por encima del 2,3%.

Las solicitudes de las entidades han alcanzado los 9.026,6 millones de euros, con lo que la ratio de cobertura, que es la proporción entre la demanda y el importe finalmente adjudicado, ha sido muy elevada, de 2,6 veces.

El miedo a Grecia aumenta la volatilidad

No en vano, esta nueva subasta, la penúltima de junio antes de que la semana que viene cierre el calendario de emisiones con letras a 3 y 9 meses, se produce en un momento delicado para la deuda soberana europea como consecuencia del aumento de la volatilidad por el miedo a un default de Grecia.

De hecho, el pasado martes, antes de la subasta, el interés del bono español a diez años escaló por encima del 2,5% y la prima de riesgo sobrepasó los 170 puntos básicos,su nivel más alto desde mayo de 2014. Desde entonces, el diferencial se ha vuelto a moderar y España llega a un mercado que prefiere mantenerse un poco al margen a la espera del desarrollo de los acontecimientos con la rentabilidad de su papel español más longevo arriba más de un 30% desde sus mínimos históricos de marzo.

Evolución del bono genérico a diez años de España (Bloomberg)

No en vano, laruptura de las negociaciones entre Grecia y las institucionesel pasado fin de semana y la deriva que están tomado las declaraciones de unos y otros, quehacen muy difícil un acuerdo, ha puestoen guardia a los inversores.Y es que la posibilidad de que el país heleno incurra en impago cuando el 30 de junio no pueda hacer frente a los 1.600 millones de euros que tiene que devolver al Fondo Monetario Internacional (FMI) crece por días.