Los buitres sobrevuelan Vértice 360º, que se dispara un 30% tras esquivar el concurso

Los buitres están al acecho en el mercado continuo y han encontrado en el acuerdo que alcanzó anoche el consejo de administración de Vértice 360º a una de sus mejores presas. La productora ha sido uno de los grandes protagonistas del parqué al dispararse más de un 30%, hasta los 0,063 euros por acción, con un volumen de negocio que supera los 35 millones de títulos apenas cuatro horas después de haber arrancado la sesión.

Para hacerse una idea de qué suponen estas cifras, Vértices 360 es el segundo valor que más se revaloriza de todo el mercado, sólo por detrás de Codere, otra reino de los taifas de la especulación, que están apostando hoy por la compañía tras la prórroga de un mes que ha conseguido con sus bancos acreedores.

Desde el punto de vista del volumen, éste alcanza máximos históricos, ya que la productora es el segundo valor más negociado, sólo por detrás de Bankia y por delante de grandes bancos como Sabadell y Santander. Además, la media de contratación del valor se sitúa en 5 millones, seis veces menos de las cifras que está alcanzando ya hoy.

El consejo de administración de Vértice 360 acordó anoche contratar a la entidad Confivendis para negociar con sus acreedores, con Hacienda a la cabeza, dentro del preconcurso en el que se encuentra, una medida con la que intenta esquivar el proceso concursal definitivo que recomendó aprobar José Herrero de Egaña, presidente de la compañía hasta el pasado 28 de diciembre.

Dos días después, y ante la negativa del resto de administradores a tomar esta postura, abandonó el consejo y abrió la puerta a la remodelación aprobada anoche y que conlleva que Fernández Sastrón y Peinado García dejen de ser independientes para ocupar los puestos de ejecutivos; además de nombrar vicesecretario no consejero al letrado Marco Bolognini.

Como adelantó El Confidencial, detrás del desgobierno que vive la productora está el deseo de la CNMV -Comisión Nacional del Mercado de Valores- de que presente el concurso definitivo y, así, pueda suspender el valor y darse entrada a una nueva administración.