Se vende ciudad en Madrid

Hay quien vende casas, quien vende islas e, incluso países imaginarios o ubicados sobre plataformas oceánicas... Por eso, no tan extraño que el Banco Santander haya querido poner a la venta... una ciudad. Su cuartel general en Boadilla del Monte, a menos de 20 kilómetros del centro de Madrid. El banco obtendrá 4.000 millones de euros -1.400 millones de ellos en plusvalías-, si se desprende de los 44 edificios que la entidad tiene en España, incluido su buque insignia: la Ciudad del Santander.

Poco tiempo han disfrutado ‘en propiedad’ de la entidad estas espectaculares instalaciones. En la primavera de 2004, se trasladaron a Boadilla del Monte miles de trabajadores del banco. En el momento que el Santander encuentre un comprador para su mega ciudad financiera, pasará a ser inquilino de su propia creación. Según fuentes de la entidad, se trata de una “operación financiera” independiente a la compra del banco holandés, ABN Amro, y que busca optimizar el balance del banco, ya que le supone un menor coste alquilar que tener sus inmuebles.

Un paraíso financiero a 20 kilómetros de Madrid

“La Ciudad Financiera Santander Central Hispano es mucho más que un cambio de oficinas desde el centro de Madrid a la periferia. Es un proyecto tremendamente ambicioso, primero en España, que revoluciona la forma de trabajar en las grandes empresas”, según explicó el presidente del banco, Emilio Botín, cuando se presentó el proyecto en 2002. Hoy el sueño del banquero cántabro es una realidad, gracias también al buen hacer del arquitecto Kevin Roche, que supo captar perfectamente la idea que Botín tenía en la cabeza.

Sólo queda saber ahora quien pujará por hacerse con uno de los mayores centros financieros de Europa, que cuenta con 15.000 metros cuadrados de instalaciones deportivas y 14.000 de zonas comerciales.

Concretamente, ‘la ciudad en venta’ ocupa 160 hectáreas de las cuales sólo un 20% está construido. 100.000 metros cuadrados de oficinas repartidas en 13 edificios con 6.719 puestos de trabajo, un auditorio con capacidad para 1.000 personas, 5.601 plazas de aparcamiento y transporte de empresa que conecta con 17 puntos de Madrid y la periferia. Además de una guardería para 400 niños y un centro sanitario.

Pero como todo en esta vida no es trabajo, la Ciudad del Santander tiene un “hotel” de 170 plazas, campo de golf con 18 hoyos, biblioteca, gimnasio, piscina olímpica climatizada, cuatro pistas de tenis, ocho pistas de paddle, un circuito para correr y cinco restaurantes para todos los gustos (buffet tradicional, comida internacional, italiana y nouvelle cuisine). En definitiva, un paraíso para cualquier trabajador.

Ahora el grupo ha decidido poner a la venta toda una ciudad, su ciudad, para optimizar costes. Sin embargo, el cuartel general del Santander fue levantado precisamente para aumentar la eficacia de sus servicios centrales con un ahorro de 50 millones de euros anuales, por lo que ya hay quien se pregunta por los verdaderos motivos de esta nueva operación del gigante español de las finanzas y si estos ‘huelen a tulipán’.