Amper enseña las uñas a Tallada: "Nos gustaría que Avanzit empezara a vender mañana mismo"

Tocan tambores de guerra. La entrada de Javier Tallada a través de Avanzit en el capital de Amper no ha sentado muy bien. El consejo de administración de la tecnológica tiene muy claro cuál debe ser la actuación respecto a su nuevo accionista de referencia, que con un 8,7% supera la participación de Telefónica (6%): “Estamos encantados de que sea una participación financiera. De hecho, nos gustaría que empezara a vender mañana mismo”, asegura a este diario uno de los consejeros consultados.

Si las formas son importantes para planes futuros, Tallada no ha podido entrar en Amper con peor pie. “Primero nos enteramos de que había comprado un 3,5% en bolsa”, puntualiza el mismo interlocutor. “Dos días después, las cajas andaluzas -sabíamos que querían vender- colocaron su paquete del 5% a Avanzit, que informó de su compra a la compañía la tarde antes de comunicarlo a la CNMV”. Ya no había tiempo para reaccionar ni para buscar un comprador amigo al que ofrecer ese porcentaje disponible.

Unos días después, ya con el 8,7% bajo el control de Avanzit, Tallada telefoneó al presidente de Amper, Enrique Used, para explicarle el carácter financiero de su participación. Sin embargo, siempre según la versión de las fuentes consultadas, el empresario madrileño aprovechó la ocasión para dejar caer su disposición a colaborar en cualquier nuevo escenario que se presentara para ambas compañías. De nuevo, el intento frustrado de fusión entre Radiotrónica, embrión de la actual Avanzit, y Amper volvía a tomar cuerpo.

Ni por las buenas, ni por las malas

La negativa de Used, “con la Iglesia hemos topado”, fue meridianamente transparente y contundente. El presidente de Amper dejó claro a Tallada que “tenemos muy pocas conexiones con vosotros”, de modo que “por las buenas no vamos a hacer nada juntos; por las malas, todo lo que quieras lo discutimos en el consejo”, vino a decirle el presidente de la tecnológica a su homólogo, según las fuentes del consejo consultadas. Es decir, habrá paz si es sólo una inversión financiera.

Según fuentes del mercado, Amper habría encargado a un importante banco de negocios una bateria de posibles soluciones en caso de que Avanzit pretendiera ir a mayores. Este extremo, sin embargo, ha sido negado por los interlocutores del consejo consultados. "Trabajamos con muchos bancos, porque estamos constantemente mirando cosas, pero no se ha solicitado ningún tipo de servicio extraordinario a raíz de la operación realizada por Tallada", explican a este diario.

El recuerdo de la operación Radiotrónica, donde ya estaba como cabeza visible Tallada, que en 1999 intentó sin éxito fusionarse con Amper, juega en contra de los intereses de Avanzit en caso de querer sentarse en el consejo de la compañía. Entonces se interpuso Telefónica, que sigue siendo accionista con un 6% del capital. Así las cosas, si además de ganar dinero quiere tener voz y voto en la tecnológica, el financiero madrileño tendrá que gastarse bastante más dinero. El futuro dirá.