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Florentino compra más 'Iberdrolas' sin esperar a que la CNE le permita aumentar sus derechos políticos en la eléctrica
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Florentino compra más 'Iberdrolas' sin esperar a que la CNE le permita aumentar sus derechos políticos en la eléctrica

ACS va en serio. Sin esperar a que la CNE decida si le permite o no ampliar sus derechos de voto en Iberdrola, la constructora presidida

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Florentino compra más 'Iberdrolas' sin esperar a que la CNE le permita aumentar sus derechos políticos en la eléctrica

ACS va en serio. Sin esperar a que la CNE decida si le permite o no ampliar sus derechos de voto en Iberdrola, la constructora presidida por Florentino Pérez anunció ayer la compra de casi un 1% adicional de la eléctrica: 7,95 millones de acciones representativas del 0,88% del capital. Así, aunque ACS tiene ya casi el 11% de la empresa vasca, la ley sólo le permite el control efectivo sobre el 3% debido a que ya es accionista de una empresa competidora, Unión Fenosa, y el eléctrico es un mercado regulado.

La apuesta es importante porque si la CNE decide no eliminar esa limitación del 3%, previsiblemente en enero, a ACS le podría pasar lo que ya le ha ocurrido a Acciona con su entrada en FCC (15%) o, posiblemente, su más reciente desembarco en Endesa (24,9%): si no puede entrar en el consejo y participar en la gestión de la empresa, sólo le queda vender, recoger beneficios, y salir por la puerta de atrás.

En cambio, si la CNE le libera de esa limitación, ACS podrá ejercer todos sus derechos cuando alcance el 24,9% de Iberdrola, tal y como ha anunciado. Así, Florentino tendrá mucho más fácil llevar a cabo sus planes: fusionar la eléctrica vasca con Unión Fenosa y convertirse en líder también del sector eléctrico. ACS pidió el pasado 6 de octubre a la CNE que levantara esa limitación recogida en la Ley de Acompañamiento a los Presupuestos de 2001.

Ignacio Galán 'versus' Florentino Pérez

Este movimiento de ACS, valorado en 264,5 millones de euros a cierre de mercado de ayer, se enmarca dentro de la lucha soterrada que mantiene Ignacio Sánchez Galán con Florentino Pérez por el control de la compañía. Uno, máximo accionista; otro, presidente, los dos quieren liderar la empresa. Precisamente, la reciente oferta de Iberdrola por la escocesa Scottish Power se interpretó como un golpe de mano de Galán puesto que, si llega a buen puerto esa operación, todos los actuales accionistas de Iberdrola verán reducidas sus participaciones en un 21%. Ese porcentaje será para los accionistas de Scottish.

No ha sido el único movimiento accionarial en la eléctrica. Víctor Urrutia, vicepresidente, también ha aumentado su participación en Iberdrola al comprar entre el 22 y el 27 de diciembre un total de 74.000 títulos de la empresa. Urrutia controla ahora el 0,154% de la compañía.

A principios de mes, también el otro vicepresidente Juan Luis Arregui, amplió su número de acciones hasta controlar un 2,04% de Iberdrola. Movimientos que demuestran que todos en la eléctrica están tomando posiciones para lo que viene en el futuro inmediato.

ACS va en serio. Sin esperar a que la CNE decida si le permite o no ampliar sus derechos de voto en Iberdrola, la constructora presidida por Florentino Pérez anunció ayer la compra de casi un 1% adicional de la eléctrica: 7,95 millones de acciones representativas del 0,88% del capital. Así, aunque ACS tiene ya casi el 11% de la empresa vasca, la ley sólo le permite el control efectivo sobre el 3% debido a que ya es accionista de una empresa competidora, Unión Fenosa, y el eléctrico es un mercado regulado.