Los nuevos empleos para hacer España energéticamente independiente y sostenible

Las ovejas de Rosendo pastan entre las placas fotovoltaicas de la planta de Las Corchas, en la localidad sevillana de Carmona. En ese mismo lugar, las abejas de Juan y su hijo, cuarta y quinta generación de apicultores, por su parte, disfrutan de una variada y suculenta carta de flores, desde especies autóctonas, como la argamula o el eucalipto, hasta cultivos vecinos de almendros, naranjos o girasoles. Las ovejas desbrozan el terreno; los paneles le dan sombra; las abejas se alimentan; aparentemente, todos ganan. También Daniel, el supervisor de la planta, que ha conseguido el trabajo que siempre deseó cerca de su casa.

Esta es la primera iniciativa comercial en España de producción de miel solar en el interior de una planta fotovoltaica a través de apicultores locales. El objetivo de instalar el apiario con un cultivo agrovoltaico y de la mano de un apicultor era demostrar que se puede compartir sin competir por el uso del suelo. En paralelo, se hacen cursos de apicultura y actividades de apiturismo en colaboración con el ayuntamiento. Como espacio de innovación abierta, además, dos ‘startups’ tecnológicas españolas, Protofy y Smartbee, han implementado un sistema de sensorización de colmenas para hacer más eficiente su explotación. Esta planta alimentará a cerca de 50.000 hogares, unas 120.000 personas, según los datos aportados por Endesa.

En el entorno de otra fotovoltaica como la de Fregenal y Bodonal de la Sierra, en Badajoz, se ha dado empleo a cerca de 800 personas y formación a más de 250. Durante la construcción de las plantas, además, los pueblos se han llenado de nuevos habitantes que han alquilado sus pisos, han comprado en sus tiendas y han comido en sus bares, algo que ha reactivado una economía local algo aletargada a raíz del éxodo rural de los últimos 20 años. Según el Banco de España, 3.400 municipios españoles, el 42% del total, sufren riesgo de despoblación. España, de hecho, es el cuarto país europeo en riesgo de despoblación rural, solo por detrás de Finlandia, Estonia y Letonia.

Ese ‘valor compartido’ que trae la formación de la población local es el 'leitmotiv' de los 27 proyectos renovables que ha puesto en marcha Endesa a través de su filial Enel Green Power España en nuestro país. Solo el proceso de construcción de estas iniciativas va a dar trabajo a más de 4.200 personas en los próximos tres años.

A finales del presente año, EGP España habrá formado a más de 4.000 individuos en operación, mantenimiento y construcción de plantas solares y eólicas, y en montaje de paneles. “El beneficio de estos proyectos trasciende muchas veces del municipio a la región. También llega a los sectores primario y terciario a través de colaboraciones con entidades ganaderas, agrícolas, asociaciones de mujeres, discapacitados”, explica Rafael González, director general de Generación de Endesa.

"De nada sirve llenar los tejados de placas solares si no revierte en la comunidad, que, muchas veces, ya es reacia a albergar estas instalaciones"

En 2021, las energías verdes supusieron más de la mitad de la producción nacional (51,3%), con la eólica a la cabeza, seguida de la hidráulica y la solar fotovoltaica, según Red Eléctrica Española. Sin embargo, nuestra dependencia energética exterior supera aún el 70% o, lo que es lo mismo, importamos algo más de dos terceras partes de la energía que consumimos. Esto implica que no controlamos el precio de la electricidad que importamos y, en cambio, estamos a merced de la inestable situación geopolítica y de los mercados, donde se han disparado los precios del petróleo y el gas natural.

Para lograr la independencia energética, además, “los trámites administrativos deben agilizarse y, no menos importante, facilitar también que los componentes de fabricación sean locales, que toda la cadena de suministro sea local, fabricar aquí los paneles solares en vez de importarlos”, añade el director general de Generación de Endesa. Una afirmación que corrobora Álvaro Luna, profesor del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la UPC: “De nada sirve llenar los tejados de placas solares si eso no revierte en la comunidad, que, muchas veces, ya es de entrada reacia a albergar este tipo de instalaciones”, ni hacerlo sin un diseño sostenible, “porque en 25 años se van a tener que retirar esas placas solares y no pueden suponer un impacto para el medio ambiente”.

Otros proyectos: el parque eólico más grande de España

Otro de los proyectos renovables destacados de la compañía es el parque eólico más grande de España, Tico Wind, en Aragón, con una capacidad de 180 MW, que contrató al 30% de la mano de obra local para su construcción. Cerca de esta planta eólica, la filial de renovables de Endesa está construyendo dos plantas solares con un total de 77 MW, aunando por primera vez ambas tecnologías en una misma zona.

En Andorra, tras el cese de la actividad de la central térmica, ha iniciado la construcción de la planta solar con una potencia instalada de 49,71 MW, donde participará al menos el 30% de la mano de obra local. Esta planta evitará la emisión a la atmósfera de más de 32.000 toneladas de CO₂, equivalente a la circulación de 22.104 coches al año.

En Extremadura, además de las plantas mencionadas anteriormente, se está iniciando la construcción de cinco proyectos solares de 49,5 MW de capacidad. El resto de plantas renovables que tiene Endesa en proceso de despliegue se distribuyen por Andalucía, Castilla-La Mancha o Baleares, todas ellas con la sostenibilidad y la innovación como piezas clave para hacer convivir energía solar y sector primario.