La UE pretende ahora 'colar' el gas natural como energía verde

Un documento filtrado ayer a través de las redes sociales alerta que la UE está estudiando la posibilidad de etiquetar las inversiones en proyectos de gas como "verdes" en el marco de la nueva Taxonomía de Actividades Sostenibles de la UE: el pionero sistema de clasificación para definir qué inversiones y actividades económicas son verdaderamente sostenibles y están en consonancia con los objetivos del Pacto Verde Europeo.

La posibilidad de que el gas sea etiquetado finalmente como inversión sostenible en la nueva reglamentación sobre actividades económicas en la UE, ha provocado la airada protesta del colectivo de expertos en finanzas sostenibles que asesoró a la Comisión para la elaboración de dicho documento.

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Los analistas sospechan que Bruselas estaría recibiendo presiones para incluir la financiación de gas natural en la taxonomía de regulación por parte de los grupos de presión de la industria y la amenaza de veto de algunos de los Estados miembros.

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Asimismo, más de doscientos científicos, gobiernos (como los de España e Irlanda), instituciones financieras, empresas de energías renovables y oenegés para la defensa del medio ambiente, se han dirigido a las autoridades europeas para exigirles, de facto, que mantengan la financiación del gas fuera de la Taxonomía de la UE, así como que garanticen que las ayudas del Plan de Recuperación para Europa se destinarán exclusivamente a inversiones sostenibles que permitan alcanzar el objetivo de la UE de ser una economía neutra en carbono para 2050.

Para Sebastian Godinot, economista de la Oficina Europea de WWF, las autoridades de la UE cometerían un grave error si se sometieran a los intereses del lobby gasístico desoyendo a los científicos “El gas es un combustible fósil; la mera idea de clasificarlo como ambientalmente sostenible es una vergüenza. La nueva regulación se ideó originalmente para alejar el 'greenwashing' de las instituciones financieras: no debe convertirse en una de las principales herramientas de lavado verde del mundo, esta vez con el sello de aprobación de la UE".

La credibilidad de la UE, en riesgo

Los expertos señalan que la taxonomía de la UE podría convertirse en un estándar de referencia a nivel internacional, una herramienta muy útil para otros países a la hora de determinar qué actividades son verdaderamente ecológicas y enfocar las inversiones sostenibles hacia ellas. Pero el hecho de contemplar al gas como energía verde restaría credibilidad a los criterios de esta estrategia, poniendo en duda el liderazgo de la UE alcanzado con el Green Deal. No hay que olvidar que China y otros países están esperando la presentación final de la taxonomía para elaborar sus propios criterios de sostenibilidad para productos financieros.

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Por último destacan que el propio Escenario de Desarrollo Sostenible de la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por su sigla en ingles) subraya, entre otros aspectos relacionados con esta fósil, que las previsiones de demanda de gas son incompatibles con los objetivos del Acuerdo de París, que las emisiones de metano hacen que el gas sea más intensivo en carbono que el propio carbón y que la construcción de nuevas infraestructuras de gas corre el riesgo de generar activos varados.