"Cada vez más empresarios ven la sostenibilidad como factor de innovación"

Quienes entienden la sostenibilidad como un valor añadido a la marca no están leyendo correctamente los cambios que se están produciendo en el mundo de los negocios. El respeto al medio ambiente es ahora el patrón a seguir, la pauta de mercado. Un estándar que no se demuestra luciendo una acreditación en forma de diploma o adoptando un nuevo lema de compañía.

La sostenibilidad, entendida como un compromiso social y medioambiental con las personas y el planeta, debe pasar a formar parte del ADN de la empresa. Y la certificación B Corp es una de las que merece mayor reconocimiento al respecto. No en vano para formar parte de este movimiento la empresa debe modificar incluso sus estatutos sociales para incluir en los mismos el compromiso social y medioambiental. Hablamos con Pablo Sánchez, Managing Director de B Lab Spain.

¿Cuál es el origen del movimiento B CORP y a qué objetivos quiere contribuir?

El origen se remonta a 2007 de la mano de tres emprendedores que tenían la idea de utilizar la fuerza de las empresas para cambiar el mundo. Venían de una experiencia personal previa que fue decisiva. Habían fundado en los 90s la empresa AND1, una empresa de zapatillas deportivas, que experimentó un rápido crecimiento que dificultó equilibrar sus valores personales y el compromiso social de la compañía con las presiones que ejercían los inversores para obtener resultados económicos. ¿No se podía concebir otro modo de empresa en el que la empresa buscara generar un triple impacto positivo: social, ambiental y económico? Ellos creyeron que sí. A partir de ahí, se originó el movimiento B Corp al cual se han unido más de 4.000 empresas en todo el mundo. Hoy la visión del movimiento es liderar un cambio sistémico para construir un modelo económico equitativo, inclusivo y regenerativo para todas las personas y el planeta. Y ese cambio pasa por un cambio en el paradigma empresarial.

"la sociedad está demandando mejores empresas y tenemos que facilitar mecanismos para lograrlo"

Hoy en día existe una cierta saturación de certificaciones de sostenibilidad en el mercado. Desde un punto de vista estrictamente medioambiental, ¿en qué se diferencia B Corp del resto de acreditaciones?

Nuestra definición del movimiento B Corp excede el concepto de certificación. El movimiento B Corp, en realidad, pretende contribuir al cambio de modelo económico y empresarial que necesitamos para responder de forma efectiva a los grandes desafíos que tenemos. Para ello, nuestra aproximación es apoyar la transformación empresarial ofreciendo diversas herramientas: estándares de gestión y medición de impacto social -que ya utilizan más de 150.000 empresas en todo el mundo-, desarrollo de políticas públicas, activación de comunidades locales y globales que impulsen este cambio. La certificación, aunque muy visible, no deja de ser una herramienta más para reconocer a las empresas que lideran esta visión empresarial. Desde la perspectiva de la certificación, B Corp evalúa el desempeño integral de la compañía con relación a sus resultados sociales, ambientales y de gobernanza. No es una certificación de producto o proceso, sino una certificación del conjunto de la compañía que le confiere identidad propia. Además, algo muy distintivo y único, es que la empresa debe también modificar sus estatutos sociales para incluir en los mismos su compromiso social y medioambiental, con lo que los administradores deben rendir cuentas del triple impacto de la compañía y son valorados en concordancia a estos resultados.

Tras su experiencia en nuestro país ¿cómo considera que está evolucionando el compromiso con la sostenibilidad y la economía circular en las empresas españolas?

Afortunadamente de forma muy positiva. Es cierto que vamos a rueda de otros países europeos, pero las regulaciones que se están impulsando y el mayor interés por parte de los inversores están acelerando estos cambios de forma muy positiva en los últimos años. Cada vez más empresarios han entendido que la sostenibilidad es un factor de competitividad e innovación y, por tanto, una pieza fundamental de la estrategia de la compañía para su supervivencia.

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Qué tipo de exámenes deben superar las empresas para acceder a la certificación B Corp. Sin pedirle nombres, ¿podría decirme si han dejado a alguna fuera al no superar sus requerimientos o quien paga tiene el sello asegurado?

El estándar es exigente y robusto. Se conoce como Evaluación de Impacto B y es gratuito y confidencial para que cualquier empresa pueda hacer un autodiagnóstico y pueda medir y gestionar su impacto. Para lograr la certificación se necesitan un mínimo de 80 puntos sobre 200. La puntuación promedio de las empresas que completan el estándar está ligeramente por encima de 50 puntos. Por tanto, muchas empresas inicialmente no superan el estándar. Nuestra visión es apoyar a estas empresas para que puedan iniciar un proceso de transformación y mejora de su impacto social. Hemos visto ejemplos de empresas como tras tres años de trabajo han logrado superar el estándar. Es una enorme satisfacción porque el proceso logra integrar en la cultura de la empresa la sostenibilidad como pilar estratégico. Además, cada tres años deben recertificarse y así se asegura que mantienen ese compromiso de mejora continua.

Hay quienes opinan que acceder a este tipo de certificaciones solo está al alcance de las grandes compañías y que en cambio requiere un esfuerzo mucho mayor por parte de las pymes ¿qué opina al respecto?

Nuestros datos desmitifican esta percepción. En España, el 66% de las empresas B Corp facturan menos de 5 millones de euros y únicamente el 3% facturan más de 100 M €. Con ligeras diferencias, estos porcentajes son similares en el resto de países. El movimiento B Corp ha atraído principalmente a PYMES que nacen con un claro propósito social y quieren redefinir el sentido del éxito empresarial. En los últimos años, observamos un creciente interés de grandes compañías, que por supuesto celebramos. Para ellas el esfuerzo es significativamente mayor por las transformaciones y cambios que deben realizar en su modelo empresarial.

Opinión

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Si las cosas se hicieran mejor y el compromiso de las empresas con la sostenibilidad y la economía circular fuera mayor no sería necesario recurrir a este tipo de acreditaciones ¿comparte esta idea?

Totalmente. Además, necesitamos que esta adopción sea a gran escala. Por esta razón, estamos impulsando en España una propuesta para que se reconozca legalmente la figura legal de las empresas con propósito o las Sociedades de Beneficio e Interés Común. Esta figura permitiría que todas las empresas que adoptaran estos compromisos pudieran acogerse a esta forma legal y, por tanto, fueran reconocidas por la sociedad. En otros países europeos existen estas figuras, como la Società Benefit en Italia o la Enterprise à Mission en Francia. En España hemos publicado un Libro Verde de las Empresas con Propósito y un Manifiesto que ha sido firmado por más de 50 personalidades, 300 organizaciones y ha recogido 30.000 firmas en la campaña abierta en Change.org. Sin duda, la sociedad está demandando mejores empresas y tenemos que facilitar mecanismos para lograrlo.

Para cuando una certificación B Corp para gobiernos y administraciones ¿no deberían ser nuestras instituciones las primeras en acreditarse ante la sociedad?

No hay duda de ello. Pero no creo que una acreditación aquí sea la solución. En mi opinión, se deben impulsar mecanismos de transparencia y rendición de cuentas que faciliten la valoración de la labor pública. Necesitamos un mejor sector público para tener mejores empresas.