Las zonas de bajas emisiones garantizan ecosistemas urbanos sostenibles

La directora de la Oficina Española de Cambio Climático (OECC), Valvanera Ulargui, ha subrayado este miércoles que las zonas de bajas emisiones (ZBE) garantizan unos “ecosistemas urbanos sostenibles” porque, además de generar “empleo y riqueza”, contribuyen a “paliar el cambio climático y la pérdida de biodiversidad”.

Ulargui ha hecho estas declaraciones en el segundo congreso de Smart Distribution sobre movilidad urbana organizado por la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc), que ha analizado la implantación de las ZBE en las ciudades españolas de más de 50.000 habitantes y su impacto en la distribución urbana de mercancías.

Las medidas "no son prohibiciones o imposiciones”, sino “beneficios para rentabilizar los desplazamientos, la economía y la salud”

La necesidad de descarbonizar la economía y la crisis sanitaria desatada por el covid-19 han obligado a la sociedad a “cambiar los hábitos de movilidad y de consumo”, ha señalado Ulargui, que ha descrito el modelo de las ZBE como “una estrategia de desarrollo económico que integra la variable climática”. Una conclusión "compartida por el secretario general de la ONU", António Guterres, ha recordado Ulargui, ya que “la recuperación solo puede ser en clave verde”.

La directora de la OECC ha explicado que “la estrategia contra el cambio climático y en favor de la transición energética” del Gobierno, que ha descrito como “un plan de recuperación verde y digital”, se ha diseñado teniendo en cuenta que “el 80% de la población española vive en las ciudades”, lugar donde se generan “la mayor parte de las emisiones”. “La lucha contra el cambio climático es prioritaria en la agenda política del Gobierno”, un desafío que ya cuenta con una ley que establece los objetivos para descarbonizar la economía en 2050, un compromiso que "debe contar con la colaboración del sector logístico y de transporte, que supone una parte importante de las emisiones" de gases de efecto invernadero (GEI).

La Ley de Cambio Climático facilitará "alcanzar la neutralidad climática en 2050" y permitirá reducir “una de cada tres toneladas de GEI para el año 2030”, según Ulargui.

Las grandes áreas para trabajar en esta mitigación de las emisiones son “la movilidad y el transporte”, que representan “el 27% de las emisiones”. Por ello, este plan de recuperación “en clave verde y digital” introduce “medidas tangibles”, como “la restricción de determinados vehículos en las ZBE, la ampliación de las ya existentes y el fomento de la electrificación del transporte privado y público”.

Además, Ulargui ha destacado la importancia de establecer “corredores verdes que conecten las zonas verdes periurbanas con las del centro de las urbes” para “repartir la carga”, porque “todo el ecosistema urbano debe responder a ese plan''. “Tenemos que tener al ciudadano de nuestro lado”, ha subrayado, ya que “no son prohibiciones o imposiciones”, sino “beneficios para rentabilizar los desplazamientos, la economía y la salud”.

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J. R. S.

La directora de la OECC ha anunciado que las guías para la creación de ZBE “están en fase de consulta pública”, un trámite con el que se busca ofrecer “pautas para armonizar y adaptar las transformaciones necesarias para cada urbe” con el objetivo de “pasar a una fase de cooperación que impulse la transformación positiva para todos”. El director de Cadena de Suministro de Aecoc, Alex Sánchez, ha reconocido que “la sostenibilidad es importante para los consumidores” y que el impacto de la entrega de mercancías sobre el medio ambiente” es un asunto que “les preocupa”.

Sánchez ha señalado que “las empresas saben que tienen que avanzar en sostenibilidad”, aunque ello “tendrá su impacto en los costes”, por lo que considera necesario que haya “uniformidad en el marco regulatorio” y que se ayude “a las pymes y autónomos a hacer esa transición”.

La tecnología y la innovación serán importantes en este ámbito, ha asegurado la secretaria general de Transportes del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), María José Rallo. Rallo advierte de que tanto la crisis sanitaria como la climática “implican retos de movilidad que deben modificar nuestros hábitos de consumo hacia un modelo de políticas públicas de movilidad descarbonizado, seguro y digital”.