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Ecija esconde su facturación real: el bufete no presenta cuentas desde el ejercicio 2019
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Los 43,6 millones de 2021, inverificables

Ecija esconde su facturación real: el bufete no presenta cuentas desde el ejercicio 2019

Tras destapar El Confidencial que sus cuentas de 2018 y 2019 revelaban unos ingresos muy inferiores a los declarados públicamente, el despacho no ha vuelto a depositar balances en el Registro Mercantil

Foto: Alejandro Touriño, socio director de Ecija; Hugo Écija, presidente, y Pablo Jiménez de Parga, vicepresidente.
Alejandro Touriño, socio director de Ecija; Hugo Écija, presidente, y Pablo Jiménez de Parga, vicepresidente.
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Lejos de aclarar las dudas sobre su facturación real, el despacho de abogados Ecija opta por esconder sus números. Después de que El Confidencial destapara que las cuentas del bufete en los ejercicios 2018 y 2019 revelaban unos ingresos en España muy inferiores a los declarados públicamente, la organización que preside Hugo Écija no ha vuelto a depositar sus balances en el Registro Mercantil. Una decisión que, de nuevo, pone en tela de juicio la veracidad de las cifras de negocio que la firma ha comunicado a través de los medios en los dos últimos años.

En 2020, Ecija aseveró que su facturación en nuestro país había sido de 43,51 millones de euros; cuantía que en 2021 se elevó a 43,6 millones. Unos presuntos ingresos que, sin cuentas depositadas en el Registro Mercantil, se tornan imposibles de verificar y sobre los que se extiende la sombra de las sospechas despertadas en los ejercicios anteriores. El Confidencial se puso en contacto ayer con Hugo Écija, Pablo Jiménez de Parga y Alejandro Touriño, presidente, vicepresidente y socio director de Ecija, para consultarles la razón de la falta de presentación de los balances, sin obtener respuesta por su parte.

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Según desveló este diario en abril del año pasado, en los ejercicios 2018 y 2019, la cifra de ventas que figuraban en la documentación de Ecija era muy inferiores a las que la firma había trasladado en sus comunicaciones públicas. En 2018, la documentación fiscal y mercantil aportada por el bufete solo acreditaba 15,3 millones de euros, lejos de los 34,2 millones que afirmó haber facturado —es decir, casi 19 millones de euros menos—. Las cuentas depositadas en el Registro Mercantil del ejercicio 2019 reflejaban un volumen de negocio de 14 millones de euros, cerca de 25 millones menos de los 39 millones que el despacho declaró haber ingresado en España.

La 'Memoria financiera' siembra más dudas

Las explicaciones que ofreció el bufete respecto del primer ejercicio, el de 2018, lejos de disipar las dudas, las acrecentaron. Tras la primera consulta realizada por El Confidencial, el 19 de abril de 2021, el departamento de comunicación de Ecija remitió a esta redacción un correo electrónico, con copia a su socio director, Alejandro Touriño, en el que adjuntaba un documento de cinco páginas titulado 'Memoria financiera - Ejercicio 2018', fechado el 26 de abril de 2019.

placeholder Portada del documento 'Memoria financiera - Ejercicio 2018', remitido por Ecija a El Confidencial el 19 de abril de 2021.
Portada del documento 'Memoria financiera - Ejercicio 2018', remitido por Ecija a El Confidencial el 19 de abril de 2021.

En la quinta página del documento, Ecija exponía en un cuadro titulado 'Cifra de negocio' la relación de sociedades de la cual, supuestamente, salía la facturación de 34,15 millones de euros que el bufete había declarado en España en el ejercicio 2018. Sin embargo, hay una serie de circunstancias de dicho listado que ponen en duda su autenticidad. [En la imagen se expone un pantallazo del cuadro 'Cifra de negocio' presente en el documento remitido por Ecija a El Confidencial]

placeholder Cuadro 'Cifra de negocio', del documento 'Memoria financiera - Ejercicio 2018' remitido por Ecija a El Confidencial el 19 de abril de 2021.
Cuadro 'Cifra de negocio', del documento 'Memoria financiera - Ejercicio 2018' remitido por Ecija a El Confidencial el 19 de abril de 2021.

La primera de dichas circunstancias es que el bufete se anota como propia la facturación de 2018 de dos firmas que integró en 2019: Jiménez de Parga (Jidepar SL) y Colón de Carvajal (Ecija Colon SL). El anuncio de la unión con Colón de Carvajal se produjo en el diario 'Expansión' el 24 de abril de 2019, mientras que la de Jiménez de Parga fue el 6 de junio de 2019. Según la versión ofrecida a este medio por el presidente del despacho, Hugo Écija, con ambas firmas venían colaborando en diversos asuntos desde hacía tiempo y ello justificaba contar como propia la facturación de las mismas con efecto retroactivo. Consultados por El Confidencial, en Colón de Carvajal desmintieron dicha explicación y subrayaron que nunca existió una unión societaria con Ecija, simplemente operaron bajo su marca unos meses antes de abandonarla rumbo a Martínez Echevarría Abogados en abril de 2020.

El segundo elemento llamativo es que Ecija incluye como propia la facturación de AG Aguilar y Aguilar Abogados (actual denominación de Muro 1 Abogados SLP, tal y como consta en el Registro Mercantil), bufetes que no guardan ningún tipo de relación societaria o de marca con la firma que preside Hugo Écija. Como uno de los propios socios de AG Aguilar indicó a El Confidencial, el suyo es un despacho independiente fundado por un grupo de letrados que no compartían la estrategia de Díaz de Aguilar de integrarse en Ecija. Igualmente, Aguilar Abogados es un bufete con entidad diferenciada y funcionamiento propio, como puede comprobarse en su página web. Sin embargo, en la 'Memoria financiera' que Ecija remitió a este diario, se incluyen como propios los más de 551.000 euros de ingresos que AG Aguilar logró en 2018, y los 1,8 millones que obtuvo Aguilar Abogados en ese mismo ejercicio.

Foto: Alejandro Touriño, socio director; Hugo Écija, presidente, y Pablo Jiménez de Parga, vicepresidente de Ecija.

El tercer punto de discordia es la inclusión en la relación de sociedades de Ecija Legal SL y Ecija Legal & Compliance SL, como si fueran dos entidades diferenciadas, anotándose por separado la facturación de ambas —5,99 millones de euros la primera y 4,52 millones la segunda—. Sin embargo, según consta en el Boletín Oficial del Registro Mercantil del 5 de octubre de 2018 [según puede verse en la siguiente imagen], se trata de la misma sociedad sobre la que, simplemente, se llevó a cabo un cambio de denominación y de objeto social. La segunda quedó disuelta en octubre de ese año, trasladándose su facturación hasta esa fecha a la primera. Ecija, sin embargo, los contaba como si fueran ingresos independientes, duplicando los mismos.

placeholder Captura del Borme del 5 de octubre de 2018.
Captura del Borme del 5 de octubre de 2018.

El último gran elemento que despierta suspicacias es la presencia de algunas formas societarias y tipos de personas jurídicas poco comunes en las estructuras de los bufetes. Según el documento remitido por Ecija, sus oficinas en Zaragoza y Pamplona facturación a través de dos tipos de entidades: una sociedad limitada (Ecija Legal Zaragoza SL y Ecija Legal Navarra SL) y una sociedad civil profesional (Ecija Zaragoza SCP y Ecija Navarra SCP). La versión ofrecida por Ecija Madrid es que gran parte de los ingresos generados en las capitales aragonesa y navarra se gestionan a través de las SCP —1,3 millones de euros y 1,8 millones, respectivamente—. También en Galicia existe una SCP, Ecija Galicia, que supuestamente facturó en 2018 más de 900.000 euros. De ninguna de estas tres sociedades el bufete fue capaz de mostrar un documento que acreditara su existencia ni sus muy elevados ingresos.

El bufete tampoco mostró ningún documento que permitiera testar la existencia de Ecija-ADC España UTE (a quien atribuía unos ingresos de 1,65 millones de euros), ni los más de dos millones de euros que aseveraba que había ingresado la Agrupación de Interés Económico (AIE) Julio Pérez Díaz de Aguilar Luis Tallo y Muro 1 Abogados.

La facturación en España, en cuestión

Tras las dudas reveladas por El Confidencial respecto de la facturación de Ecija en España en 2018, el bufete prefirió no responder a las preguntas de este diario cuando le consultó por la diferencia entre los ingresos declarados públicamente en 2019 —39 millones de euros— y la cifra de negocio que constaba en las cuentas de sus sociedades depositadas en el Registro Mercantil —14 millones de euros—. Según los ingresos declarados en sus propios balances, la facturación de la red societaria de Ecija apenas supera los 10 millones de euros.

A ello cabría sumar la cifra de negocio de Jidepar SL (Jiménez de Parga) y Ecija Díaz de Aguilar SL, bufetes que operaron en dicho ejercicio bajo la marca Ecija, aunque sin que constara en el registro ni en sus propias cuentas ningún tipo de vinculación societaria con la red que lidera Hugo Écija. El primero generó unos ingresos de 2.657.820 euros y el segundo, de 951.866 euros.

Foto: Alejandro Touriño, socio director; Hugo Écija, presidente, y Pablo Jiménez de Parga, vicepresidente de Ecija.

Aceptando como propios de Ecija los ingresos de los dos despachos (lo cual, en sí mismo, resulta cuestionable), la distancia con la facturación declarada en España en 2019 sigue siendo enorme. Ni el bufete ni ninguno de sus directivos han explicado en ninguna de sus entrevistas o intervenciones la razón de esa diferencia, ni han detallado si existen otras sociedades a través de las cuales estén operando. Unas suspicacias que, inevitablemente, ponen en cuestión los datos de los ejercicios 2020 y 2021, en los cuales su cifra real de negocio se ha vuelto imposible de comprobar, en la medida en que la dirección del bufete no cumple con su obligación legal de presentar cuentas en el Registro Mercantil.

Las únicas entidades del entramado societario que sí depositaron sus balances en 2020 han sido Ecija & Asociados Barcelona SL y Ecija Advisory SL. La primera declaró unos ingresos de 4.306.747 euros y la segunda, de 1.068.807 euros. Fuentes conocedoras del funcionamiento de la firma explican que ambas sociedades operan desde hace tiempo al margen de las directrices de la dirección de Madrid, encabezada por Hugo Écija, Pablo Jiménez de Parga y Alejandro Touriño. De hecho, las mismas fuentes indican que desde hace tiempo la relación de Gabriel Nadal, socio director de Ecija Barcelona, con Hugo Écija y Alejandro Touriño está rota. Incluso, revelan, Nadal ha llegado a mantener reuniones con otros bufetes para abordar la posible salida de la oficina de la Ciudad Condal de la estructura de Ecija. Un movimiento, sin embargo, que no ha llegado a fructificar.

Foto: Hugo Écija, presidente ejecutivo de Ecija.

Por su parte, y a pesar de ser propiedad de Hugo Écija, Ecija Advisory SL lleva a cabo una labor de gestoría, con un funcionamiento independiente respecto de la dirección de Madrid, según confirman fuentes de la firma. De hecho, ni siquiera comparte sede con el bufete, que se encuentra en la planta 16 de la Torre de Cristal. Ecija Advisory se ubica en la calle Poeta Joan Maragall 3.

Al margen de Ecija Barcelona y Ecija Advisory (que en conjunto suman algo menos de 5,4 millones de euros), la facturación real de Ecija en España en 2021 resulta una incógnita. Eso sí, a pesar de haber eliminado cualquier posibilidad de verificación, el bufete sigue declarando a los medios de comunicación unas elevadas cifras de ventas en nuestro país. De hecho, en los últimos datos remitidos al diario 'Expansión', aseguran haber ingresado 43,6 millones de euros en España, lo que les permitió alcanzar los 75,4 millones de euros a nivel global.

El Confidencial se puso ayer en contacto con Hugo Écija, Pablo Jiménez de Parga y Alejandro Touriño para consultarles a través de qué sociedades ha operado Ecija en España en los últimos dos ejercicios a efectos de poder verificar su facturación. Ninguno respondió a dicha solicitud de información.

Lejos de aclarar las dudas sobre su facturación real, el despacho de abogados Ecija opta por esconder sus números. Después de que El Confidencial destapara que las cuentas del bufete en los ejercicios 2018 y 2019 revelaban unos ingresos en España muy inferiores a los declarados públicamente, la organización que preside Hugo Écija no ha vuelto a depositar sus balances en el Registro Mercantil. Una decisión que, de nuevo, pone en tela de juicio la veracidad de las cifras de negocio que la firma ha comunicado a través de los medios en los dos últimos años.

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