¿Pandemia 'over'? Los juzgados ordenan la vuelta de la toga

Poco a poco, la normalidad precovid va regresando al día a día de los juzgados. Prueba de ello es que varios tribunales de España han retomado la obligación de la toga para todos los profesionales que intervienen en los procesos judiciales. Esta prenda era un 'must' para abogados, fiscales y otros actores que intervienen en un proceso judicial, pero con la pandemia se fijó como algo optativo.

La decisión de volver a vestir el tradicional traje se está tomando de forma unilateral por los tribunales que así lo consideran. Así, en Madrid, los juzgados de primera instancia núm. 102 y 103 de Madrid colgaron un cartel la semana pasada en que informaban que, a partir del 25 de abril, sería "obligatorio el uso de la toga por parte de los profesionales que quieran ejercer sus funciones en estrados". Algunos juzgados de Alicante, Valencia, Barcelona y Almería, entre otros, también han ordenado a los profesionales retomar esta vestimenta.

Desde septiembre de 2020, se decretó que el empleo de estas prendas dejaría de ser obligatorio. El motivo fue el riesgo de contagio de covid, ya que muchos profesionales no cuentan con una toga propia y visten las que les proporciona el juzgado, que son compartidas. En un principio, la dispensa se alargó hasta junio del año pasado, pero viendo que el covid seguía presente, el Ministerio de Justicia decidió extenderlo.

En una circular publicada en junio de 2021, determinó que la toga dejaría de ser exigible hasta que el Gobierno declare "de manera motivada y de acuerdo con la evidencia científica disponible, la finalización de la crisis sanitaria". Una fórmula abstracta que implicó la eliminación 'sine die' de la prenda.

TE PUEDE INTERESAR

El covid reflota el negocio de las togas 'online': "Las ventas han aumentado un 50%"

Irene Cortés

Sin embargo, ahora —y ante la falta de una directriz concreta por parte del ministerio o el Consejo General del Poder Judicial—, algunos jueces se están revolviendo en contra de esta extensión indefinida y están obligando a abogados, fiscales y otros actores a volver al uniforme habitual.

A pesar de no haberse pronunciado sobre esta cuestión, desde el CGPJ sí han dado algunas indicaciones sobre el uso de mascarillas en disposiciones judiciales. El pasado 22 de abril, la Comisión Permanente del organismo publicó una guía de buenas prácticas en la que recomendaba el tapabocas en espacios cerrados, "especialmente salas de vistas y salas de declaraciones, juzgados de guardia donde no se pueda guardar la distancia mínima de seguridad y lugares donde se produzcan aglomeraciones". En el documento, también se establecen otras medidas como la necesidad de mantener una ventilación y temperatura adecuadas y la limpieza y desinfección diaria de salas de vistas, despachos, salas de espera y otras áreas.

Toga sí, entrar en el juzgado no

El regreso de la prenda está generando opiniones encontradas entre los profesionales de la Justicia, que se dividen entre los que piden que se restaure definitivamente y los que abogan por su eliminación. Los motivos son diversos. Una gran parte de los profesionales opina que es un signo de respeto hacia las administraciones y el propio ciudadano. Además, creen que proyecta una imagen de igualdad entre todos los actores que se ven involucrados en el proceso judicial, quedando todos a la misma altura a ojos externos. Otros, en cambio, piden la supresión al considerar que se trata de una indumentaria propia de otro siglo que aleja la Justicia del ciudadano.

TE PUEDE INTERESAR

Los abogados, divididos ante la necesidad de usar togas en juicio

Irene Cortés

Otros abogados van más allá y critican que haya tribunales que exijan toga, mientras que (muchos) otros siguen amparándose en el covid para evitar volver al funcionamiento normal. "Todavía hay muchos juzgados que no te dejan entrar y mantienen mamparas en la entrada con la excusa de la pandemia", denuncian. Otro ejemplo llamativo es el cartel colgado a la entrada de un juzgado de Almería, donde no se deja pasar a los visitantes y se les pide que toquen el timbre una vez si vienen por un procedimiento civil y dos si es por una causa penal.