Allen y Herbert lideran el 'ranking' de bufetes de facturación por abogado

Solo Herbert Smith Freehills consigue romper el dominio del 'Magic Circle' en el codiciado 'ranking' de facturación por abogado. De este modo, el podio del pasado ejercicio lo componen Allen & Overy, Herbert Smith y Linklaters, inmediatamente seguidos por Clifford Chance, según los datos contenidos en el segundo 'Informe de facturación de despachos' elaborado por El Confidencial. Esta clasificación, especialmente valorada por los bufetes enfocados al trabajo transaccional (M&A, mercado de capitales, etc.), mide los ingresos de la firma por cada socio, asociado o cualquier otro profesional que realice trabajo facturable a cliente.

Allen & Overy se alza con el número uno gracias a una facturación por abogado de 529.630 euros. Tras él, Herbert Smith Freehills logra unos ingresos de 512.469 euros por profesional y Linklaters, de 499.091 euros. Allen y Linklaters repiten en el podio después de haber quedado segundo y primero el pasado ejercicio, en el que Herbert fue cuarto. Este año, esa posición es para Clifford Chance, con unos ingresos individualizados por profesional de 458.493 euros. El quinto, Hogan Lovells, registra una cuantía de 413.947 euros.

El primer bufete español en esta tabla vuelve a ser Uría Menéndez, que se sitúa en sexta posición con 393.232 euros. Séptimo, octavo y noveno son Cuatrecasas, Baker McKenzie y DLA Piper, los tres por encima de los 350.000 euros por abogado. Cierra el 'top 10' Pérez-Llorca, con 312.852 euros.

Fuera de las 10 primeras posiciones, en este orden, aparecen Sagardoy Abogados, Garrigues, Gómez-Acebo & Pombo y CMS Albiñana & Suárez de Lezo. La primera 'big four' del 'ranking' es Deloitte Legal, en el puesto decimoquinto. Y, tras ella, se sitúan Broseta, Ramón y Cajal, RocaJunyent, PwC Tax & Legal, EY Abogados, KMPG Abogados, DWF-RCD, Andersen, BDO Abogados y Auren Abogados.

Para interpretar la clasificación de facturación por abogado, que suele asociarse de forma un tanto errónea con la idea de mayor productividad, es relevante tomar en consideración que premia a los bufetes con un enfoque netamente transaccional, penalizando aquellos que cuentan con una oferta de asesoramiento más amplia y que incluye áreas de menor rentabilidad (o con una red de oficinas fuera de los grandes centros de negocio como Madrid y Barcelona). Para que la comparación permitiera extraer conclusiones menos matizadas, habría que comparar estructuras con los mismos departamentos y el mismo volumen de facturación.

Facturación por socio

Más matices requiere la tabla de facturación por socio en España, pues no todos los bufetes siguen un modelo de 'partnership' puro, en el que todos sus miembros son socios de cuota, conviviendo distintas estructuras societarias dentro de las firmas que prestan asesoramiento jurídico. Asimismo, debe tenerse en cuenta que algunos despachos no hacen público, de entre quienes ostentan el cargo formal de socio, cuántos son profesionales y cuántos de 'equity'.